Louis.
Volver a México después de haberme ido a New York aun me producía dudas, me fui hace un año trabajé unos meses y me di cuenta de que New York no es lo mío, aquí tengo a mis amigos, mi familia y algo llamado novia...si mi novia. Mis padres y los padres de ella planearon una boda, se supone que cuando ambos tengamos veinticinco nos casaremos y seria la gran unión de Familias y empresas, llevamos saliendo ya bastante tiempo, ella tiene veintidós al igual que yo, al principio me gusto es bella y tiene un cuerpo envidiable, pero con el tiempo se volvió un fastidio y además no es un tipo de persona muy agradable; es bastante engreída y yo se que solo esta conmigo por el gran futuro económico que le espera si se casa conmigo. Si supiera que no me casare; no soy bruto; si sigo con ella es porque aun no he encontrado a alguien que me haga perder la cabeza y mientras esa persona llega Tatiana me satisface mis necesidades humanas.
Mayte.
¿Quién seria la señora que vendría hoy?, hoy me voy a mi trabajo y a mi nueva vida, solo espero que no sea algo desagradable. Baje a desayunar con los demás, me levante temprano y ordene mis cosas, no es mucho lo que tengo, pero igual. Una vez que termine de desayunar, ayude a limpiar y fui a la oficina de la Madre Superiora. Toque tres veces y me gritaron suavemente "adelante".
Entre y estaba el Padre, la madre y una señora que estaba de espaldas.
-Buenos días- salude
-Buenos días señorita- saludo el Padre.
-Buenos días mi niña- dijo la Madre- mira querida te presento a la señora Isabelle Lewis Tu jefa-la señora se puso de pie y dio media vuelta, era una mujer no muy alta, piel blanca con los pómulos rosados, pelo castaño claro y ojos color miel muy hermosos, al verme me sonrió.
-Buenos días jovencita- me saludo amablemente.
-Buenos días, pero no me llame asi, me llamo Mayte y todos me dicen May– me acerque y la abrace depositando un beso en su mejilla.
- Mayte Sepúlveda-me dijo la Madre- ella será tu jefa- me separé de la señora, entendí que eso fue "debes de ser mas educada " – debes tratarla con respeto mi niña-asenti.
-A todo esto, ustedes me dicen que trabajare y todo, pero nadie me ha dicho en que.
-Yo te explico querida- dijo la señora- veras yo ya no estoy en condiciones de andar sola y andar haciendo algunas cosas y necesito a alguien que me acompañe, trabajaras como sirvienta en mi casa, no es algo complicado, pero tampoco fácil, tendrás un cuarto, comida y te pagaremos muy bien... ¿que te parece?
- ¿Podre venir a visitar a las hermanas y a los niños? - pregunte insegura.
-Por supuesto, solo me avisas y vienes no hay problema cariño- sonreí.
- ¿Cuándo comienzo?
-Hoy mismo, si estas listas podemos irnos.
-Iré por mis cosas- Sali de la oficina y fui al cuarto a buscar mis cosas, al salir me topé con todos en la entrada, me despedí tras lagrimas y me subí a un auto mientras el joven que manejaba hecho mis cosas en la maleta.
-Bueno Mayte cuéntame de ti, la madre me conto cosas, pero quiero escucharlas de ti.
-Que quiere que le diga-hice una pausa-soy huérfana; mi madre murió al dar a luz y de mi padre no se nada, las monjitas me criaron y todo lo que se es gracias a ellas, se escribir y leer mas o menos, jamás estudie y todos esos niños del orfanato son mis hermanos- dije.
Luego de un largo trayecto llegamos a una casa, ¿casa?, no ¡CASOTA!, era como el doble del orfanato, quede ¡I-M-P-A-C-T-A-D-A!, era una casa enorme muy hermosa, frente a la entrada había una pileta muy bella y el jardín estaba lleno de flores de diferentes tipos y muy bien cuidadas, el chofer bajo y nos abrió la puerta, me baje y me quede observando unos momentos la casa hasta que la señora me saco de mi trance.
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"El Principe & la Plebeya"- Louis Tomlinson
RomanceDisney siempre nos ha mostrado que el amor siempre gana, que el bien siempre triunfa sobre el mal. Que todas... Podemos ser princesas. Pero, la realidad es otra. La realidad es que los de abajo siempre tendran necesidades, que los de arriba se creen...