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Dedicado a Muke_y_Larry

Dudo unos segundos no obstante me retiro sin decir palabras. Cruzo miradas con él, solo unos segundos, está me dice miles de cosas que no logro comprender pero mas que nada me suplica algo, y salgo del departamento. No me importa si me siguen o no, no me importa nada.

Estoy tan perdida, tan cansada que solo quiero caminar. No me detengo en ningún momento, escuchó mis pasos, y son mas firmes de lo que nunca antes he escuchado. Cierro mis ojos abrazándome a mí misma, me siento tan cansada que me perito liberar toda la presión de todo.

Las lágrimas mojan la herida cubierta por maquilaje, y en esto debo agradecer a la señora morris sin embargo ya no se si es lo correcto.

- Adeline - me detengo antes de pisar los últimos escalones destrozados. Limpio las gotas de agua salada que se encuentran en mis mejillas y suspiro.

- ¿Así que tu eres Eliot? - pronunció con la garganta seca, siento su mano en su hombro pero la quitó rápidamente -. No me mienta, dígame la verdad - lo miro sobre mi hombros - ¿Usted es hermano del señor Tomlinson, usted lo sabe y él también, verdad? - este comienza a negar con la cabeza y suspira.

- Mi madre no quiere que él lo sepa - tenso mi mandíbula.

- ¿Y usted por qué lo sabe? - lo veo desviar la mirada y me obligó cerrar los ojos inhalando aire calmando cada grado de rabia.

- Mi padre ganó mi tenencia a mis cinco años, cuando él murió lo primero que hice fue buscar a mi madre porque tenia esperanzas que ella estuviera viva y apareció - sus palabras en estos momentos me sientan tan falsas y poco creíbles que ya no se que pensar -. Pero Adeline no te pido que trates de entender todo por mi, solo hazlo por ella.

Bufó al escuchar sus palabras. Un dolor en mi pecho genera que quiera cachetearme por lo bipolar que parezco sin embargo sé que tiene razón. No puedo juzgar la vida de la señora Morris, entonces caigo en la cuenta de que ella si tiene hijos pero no uno sino dos. Escucho los pasos del señor Styles, o Eliot, lejanos a mi. Paso las manos por mis rostro y suspiró frustada sabiendo que debo volver hacia el departamento y no exactamente el mio.

Dudo unos segundos para luego volver a subir los escalones a pasos lentos. Lo unico que puedo hacer es escuchar su versión de la historia y tratar de callar las preguntas que solo agotan a mi cerebro.

Al llegar a la puerta no se si tocar o entrar entonces me decido por la primera opción, los ojos de la señora Morris me miran apenados y a la vez molestos.

- Yo... - me callo porque realmente no se que pensar y mucho menos que decir.

- ¿Quieres saber la verdad, no? - levanto ma mirada y asiento dudosa -. Bien, pasa, creo que te debo una explicación de todo - avanzó lentamente con la mirada perdida en mi pies cubiertos con los zapatos chatos negrso que llevo puestos.

Me siento en el sillón sin buscar la presencia del señor Styles y espero que ella se siente frente mio. Ella no dice nada para luego suspirar profundamente, no quito la mirada de ella. Un remolino de emociones y tranquilidad se hacen presentes en mi pecho presionando el centro de este en mezcla de una danza.

- Era joven cuando todo sucedio, era casi una adolescente y caí en sus manos. Digamos que me enamore extrañamente de Mark Tomlinson... pero para él yo solo era una mas, cuando me enteré que yo estaba embarazada al principio no le dije nada sin embargo no era justo ya que él también era el padre - la veo desviar su mirada para cerrarla -. Su reacción no fue buena, y creo que me vi obligada a irme de ese lugar como llegue, de la nada. Cuando nació el bebé, yo lo amaba pero no me encontraba en perfecto estado economico para mantenerlo - una lagrima cae de su mejilla y veo como calla unos segundos.

- La historia tiene un final feliz, el bebé creció y se convirtió en un extraño y maniatico al igual que el padre, y claro tambien en mi hermano mayor - pestañeo al escuchar la voz ronca del señor Styles - ¿No mamá? - una pequeña risa se escapa de los labios de la señora Morris.

- Lo que importa es... Adeline, cuidate, eres joven y aún tienes tiempo de no cometer lo errores que yo si - la miro con el ceño fruncido -. No quiero decir que Louis o Harry fueran errores solo que... me hubiera gustado que ellos nacieran con una vida diferentes - la escuchó suspirar y asiento, sin embargo hay una pregunta que no se callará hasta que la haga.

- ¿Usted sabe si Robert, realmente es mi padre biológico? - las palabras salen como balas hacia ella, veo como traga duro y cierra los ojos.

Al escuchar sus palabras, su respuesta, no se como reaccionar por un lado me siento aliviada ya que las miles de preguntas se callaron (por ahora) y por otro lado me siento molesta pero sé que no es a ella a la que verdaderamente debería preguntarle. Sé que debo armarme de valor y entrar a ese infierno una vez mas.

Me levanto de mi asiento sin decir mucho, solo le miento diciendo que saldré a caminar. Cualquiera dirá que estoy totalmente desquiciada pero es ahora o nunca cuando puedo lograr tener la oportunidad de hablar con Lianna y tener a la señora Morris distraída con su hijo, bueno, al menos uno.

Antes de que me retire ella me pide, casi suplica, que no le mencione nada al señor Tomlinson y sinceramente no tenia pensado hacerlo porque no es asunto mio. Al lograr articular un adiós y cierra la puerta desde afuera me siento acorralada, asustada y con el terror bajo mi piel. Me coloco frente la puerta unos segundos y coloco mi mano sana en el pomo para girarlo, no sospecho que sean ni las 19:00 p.m. Ingreso tragando duro.

La busco con la mirada y la encuentro hecha un ovillo en el suelo meciéndose de lado alado, asustada como nunca antes, debería no preocuparme pero lo hago porque de todos modos es mi madre.

- ¿Qué pasa? - le susurro agachada cerca de ella y sigo su mirada hacia mi morral, desde hay detectó un pequeño sonido, deduzco que es mi teléfono.

-... haz que pare - dice.

Me alejo de ella y agarró el morral para salir del departamento.

No quiero pasar una noche mas dentro de ese lugar con ella, realmente me genera escalofríos. Antes esto no me ocurría sin embargo con el tiempo me logro causal tal grado de terror que ya no se si entrar como si nada o con un arma en manos.

Rebusco en el morral hasta que encuentro el aparato, veo que tengo una llamada entrante y frunzo el ceño al ver el detalle de desconocido. Atiendo.

- Diga - pronunció y escucho un largo silencio - ¿Hola? - vuelvo a preguntar pero nadie responde. Suspiro y cortó la llamada preguntando a qué loco le gusta llamar mas de diez veces al mismo numero ya que tengo mas de diez llamadas perdidas y todas son del mismo desconocido.

Bien, no se que piensan ustedes. ES mas esta vez se los dejo todo a su criterio, jaja

Pregunta! Qué creen de Adeline y qué cambiarían de ella?

Bsos Vic :)

Sr. Tomlinson (sin corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora