Recuérdame. (Will Graham)

1.

Bueno...-dijo interrumpiendo completamente tus pensamientos dándote un pequeño pero fuerte susto.
-¿Qué?-dijiste tratando de ocultar tu susto anterior.
-Pensé que venías a trabajar-dijo el chico molesto.
-Deberías callarte y irte por donde viniste-dijiste tratando de que se fuera.
El chico se fue siempre evitandote la mirada.
-¿Qué le pasa a este?-dijiste en voz alta y suspiraste.
-no le agradas, es una opción-dijo una voz cuando te diste vuelta era un hombre alto.
-no le he hecho nada, espere, ¿Quién es usted?-dijiste mirandolo sorprendida.
-soy el Dr.Lecter-dijo sonriendo
-mucho gusto, ¿Por qué cree que no le agrado?-dijiste preocupada
-no deberías preocuparte por los demás, deberías trabajar-dijo el Dr.Lecter
-¡estoy trabajando!-gritaste enojada
-no te veo hacerlo-dijo sonriendo, se dio vuelta y se alejó.
Luego de eso, te fuiste a atender pacientes porque eras psiquiatra. Pasaste horas atendiendo a pacientes, hasta que terminaste tu trabajo, te fuiste del lugar y comenzaste a caminar por la carretera, la noche era oscura y te daba bastante miedo estar ahí ya que no encontraste taxis a esa hora, bueno no esperaste mucho que digamos, pero aún así no tenías miedo, lo que viste en ese momento te dio escalofrios, a lo lejos viste el cuerpo de una mujer muerto, lo viste y por instinto corriste lejos de ese lugar, corriste sin rumbo, a ninguna parte, cuando tomaste conciencia de que nadie te estaba siguiendo era demasiado tarde, no sabías dónde estabas, en qué lugar te encontrabas, no conocias ese lugar, ¿Qué debías hacer?, cuando te diste vuelta viste un auto, trataste de que se detuviera, hasta que lo hizo, cuando la persona que estaba dentro del auto bajo el vidrio, viste quien era, era el mismo chico que te ordeno que trabajaras hoy.
-¿Podrías llevarme a casa?-dijiste tratando de que no se acordara de lo que paso
- Deberías callarte y irte por donde viniste-dijo el chico sin mirarte a la cara, como siempre.
-por favor, no seas así-dijiste
-Te veo mañana, T/N-dijo el chico sonriendo.
Y ahí el auto lo vi alejarse, pero en la mitad del trayecto se detuvo, y se devolvió hasta que el auto quedó al lado mío, el chico bajo el vidrio.
-Sube antes de que me arrepienta-dijo el chico.
-gracias, no lo olvidaré.
Te subiste al auto, él te preguntó la dirección y se la dijiste, pero todo eso lo dijo sin darte una sola mirada, no le dijiste nada sobre eso, no querías que te dejara a la mitad de un lugar que ni sabrías que existía, después de ese pensamiento, viste nuevamente a ese cuerpo de aquella mujer muerta, no le dijiste nada al chico que estaba manejando, no sabías cómo iba a reaccionar , aunque sabías que trabajaba en algo relacionado con eso por lo tanto no tendrías una reacción peor que la tuya, eso ya lo tenías claro, aunque eso no lo sabías, ahora que lo piensas no conocias nada de él.
-¿Cómo te llamas?-dijiste interrumpiendo de silencio que había, el silencio incomodo.
-¿Eso importa?-dijo él algo molesto.
-solo quiero saber cúal es tu nombre-dijiste sorprendida.
-no quiero conversar cosas que sé que no me interesarán-dijo el chico enojado aunque su comentario sonó algo gracioso, por lo tanto te reíste.
-Soy T/N-dijiste aún riéndote por el comentario anterior.
-¿Qué es tan gracioso? -dijo el chico nuevamente molesto.
-la forma en que lo dijiste resulto ser muy graciosa-dijiste intentando de que no se enojara.
El chico miró por la ventana y se detuvo, luego de unos segundo supiste el por qué, había un perro muy lindo, él lo tenía en brazos y lo dejo en el asiento trasero.
-¡Es hermoso!-dijiste haciendole cariño en la cabeza al perro.
-lo es-dijo sin quitar su mirada del camino.
-¿Los llevas a tu casa?
-sí-dijo el chico.
-¿Cúantos perros tienes?
--muchos, son mis amigos-dijo el chico con nostalgia.
-siento lo mismo que tú, por favor dime tu nombre.-dijo
-Okay-dijo rendido-soy Will Graham.
-mucho gusto-dijiste hasta que el auto se detuvo en tu casa.
-adiós-dijo y te bajaste de su auto.
Él se fue al momento en el entraste a tu casa, fue algo extraño, pero aún así no dejabas de pensar en la mujer muerta y tampoco dejabas de recordar el importante detalle de que no se lo dijiste a Will Graham, pero bueno jamás sabrá que yo lo vi, luego recibí una llamada al parecer era desconocida.
-Ese cadaver, no lo viste, para el resto del mundo ese cadaver no existe-dijo la voz misteriosa y cortó
Viste rápidamente quién fue y era como lo dijiste anteriormente, "llamada desconocida", quedaste sorprendida, te sentaste y no podías dormir, esa llamada fue muy escalofriante para ti, miles de preguntas tenías en tu cabeza, ¿Quién era?, ¿Cómo sabía que yo vi un cadaver?, pero la más importante es, ¿Cómo sabía mi número?, sin duda era un misterio, pensaste quién podría ser pero no se te ocurria ningún sospechoso, ya eran las 01:30 AM y no era una muy buena hora para que alguien que no sabías ni quién era te amenazara por teléfono, era una muy mala idea que lamentablemente se cumplió, temblabas aún no lo superabas, querías olvidarte de eso pero no podías, no con esa voz escalofriante y profunda que se notaba que su mensaje estaba dirigido con aires de amenazar a alguien que lamentablemente eras tú y tampoco te amenazó de muerte pero esas palabras hablaban por sí solas, era una amenaza de muerte a pesar de que la persona que llamó no lo dijo pero en el fondo sabías que se encontraba ese mensaje oculto.
Escuchaste un golpe en tu puerta y los nervios estaban en tu cuerpo, te paraste de tu asiento lentamente, tus manos temblaban, de tus labios no salía ninguna palabra, no porque no querías hablar, solo porque las palabras no salían de tu boca, tu corazón latia fuertemente tanto que sentías que saldría, agarraste el picaporte y abriste lentamente.