Marvel One-Shots

34. Bruce Banner

Había caminado por toda la torre, buscaba a mis hermanos Pietro y Wanda,  para preguntarles si les gustaría ir al cine. Entré a la sala de estar y sólo estaba Bruce sentado, leyendo un libro.

- Hey -saludé, él subió su vista del libro hacía mi, y sonrió.

- Hola -dijo amable y se acomodó en el pequeño sillón en el que estaba sentado.

- ¿No viste a Pietro y Wanda? Los estoy buscando hace como media hora -reí. Él pensó y asintió.

- No los ví, pero Tony me comentó que ellos irían con él a hacer unas compras -se encogió de hombros.

Suspiré pesadamente. Ir de compras con Tony era sinónimo de salir mínimo 3 horas.

- Y... ¿Tienes planes? -pregunté. Bruce frunció el ceño, y con un rostro confundido, negó.

- No, no tengo -dijo colocando su libro en la mesa ratona del medio.

- Bueno, ¿te gustan las películas de terror? -pregunté-. Hay una que quisiera ir a ver hoy -me encogí de hombros.

- Bueno...supongo que sí -asintió, levantándose del sofá.

- ¡Genial! -exclamé-. Voy por mi campera y dinero -dicho esto, salí corriendo al ascensor.

Tomé una campera negra y dinero, me coloqué perfume y máscara para pestañas, y bajé rápidamente otra vez.

- ¿Lista? -preguntó Bruce. Se había puesto una campera azul.

- Sí -respondí, y ambos nos dirigimos al cine.

[...]

- Pensé que las mujeres solían asustarse con este tipo de películas-comentó Bruce mientras tiraba el balde de palomitas a la basura.

- Bueno, a mi me encantan, si me asustan, mejor -sonreí.

- Si, lo noté -río-. Como cuando le quitaron un órgano y te reíste, eso fue algo sádico-soltamos una carcajada.

- Era el hígado, y sí, ese chico era muy idiota -reí. Bruce paró de caminar y me observó.

- ¿Quieres ir a comer algo? Son casi las ocho y... -tomé su brazo rápidamente y asentí. Pude notar como el se sentía algo nervioso por eso.

- Vamos -dije comenzando a caminar.

- ¿Mc Donald's? -preguntó. Bruce mordia levemente y repetidamente sus labios ¿acaso le incomodaba estar rodeado de tanta gente?

- ¡Sí! -respondí rápidamente, él rió por eso.

Nos dirigimos rápidamente a Mc Donald's y ordenamos rápido nuestra comida.

- Bruce -lo llamé. Él me miró rápidamente y dejó su hamburguesa en la caja.

- ¿Si? -preguntó, con la comida en la boca, lo cual me causó gracia.

- ¿Has tenido citas? -pregunté. Me interesaba saber sobre Bruce, era un hombre genial, dejando de lado su increíble lado de superhéroe verde y el hecho de que me atraía, solo un poco, al menos eso creeía.

- Yo... -suspiró-. No, no tengo una hace un tiempo -se encogió de hombros-. ¿Tú? -preguntó.

- No, aunque suene triste, nadie me invita -reí-. ¿Por qué crees que salgo siempre con mis hermanos? -dije divertida. Él frunció el ceño, y con una sonrisa (que debo admitir, es de las mejores que conozco), negó.

- Porque nunca tuve valor para invitarte -dijo bajo, mirando hacía abajo. Él probablemente hubiera querido que no lo escuchara, pero lo hice.

Sentí como mis mejillas tomaban calor, y una extraña sensación invadió mi estómago. Reí mirando mi celular, haciendo como si no hubiera escuchado.

- ¿Nos vamos? -preguntó cuando terminó su comida.

Asentí levantándome de la silla, y tirando las cosas en la basura.

- ¿Quieres un helado? -pregunté animada.

- Claro, pero deja que yo lo invite -dijo señalandome. Asentí y caminamos hasta la caja otra vez, para pedirlo. Él tomó sus helados y caminamos fuera del centro comercial.

- ¿Te sientes bien? -pregunté cuando salimos. Bruce paró de caminar y suspiró.

- Tal vez este un poco cansado -se encogió de hombros-. ¿Tú no lo estás? -reí.

- Tal vez -caminé a su lado, y sin que se de cuenta, tomé su mano.

Bruce se giró sorprendido, viendo nuestras manos juntas, y luego mis ojos.

- ¿Qué...? -levanté mis cejas y coloqué una mano en alto.

- Te oí-murmuré. Bruce trató de hacerse el confundido y cuando intentó hablar, lo paré otra vez-. Cuando comíamos, te oí, sobre no tener el valor para invitarme a salir -sonreí débilmente, con algo de nerviosismo-. ¿Por qué no lo haces ahora? -pregunté.

- ¿Estás segura de lo que haces? -preguntó, su voz sonaba algo débil.

- Créeme, lo hago-apreté su mano y él me regaló una débil sonrisa-. ¿Por qué no intentarlo? -pregunté.

- Bueno... -suspiró. Tomó una bocanada de aire y asintió-. ¿Saldrías conmigo? -preguntó por fín.

- No -respondí seria, y él se sorprendió, solté una carcajada y Bruce miró alrededor, ya que la gente nos observaba-. Claro que sí-afirmé, tomando su mano más fuerte. Él me sonrió y besó mi mano.

Comenzamos a caminar, hasta que Bruce volvió a hablar.

- ¿Crees que a Pietro le moleste? -preguntó. Reí.

- No lo se-dije dudosa-. Ese es tú problema-resalté el "tú".

- Ya veo -rió él.

- ¿Acaso no pelearías por mí? -dije incrédula. Él hizo una mueca- Ups -dije encogiendome de hombros.

- Claro que lo haría-sonrió-. Todas las veces necesarias, sin tener que llegar a eso si es posible -murmuró.

- No lo será-murmuré, y seguimos caminando en un silencio agradable hasta la torre.

QueenMrsMarch
Espero sea de tu agrado, si no te gustó decime y lo arreglo no se😳 sólo quiero que les gusten💗
Al fin uno de Bruce💓

Pd: adivinen a quien le dieron su perfecto boletín🌚 pos a mi quien más 🌚