Everything that I need [ z.m.] #wattys2017

23 conóceme un poquito

Jazmín empieza a sacar varios álbumes familiares, en donde se ve a Zayn cuando estaba pequeño. Tenía mejillas regordetas y una sonrisa encantadora, aunque su sonrisa sigue siendo encantadora. Una que particularmente me causo gracia es donde está desnudo en una bañera y juega con un pato de hule. Y me atrevo a decir que Irina es como su copia, aunque muchas veces las persona adoptan rasgo de quien los están criando, en este caso quien se encarga todo el tiempo de Irina es Zayn, es como su papá. Llegan varias amigas de jazmín, todas aquellas recuerdan a un Zayn más joven y sin tatuajes, además de que lo felicitan que por fin tenga una novia fija y no este de enamoradizo con chicas que quizás lo corresponden. Zayn me proponer caminar un rato por los alrededores de barrio mientras que su mamá se queda con Irina y amigas, además planeamos hacer compras. Salimos de casa tomados de la mano, se siente bien, me encanta la sensación que eso produce en mí.

— ¿Qué te pareció mamá?—pregunta algo nervioso.

— Para ser realista... ella me... agrada, es tan relajada y no le importa la etiqueta, ni la manera en la que te sientas, y no tiene la necesidad de controlar todo lo que pasa a su alrededor—digo rápidamente.

— Es bueno escuchar eso, estaba sumamente nervioso, cuando estaba en la cocina con ella, me confeso que le agradas, y que tenía un buen presentimiento.

— Yo también tengo ese buen presentimiento—sonrió.

Seguimos caminando hasta que llegamos a una pista de hockey, hay chicos jugando así que nos quedamos un rato a observar quien gana. Compramos perros calientes y gaseosas para disfrutar la ocasión.

— ¿te gusta el hockey?—pregunto.

— Ah decir verdad es como parte de mí, yo solía jugar en esta pista, jugaba con el equipo local, se supone que sería una promesa... pero pelee con alguien en pleno juego y me expulsaron—cuenta algo apenado.

— Tus razones tendrías—defiendo.

— Algo, era una rivalidad tonta... solo que él era muy idiota, y no soportaba eso, no funciono con indirectas—explica.

— Que mal Zayn Malik—burlo.

— ¿por qué?—cuestiona confundido.

— Eso quiere decir que no te gustaron mis propuestas camufladas cuando veníamos en viaje, tú te lo pierdes

Me encojo de hombros y el abre los ojos sorprendido.

— Cabe decir que depende de qué tipo de indirectas sean.

— La primera palabra es la que cuenta, no hay vuelta atrás.

Sin previo aviso me roba un beso. Sus labios están húmedos y fríos, pero sus manos que recorren parte de mi cintura están tibias. El beso prosigue hasta que nos percatamos que uno de los equipos anota y nos separamos.

— ¿siguen en pie las propuestas?—susurra.

— Hmmm déjame pensarlo...

Nuevamente nuestros labios se une y el beso es algo más apasionado, ya que implica que nuestras lenguas se choque con suavidad. Son perceptibles algunos chasquidos y sus caricias parecen que quemaran mi piel de una manera extraordinaria que me hace tener los pensamientos más impuros de esta vida.

— ¿ahora?

— Algo...

— ¿y si dejamos que las luces decidan?—pregunta.

— Puede que si... puede que no.

— ¿Qué hiciste conmigo princesita? Solo mírame, haría cualquier cosa por ti, por ver una sonrisa en tu rostro.