Detrás de una máscara (Germán Garmendia y Tu)

•Capitulo 6•

Ashley:Vamos _______, te conozco desde hace años, se que a ti te encantaría celebrarlo de una manera especial

Me quedé callada un momento, pensando en lo que había dicho. Vale si, talvez si me gustaria pasarlo de una manera muy especial, supongo que hoy en dia no todas las parejas duran mucho tiempo juntos. Pero como ya lo habia dicho anteriormente, no me hace falta celebrar, yo soy mas que feliz aun estando juntos.

Yo:No, en realidad no.–insistía

Ashley:Pero aunque sea imaginatelo; German y tu, durante la noche en una cena romántica, solos...sin nadie que los moleste–me lanza una mirada pervertida

Yo:–le tiro una almohada en la cara, haciendo que se callara–¡Ashley! ¡Porque hablamos de esto! ¡Tengo que seguir mi trabajo!

Ashley:________, no es por avergonzarte ni nada, pero si, llevan un año juntos y pues, ustedes no han...nada de nada

Me cubro la cara avergonzada, podía sentí como mi cara se ponía toda roja. Siempre me ha dado tanta pena hablar de esto, con quién sea.

Yo:Pues es que nunca...nunca ha surgido, supongo.

Ashley:Porque tu no has querido, y si tu no quieres, sabes bien que Germán no te obligará. ¿Has pensado en lo que él quiere?

En realidad no, nunca lo había pensado de esa manera. Nunca me paro a preguntar qué es lo que quiere el, siempre soy yo, yo y yo. Eso es bastante egoísta de mi parte, ugh...debo de se la peor novia del mundo. Justo cuando creía que no podia sentirme peor.

Yo:Ashley, eres mi amiga y gracias, pero creo que esto es más entré Germán y yo–queriendo cambiar de conversación en ese instante

Ashley:Esta bien, pero aunque sea mencionale, no importa si es indirectamente, recuerdale que casi cumplen un año

 Yo:Te prometo decírselo cuando llegue, solo si dejas de hostigarme con eso 

Ashley:Trato–continuó leyendo su revista

No pudimos parar de hablar de esto en el momento más preciso, pocos minutos después, Germán llegó de su trabajo de medio tiempo. Vuelvo a poner en pausa mi trabajo para ir y recibirlo. No lo habia visto en todo el dia practicamente, en las mananas nos vamos a la Universidad y no nos vemos ahi, despues el se va a trabajar y no lo veo hasta a esta hora todos los días

German:Por fin nos vemos princesa–deja sus cosas a un lado, me toma de la cintura pegandome a el y dándome un suave beso 

Ashley:–Grita desde la sala–¿Y no me vas a saludar a mi? ¡Que descortés eres con tu invitada!–sarcásticamente

German:¿Invitada? Vienes casi todos los dias, basicamente te la vives aquí–los tres nos reímos

En seguida de eso, German me toma de la mano, conduciendome hacia nuestra habitación. Cuando estamos ahí, cierra la puerta. Después, se acuesta sobre la cama tratando de ponerse lomas cómodo posible, se ve bastante cansado, eso es lo que creo. Es muy lógico, no debe de ser fácil mantener en balanza entre la escuela, tareas, su trabajo, se ocupa de los gastos y bueno...yo básicamente, él es quien me mantiene a flote cuando estoy a punto de hundirme. Me acoste a un lado de el, dejando caer mi cabeza sobre su pecho y dejando su brazo rodearme. 

Yo:¿Estas cansado?–la pregunta más obvia, ya sabia que si, pero quería escucharlo a el, que el me platique para que sepa que me interesa como esta

German:Pues, podemos decir que si

Yo:Que significa 'podemos decir que si'–no entendía muy bien a qué se refería

German:No hay punto en quejarme, entre tantas cosas que hago es normal qué este gastado

Yo:Quisiera ayudarte, no me gusta verte todo estresado

Germán:–encoje los hombreo–No te preocupes, puedo hacerlo

Yo:Bueno, tengo una idea, que tal si yo...–él enseguida supo lo que iba a proponer, que era, que yo tambien empezara a trabajar en algo, para que entre los dos ganemos más dinero 

German:No.–dijo como una respuesta definitiva

Desde un principio le había dicho eso, pero igual me insistió que no era necesario, 'que el podia'.

Yo:¡Pero así podriamos...!

German:¡No y no! Me prometí a mi mismo que no te dejaría hacerlo.

Me levante dejando de estar recostada, ahora me había sentada bien en la esquina de la cama. Sólo me quede callada, un poco decepciónada. Pero supongo que es mi culpa, no se porque hable del tema si ya sabia como se iba a poner. El noto mi decepción en mi rostro, con su mano acarició mi mejilla.

Germán:Perdón ________. No te lo tomes a mal, solo que yo quiero ser quien me haga responsable de ti, te amo y te voy a cuidar

Yo:Lo se–mostrando una sonrisa

El también se había sentado a un lado mio, se estaba acercando demaciado a mi, al punto de estar pegados uno al otro. Me estaba dando pequeños y leves besos en los labios. Nos volvimos a tumbar encima de la cama, pero esta vez, estaba completamente encima de el. Empezó a acariciar mi espalda con la yema de sus dedos, muy ligeramente, me ponia la piel de gallina.

Mientras esa mano seguía acariciando mi espalda, su otra mano empezó a recorrer mi pierna, mientras ahora empezaba a besarme con mas rubor, diferente a como siempre lo hacer, pero en un buen modo. El único sonido que podia escuchar era mi corazón, palpitando vada vez mas ferozmente.

Pero no podía seguir mas allá, no lo se. Algo me lo impedía, no puedo entender aún que.

El notó que de repente me puse toda rígida, dejo de moverse y miro a los ojos. No tuve que decir una sola palabra para los dos ya levantarnos, tratando de hacer como si no hubiera pasado nada.

Germán:–muy apenado–Entonces, bueno...creo que iré a hacerme algo de comer y terminar unos trabajos que tengo que entregar–razcandose la nuca incómodamente. Se despidió de mi, besandome en la mejilla.

Despues de que el salió y cerro la puerta, me tire a la cama con las manos cubiendome los ojos en remordimiento. Esto ya ha pasado demaciadas veces,  estar a punto de tener alguna intimidad, pero al final no, por mi culpa, por ser tan gallina con este asunto. Sé que el quiere y yo...yo también, pero...¡Agh! Solo estoy creando momentos incómodos. Mi mente es un asco. Yo soy un asco.