Capitulo 1. El principe de las pecas

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-ya déjalo Ella, estoy seguro que no volverá a pasar, ¿cierto dulzura?- dijo su padre el rey Johan

-si papi, lo la-lame-ento madre-

-como sea, ponte a desayunar ya que hay detalles que debemos atender para tu fiesta de cumpleaños-

-en realidad tengo una mejor idea para mi cumpleaños que una lujosa y abrumadora fiesta- se sento y empezó a comer la ensalada de frutas, huevos revueltos, jugo de frambuesa, yogurth natural y leche

-¿ah, si?- cuestiono burlona y desafiante su madre

-mmmmm... s-si-

-querida deja que hable ¿Qué tienes en mente cariño?- nuevamente hablo su padre

-bu-bueno yo quería... ir a un club o a un centro comercial, a un antro o a un estudio de baile... yo... solo quiero salir y descubrir nuevos lugares-

-¡eso es inaceptable! ¡eres un príncipe, pronto te comprometeras, debes mantener tu postura eso es inaceptable tendras una fiesta aquí en el castillo y punto!- se levanto Cruella

-¡¿Por qué siempre tienes que decidir por mi?! ¡Toda mi vida me has preparado para algo que tu quieres y sigues decidiendo por mi mama! por favor quiero vivir no quiero una fiesta y no quiero un compromiso por favor papas ¡porfavor!- el joven se levanto para hablar a sus padres primero desafiante y luego a manera de suplica

-¡no! ¡No haremos nada de lo que quieres la vida es injusta y vas a aprender eso de una u otra manera! ¡ahora deja de comportarte como un niño pequeño, soñando y aspirando algo que no se le dara! Y vas a disfrutar esa maldita fiesta y después te vas a casar y cumplir todo lo que tu esposo quiera para mantener paz en nuestro reino lo haras te guste o no ¡¿te a quedado claro?!-

-...- el joven no dijo nada solo parpadeo un par de veces y sus ojos chocolates se cristalizaron, asi como agacho la cabeza y trago en seco para después hablar -¿pu-puedo re-ti-tirarme?

-¡¿quieres responder la estúpida pregunta?!-

-Ella ya basta, claro cariño puedes retirarte pero necesito hablar en un rato mas contigo ¿entendido?-

-...- el menor solo asintió y se fue a su habitación

-¡por eso es como es! ¡lo mimas demasiado nunca será el principe que queremos si lo sigues tratando asi!-

-Ella yo me encargo, además esta manera es mejor que gritarle y hacerlo llorar, es mi hijo y lo amo no permitiré que lo trates asi-

- tiene un destino o ¿es que acaso no lo recuerdas?- se cruzo de brazos

-lo se yo hablare con el sobre eso tranquila-

-bien, ire a ver los detalles de la fiesta-

Al llegar se lanzo a su cama y empezó a llorar, se aferro fuertemente a los esponjosos cojines y siguio llorando amargamente, su madre jamas lo comprendería y jamas veria lo injusto y absurdo que era aquel compromiso. No tenia escape, estaba atrapado literalmente nunca podia salir a su reino a menos de que un enorme grupo de guardias le vigilaran pero en si nunca salía de su educación se encargaba su madre y varios maestros que le daban clases en el castillo, todos decían que era muy inteligente para su edad pero que le encantaba perderse en sus fantasias y hacerlos desatinar.

Cuando finalmente se tranquilizo se limpio las lagrimas y tomo un libro, se recostó en un puff rojo y nuevamente escapo de su cruda realidad el libro hablaba de un joven que deseaba ser un cantante y compositor famoso al cual se le presentaba la oportunidad de cumplir su sueño pero tenia que elegir entre su ilusión y su verdadero amor.

The PrinceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora