Navegando En Tierra De Nadie

Prólogo

"La Orden de la Hoja Verde transcribe todos los documentos de la historia que pasan por sus manos. Argail era el escriba encargado de custodiar los textos más complicados y copiarlos en secreto. Era un puesto delicado, ya que exigía mucha discreción y devoción al puesto y no se lo otorgaban a cualquiera. Aunque eso no era de extrañar puesto que ningún escriba pertenecía a la orden, eran simples ciudadanos más elegidos al azar por el capellán y obligados a aceptar semejante honor bajo pena de muerte. Les adiestraban desde niños en el arte de la escritura y eran elegidos cuando demostraban sus dotes en caligrafía.

Una pequeña catástrofe ocurrida una mañana de invierno, le obligó a tomar una drástica solución para evitarse un castigo del capellán, famoso por su mal temperamento. El agua se filtró por una grieta en el techo de la biblioteca sagrada y dañó una serie de volúmenes. Arregló la gotera y fue remplazando uno tras uno los ejemplares a escondidas. El interior del volumen número trece era muy especial: Las Profecías de las Místicas.

Se pasaba las noches en vela copiando sin descanso letra a letra, dibujo tras dibujo, sin perder detalle del original, hasta el punto de plasmar las erratas para evitar ser descubierto.

Pero al ir a reubicar el último, se dio cuenta que había un vacío en la colección. Su edad no le jugaba malas pasadas, al contabilizar los números desde el principio, el número trece no estaba, había desaparecido en todas las colecciones. De todos ellos era el único que contaba con unas tapas forradas con terciopelo rojo y letras grabadas en negro. No era posible que hubiesen robado ese volumen, detrás olía a conspiración. Alguien no quería que se supiese el contenido de aquellos libros pero a la sala de los textos prohibidos únicamente tenían acceso el capellán de la orden y él, un simple escriba que nada podía hacer contra un señor de alta alcurnia. Obsesionado con no perder aquel valioso ejemplar, decidió ocultarlo en el interior de un ejemplar de aspecto vulgar. Lo escondió bajo su protección con la intención que pasara de padres a hijos en secreto.

Esa noche, lo escondió bajo tierra y le dio la llave a su hijo Arnell.

Pero si estás leyendo esta misiva, es que algo ha truncado sus planes y mi familia se encuentra en peligro. La única manera que tengo de evitar que se pierda una parte muy importante de nuestra historia, es ésta: a través de los tuyos, Custodios imparciales que sabréis llegado el momento qué hacer.

Sin más se despide suya siempre,
Arasa nieta de Argail"

Espero disfruten de esta nueva aventura.

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