Dylan Kay sabe lo que fue crecer sin ningún tipo de afecto en su vida, pero aún consciente de ese hecho, él sabe cómo pasarla bien, pues con "temporal" como su palabra favorita, él no tiene que preocuparse por nadie más que por sus hermanos del club...
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Lorelle
Al fin siento que puedo respirar. A pesar de mis miedos, la entrevista de una hora con Daniel Baxter fue mejor de lo que me esperaba. Ya sabía un poco sobre los Dragones porque hice una investigación antes de lanzarme a hacer esto, pero a veces la realidad puede ser otra. Y en este caso, fue exactamente como lo leí en internet, ellos son buenas personas, mal hablados eso sí, pero buenas personas al fin y al cabo. El presidente del club contestó todas mis preguntas, y tengo bastante material para continuar escribiendo mi libro.
Samantha, la dama del presidente, es físicamente una mujer preciosa. Cuando la vi entrar a la oficina, muy segura de sí misma, pensé que ella era como las mujeres del club de Jake, peligrosas y con ganas de saltar encima de ti para apuñalarte con sus navajas en forma de serpiente, pero después de mirarme con curiosidad, me sonrió con sinceridad, y enseguida supe que Samantha no era así. Cuando hablé con ella sobre su vestimenta, me explicó todo con detalle y yo escuchaba con mucha atención. Yo no tengo muchas amigas verdaderas, no, ¿a quién quiero engañar? Solo tengo una, Ellie, pero esta chica se mostró tan amigable, tan amable, que deseé que fuera mi amiga también.
Ella y su esposo Daniel hacen una pareja atractiva y se nota demasiado que se aman verdadera e intensamente. Y verlos así, tan unidos y amorosos el uno con el otro fue hermoso y me hizo ver lo sola que me sentía, pero también fue un claro ejemplo de que el amor verdadero sí existe y me hizo tener esperanzas. Me convenció de que algún día alguien ahí afuera también estará esperando por mí.
Todo iba perfectamente bien hasta que este hombre que está caminando a mi lado, entró a la oficina. Este hombre, Dylan Kay, es...¡es demasiado! Demasiado alto, demasiado fuerte, y también demasiado fresco. Estuvo mirándome durante la última parte de la entrevista, y aunque al principio me irritó bastante su actitud de "me veo genial y lo sé", no puedo negar que al final me sentí halagada por tener la atención de un hombre como él, y cuando me dio la seguridad de que en su club nadie me haría daño, le creí, porque en esas vehementes palabras había una sincera promesa. A pesar de ser cauta con los hombres y de lo que me pasó con Leo y con Jake en su club, no sé por qué con este hombre grande, todos los muros bien construidos a mi alrededor están amenazando con caer, y lo extraño de todo es que estoy tentada a que eso pase.
Hace mucho tiempo que dejé de creer en este tipo de cosas sobre atracción instantánea porque me dieron una gran lección, pero aún así, creo que merezco otra oportunidad. Lo miro de reojo, y sigo aturdida por la presencia de este hombre y no entiendo la atracción tan poderosa que sentí hacia él. Literalmente, ¡me dejó con la boca abierta y el cuerpo temblando sin tan siquiera haberme tocado! Estoy abrumada e intrigada por Dylan Kay porque en sus ojos castaños vi que él sintió lo mismo. Que Dios me ayude.
Salimos en silencio del ruidoso taller de mecánica Baxter y nos dirigimos hacia el estacionamiento para empleados. Yo tomé un taxi desde el lugar en donde me estoy quedando para llegar hasta aquí, así que no tengo que preocuparme por conducir en esta ciudad extraña. Él se detiene a un lado de una camioneta que se ve que es nueva y es color negra. Luego abre la puerta del pasajero y me quedo parada mordiendo mi labio y mirando hacia adentro. ¡Esa cosa es muy alta! Nunca había visto algo así. Debe ser una camioneta personalizada, y con mis cinco pies de estatura no creo que pueda entrar sin ayuda. Sin la ayuda de Dylan Kay. Jesús.
