15.

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Te sentías mal por una parte porque pensabas que estabas engañando a Will, no son nada, ese pensamiento inundó tu mente, cuando eso pasó, no sentiste culpa alguna, cuando se separaron, tú no lo miraste a los ojos, te daba vergüenza imaginar que él sabía que te gustaba Will y a pesar de todo, lo besaste, te hacía sentir como una cualquiera, él con su mano hizo que tu rostro mirara a sus ojos, con éstos te demostró que no debías sentir esa culpa, demostró como si te entendiera y se notaba que pensaba la situación, luego sonreía con aquello gesto en su rostro haciendo parecer éste más amable. Tus manos al verlo fueron rápidamente a su mejilla, y con el pulgar acariciaste a ésta. Tus manos temblaban con miedo y tus ojos reflejaban la inseguridad que sentías al sentir ese momento, ¿Alguna vez te sentiste tan poca cosa?, sí pero jamás pensaste que el tiempo era eterno para esa clase de pensamientos, ¿Alguna vez sentiste que deseaste morirte en ese instante?, sí pero jamás pensaste que ese pensamiento era tan prolongado, ¿Sentiste el rechazo de las personas?, sí pero nunca pensaste que ese pensamiento era tan cercano a ti.

Estabas demasiado deprimida para seguir con esto, de tus ojos salían lágrimas, pero eran pequeñas y pocas, la mirada de Hannibal era de preocupación, tú quisiste explicarle con la mirada pero él no entendió que trataste de decirle, y era obvio, tus gestos no decían mucho, estaban desesperados, en un intento de no explicar las cosas con tu boca con el pretexto de no decir tonterías y Hannibal se burle de ti. La mirada de este último te incitó a decirle y no estar mirándolo tratando de explicar cosas con la mirada, cosas que él no entendía.

-Es que...me siento culpable porque pienso que estoy engañando a Will-Dijiste con tu mirada baja y tratando de no mirarlo a los ojos.

-Entiendo-Dijo Hannibal con una sonrisa de lado formando una fingida.

-Me siento tan patética-Dijiste cubriéndote tus manos a tu rostro-Como si nada tuviera el más mínimo sentido, Will no siente nada por mí y siento que lo estoy engañando.

-Tú no eres patética-Dijo y te acarició el cabello.

-Lo soy-Dijiste y escondiste tu rostro en su pecho, escuchando sus latidos del corazón, éstos estaban en ritmo normal, se escuchaban tranquilos y esa fue la principal razón porque te sentiste mejor.

Luego él levantó con su manos tu cabeza quedando a la misma altura que la de él y a pocos centímetros de distancia, tú te quedaste viendo sus ojos y te perdiste en ellos, él se quedó viendo también tus ojos y en un mismo instante ambos se miraron a los labios, tú lo miraste a sus ojos y él seguía con la mirada en tu boca, tú también lo hiciste al ver su mirada, ahora ambos se miraban y se acercaban formando un beso, al principio fue uno tímido, después fue más apasionado, y se separaron por falta de aire.

-¿Te arrepientes?-Dijo él mirándote con una sonrisa.

-No, no me arrepiento de nada-Dijiste y volviste a besarlo.

Luego ambos se miraron con una sonrisa para cada uno, una de felicidad, una satisfecha, nunca imaginaste que un beso te hacía sentir tan bien, como si nada más importara, como si las personas no existieran, y el ruido se fuera por unos segundos y luego al finalizar la acción, todo vuelve a lo normal y deseas que eso se vuelva a repetir.

Pero no todo es bueno, ese beso despertó muchas incógnitas, porque hace un momento te sentías mal por Will y ahora estás pensando que el beso de Hannibal es lo mejor que pudo haberte pasado en la vida, ¿Qué sentías por Will?, y lo más importante, ¿Qué sentías por Hannibal?

Luego un canto dulce interrumpió tus pensamientos, cuando viste quien era, ella dejó de cantar y los miró extrañada.

-¡Debora!-Dijo Hannibal sorprendido.

-¿Sí?-Dijo la joven chica con una particular sonrisa infantil en su rostro.

-Debes irte-Dijo Hannibal molesto-Estoy ocupado.

-No-Dijo y se reía de manera infantil y su cabeza la apoyó en el marco de la puerta, puso una sonrisa traviesa y se acercó a Hannibal, le susurró algo en el oído y se fue cantando dulcemente.

Hannibal sonrió divertido.

-¿Qué dijo?-Dijiste interesada por la risa del hombre que estaba a tu lado, pensaste como si por un segundo él se olvidó de que estabas aquí.

-Nada importante-Dijo y te miró con seguridad, tú decidiste que no era correcto decirle tus aparentes celos en el primer beso entre ustedes.

Tú trataste de sonreír satisfecha con su respuesta.

-¿En qué estábamos?-Dijo con su sonrisa de burla por su pregunta que te hizo rápidamente acordarte del beso.

-En esto-Dijiste y lo besaste sin pensarlo nuevamente, está vez sin miedo, sin temores, como antes.

Cuando lo besabas, pensaste en Will inmediatamente, pero decidiste no hacerle caso a los juegos de la mente, sabías que Will no sentía nada por ti y por eso debías encontrarte a otra persona, sonaba para nada sensible pero era la única forma de quitarte de la mente a Will, las otras formas ya las intentaste y no te funcionaría si las intentas nuevamente, verdaderamente querías olvidar a Will lo más rápido posible, después de dejar de besarse, te sentías mal por pensar mucho en Will, te preguntabas si él pensaba en ti o también pensaba en otra persona.

Cuando viste que miraba para la habitación cerrada de Debora, te sentiste mal por ti, ¡él estaba pensando en ella!, notablemente el vio cuando te fijaste en estaba mirando y él se reía con burla.

-Sería vergonzoso que nos encontraran besándonos, ya que Debora puede decir perfectamente que estábamos haciendo y eso no te gustaría ya que Will también lo sabría, y eso sería terrible que supiera-Dijo con una sonrisa triunfadora.

Luego se abrió la puerta de la habitación de Debora.

-¿Besándose?



Recuérdame. (Will Graham)Where stories live. Discover now