Smoke Kiss 《Jikook》#KpopAwards2017

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Aquella semana fue un auténtico infierno. No dejaba de mirar mi móvil todo el día, en busca de una llamada que no llegaba nunca. Y no llegó. El maldito no me llamó en toda la semana. Quizás yo me había equivocado. Quizás yo no le importaba nada y me había hecho ilusiones yo solo..."Dios Jungkook que iluso eres, ¿de verdad pensabas que un tío como él caería ante ti?" Pensé.

El viernes llegó, y quería correr a esa discoteca a buscarle, pero no podía, si él tenía orgullo, yo tambien.

Yo nunca había fumado solo, es decir, tan solo lo hacía con él, pero él no estaba y a mi me hacía falta algo para distraerme, algo bastante contradictorio, ya que fumar me recordaba a él. Salí a comprar tabaco a una tienda 24h cercana a mi casa. Había un montón de marcas para elegir, yo obviamente no tenía ni idea sobre cual era mejor, hasta ese día pensaba que no había marcas, que el tabaco era tabaco y ya está, de modo que cogí la más barata y volví a mi apartamento.

Miré el reloj, eran las 22:30h, normalmente yo estaría ya allí, con el chico sin nombre, besando sus labios con humo. Me tumbé de mala gana en la cama y abrí el paquete de cigarrillos. Cogí uno y lo prendí mientras miraba al techo.

Aquello sabía horrible, sin duda no era la marca que Mr.Humo usaba, (tal y como le llamaba en mi cabeza ya que no sabía su nombre), pero en ese momento no importaba.
Sinceramente, tenía la esperanza de que Mr.H me llamase aquella noche, que me dijese que me extrañaba como lo hacía yo, pero no sucedió. No sabía si sentirme triste o cabreado.
Acabé mi cigarrillo y me giré sobre la cama, poniéndome en posición fetal, me gustaba dormir así cuando me encontraba deprimido, me hacía, de algún modo, sentirme protegido.

Pasaron 2 semanas más sin tener noticias de Mr.H, y no es que yo le hubiese olvidado, pero sí había perdido la esperanza de recibir un mensaje suyo, de modo que me sorprendí bastante cuando un número desconocido me envió un mensaje.

[ Hola Jungkook, soy el chico raro de la discoteca, me gustaría verte, tengo algo que decirte. Te espero en la cafetería "Fallen Leaves" a las 18:00. ]

¿¡Qué!? Y el cabrón no me había dicho aún su nombre, de modo que no me quedaba otro remedio que acudir a la cita, mi orgullo dolía por ser tan facilón, pero me daba igual, moría por verle de nuevo, y fuera de la discoteca, algo totalmente nuevo.

Me vestí rápidamente, no faltaba mucho para las 18:00, y por suerte aquella cafetería no quedaba muy lejos de mi casa, quien sabe si incluso el tipo vivía cerca suyo.

Cogí una chaqueta vaquera por si acaso hacía frío, aunque el clima de otoño de esta ciudad era bastante agradable. Avancé nervioso hacia la nombrada cafetería y cuando llegué a la terraza de ésta le busqué con la mirada. Esperaba encontrarle fumando, porque era la única imagen que tenía de él en mi mente, y quizás con las piernas apoyadas sobre la mesa. Pero lo que vi fue algo totalmente contrario. Estaba envuelto en un gran abrigo negro de plumas y sentado como un niño pequeño cuando le regañan, con las piernas muy juntas y los hombros bajos.

Me quedé a unos metros, observándole, incapaz de moverme. A pesar del abrigo, podía notar que estaba más delgado aún que la última vez que le vi, y desde luego ese abrigo no era normal en aquel día otoñal.

Debí hacer algo, porque de repente levantó su cabeza y me vio, al acto me dedicó una amable sonrisa. Me señaló la silla libre de su mesa con la mano tranquilamente, y poco a poco, me acerqué y me senté.

-Hola Jungkook. -dijo calmado.

-Hola, chico raro.

Él amplió ligeramente su sonrisa y le dió un sorbo a su café humeante.

-¿Tú no pides nada? -me preguntó.

-No he venido a tomar café - respondí cortante.

Hizo una especie de gesto afirmativo con su cabeza.

-Supongo que estás enfadado conmigo.

-Sí.

-Comprendo. Lo siento.

Nos quedamos en silencio.

-¿Eso es todo? -dije indignado- ¿¿No vas a darme explicaciones??

-Estoy intentando buscar las palabras correctas en mi interior.

Su calma al hablar me irritaba. Bufé.

-Si lo que quieres decirme es que no te intereso suéltalo y ya está, lo entiendo, no voy a enfadarme.

-No es eso, Jungkook. Me gustas, por supuesto que estoy interesado en ti. Verás yo...tan sólo quería darte las gracias por conocerte, me has hecho muy feliz estos 2 meses. Siento no haber sido más...afectuoso contigo. La verdad es que nunca pretendí encariñarme con nadie pero tú...-tensa la mandíbula. Le da dos golpecitos con el dedo índice a su café- Has conseguido que en mi corazón hubiese algo más que humo negro.

Le miro, confuso, no entiendo a que viene todo esto, no sé si me está diciendo que me quiere o no, de modo que, lentamente, me acerco a él y poso mis labios sobre los suyos. Noto que estos no son tan gruesos como los recordaba, pero aún así, su sabor, su esencia, sigue ahí.
Tras unos minutos besándonos lentamente en silencio, pausando y reiniciando los suaves y dulces besos, él se separa.

-Gracias por este día tan bello. Adiós, Jungkook.

Se levantó de su silla y yo le miré confuso desde la mía.

-¿Nos veremos de nuevo? -pregunté temeroso.

Él sonrió triste y levemente antes de marcharse.

Me quedé allí parado, estaba a punto de irme yo también, cuando me fijé en una servilleta de papel que había bajo su vaso de café.

"Park Jimin"

Tan sólo con ver aquellas dos palabras mi corazón se encogió de alegría. Por fin sabía su nombre. Por fin existía de verdad. Por fin.