Irrealidad II

20. Distorsionando la realidad

— ¿Por qué me ayudas?

— Has pasado por mucho y perder a tu padre es lo último que necesitas — expresó

Aquello me había tomado por sorpresa. Estaba siendo totalmente empático conmigo, de nuevo, supongo que me entiende porque él ya pasó por lo mismo ¿O acaso ese era su lado angelical hablando? Esa pequeña parte de él que no la demuestra muy seguido. ¿Qué poder tendrá sobre él?

— Gracias — esbocé una pequeña sonrisa —. Eso es realmente dulce de tu parte, estaré en deuda contigo toda mi vida por eso.

— No pedía nada a cambio — asegura, de acuerdo, definitivamente era su parte de ángel —. Pero si insistes, entonces pensaré en algo.

— Lo que sea — asentí, entonces me di cuenta que eso podía incluir todo, cualquier cosa, así que debía aclararme y poner un límite que definitivamente no pasaría —. Excepto matar a alguien.

— Puedo hacer eso sin ayuda — suelta una carcajada —. Soy malvado, ¿Lo olvidas?

Estoy consciente que el 95% de su ser es malo, pero cada vez que decide mostrar el otro 5% que no es tan malo hace que olvide por completo que es peligroso y no debo bajar la guardia de esa forma. Aunque en realidad no puede hacerme daño, así que en teoría, estoy a salvo, pero no puedo dejarme llevar de esa forma.

"Tienes algo con los demonios" las palabras que Logan me había dicho la otra noche pasan por mi mente, y me doy cuenta que puede tener razón, aunque realmente siempre me han gustado los chicos con personalidad misteriosa y algo rudos, suena a cliché, pero con un chico así, frío y que no revela sus sentimientos, tienes la certeza que en verdad te quiere, y te sientes a salvo. Aunque una cosa era mi afición por los chicos rudos y otra por los demonios ¿Que acaso ser guapo es un requisito para ser un demonio? Estúpidos demonios acabarán con mi vida. Así que debo alejarme lo más lejos posible para no terminar haciendo algo de lo que me pueda arrepentir.

— No, no lo olvido — respondí por fin, no podía permitirme bajar la guardia de nuevo —. Debo decirles a mis hermanos del cambio de planes.

— ¿Quieres que te lleve? — se ofrece

Definitivamente sería mucho mejor ir a Manchester que hacer una llamada telefónica, además moría de ganas de ver a papá aunque él no tenga idea de quien soy.

— Claro — respondí levantándome de mi cama —. Es mucho mejor que tomar el autobús.

— Es posible que te sientas un poco mareada — advierte, aunque yo ya sabía perfectamente los efectos secundarios de teletransportarse

Simplemente asentí, él toma mi mano, intento ignorar a mi corazón acelerarse, demonios, estaba nerviosa. En unos segundos, me encontraba en la calle donde se encontraba nuestra vieja casa, Altair me señala que mis hermanos se encuentran en la casa de al lado que siempre había estado abandonada cuando solíamos vivir ahí, y desaparece. La nostalgia me invade, vaya que nuestra vida era mil veces más sencilla hace un año, creo que nunca debimos dejar Manchester, no tendríamos a un demonio vengativo buscando hacernos daño, seguiría en la universidad y disfrutando de la vida normal de cualquier chica de mi edad.

Paso la casa de mi vecina, la cual Drake y Will le hicieron creer a Logan que era una bruja come niños y que si tomaba agua del estanque eso haría que perdiera su apetitoso sabor y ya no sería secuestrado por la bruja en la noche, la historia me ponía los pelos de punta, pero Drake me dijo que solo comía niños y que yo estaba a salvo. Pasé mi casa y me acerco al pórtico de la casa de al lado, no puedo evitar pensar en lo mal que la debe estar pasando Logan ahí dentro, debe estar infestado de arañas y otros bichos, me sorprende que haya accedido a poner un pie en ese lugar. Entré a la casa, la gastada y vieja puerta de madera rechina.