5. Ataque Aracnido

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Después de dar una vuelta a la carretera, Riot regresó a descansar lejos de todos. Quería dormir en su modo wolve pero aún no se sentía lista para mostrarle a los demás quien era ella realmente. Las palabras del samurai dorado seguían resonando en su procesador, quería levantarse y darle una patada al cochino Bugatti Vayron pero eso sólo ocasionaría una pelea sin sentido, además de que demostraría que Riot realmente tenía bastante miedo de demostrarse quien era.

La alarma del depósito comenzó a sonar haciendo que la cyberwolf encendiera sus faros delanteros, se transformó al momento que salía de su escondite y caminaba con los demás hacía parte de la Alquemore que estaba destruida. Eran casi las 2 am y a lo que sea que estuviese molestando se le ocurría hacerlo cuando una casi luna llena adornaba el cielo. 

-Actividad cerca del largo, se trata de dos decepticons-dijo Fixit tecleando algo sobre la máquina.- Pero la señal no me deja ver de quienes se trata-

-Nos encargaremos-dijo Bumblebee viendo a su equipo-Bien, equipo, es hora de matar y destruír-y todos se quedaron callados.

-Pobre mech, a mi me dejan así y creo que ardo entera-susurró Riot.

-Riot y yo iremos en otra dirección para asegurarnos de que no haya más decepticons-aseguró Drift.

-Hora de irnos-

Todos se transformaron en su modo auto, Strongarm ancló la plataforma donde llevaba a Grimlock. Salieron del depósito pero Drift y Riot tomaron otra dirección. Riot iba en silencio, sólo sintiendo las vibraciones de su motor dandole una especie de confort. Pensaba en Colby y si se encontraría bien, le dolía mucho que su amigo humano estuviese sufriendo en las garras de los decepticons y más aún que Jon sea posible sospechoso de lo ocurrido en casa de Fergal. Deseaba tener a sus humanos consigo para poder esconderlos e ir detrás de todos los decepticons, destruirlos hasta que sólo quedara chatarra en el suelo...

-Riot...-

-¿Qué?

-Transformate-

-¿Y cómo se que no irás...? Olvídalo, mis dudas sólo alimentan tu maldito ego masculino-suspiró el skyline. 

El auto rojizo con plateado se sacudió al momento que el frente se elevaba y daba vueltas hasta revelar la forma del cyberwolf rojizo. La criatura lanzó un aullido al cielo oscuro, al momento que sus patas se estiraban y ella corría más deprisa por la carretera. Sus fosas nasales sólo dejaban escapar pequeñas llamas de fuego, el bugatti fue a su lado hasta que Riot movió su oreja derecha captando un sonido. Salió de la carretera entrándose entre la masa de árboles, levantó la nariz al aire hasta que Drift llegó a su lado.

-¿Cuál fue la razón de que hayas salido como una lunática?-

-Cállate-gruñó ella y avanzó caminando lentamente. Drift dejó salir a sus tres minicons.

-Slipstream y Jetstorm, vigilen bien nuestra posición-los dos minicons asintieron y se separaron yendo uno a la derecha y otro a la izquierda-Sawback, permanece cerca de Riot-

-Si amo-asintió el can azulado.

-No necesito protección-dijo la rojiza volviéndose para ponerse delante del samurai-Sé cuidarme sola-se transformó en bot.-El que no quiera revelarme a los demás no te da derecho a ir como mi sombra-

-No soy tu sombra, femme...-

-Me llamo Riot, deja de llamarme como si fuera una sin nombre-

-Maestro-llamó Slipstream.

-Tu problema es que eres demasiado rebelde, puedo verlo en tus ópticos de demonio-señaló Drift

-Eh...maestro-llamó Jetstorm.

El Misterio Del Fuego |Transformers|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora