Una bala por escapar (#3)

Capitulo 22

DRAKE

Emily y o estábamos jugando a las cartas cuando entro Kyra a la habitación.

-Hola.- dijo con una sonrisa al vernos.

-Hola, mami.- Emily seguía mirando sus cartas distraída.

Sonreí a Kyra y eche una carta al montón, Emily miró mi carta y luego de nuevo las suyas.

-¿A qué jugáis?- preguntó acercándose a mi.

Cuando estuvo a mi alcance la rodee con mi brazo y la acerqué a mi.

-Jugar a la... ¿Cómo se llamaba?- pregunto Emily.

-Brisca, nena.- dije riendo.

-¡A ESO MAMI!- dijo Emily echando una carta.

-Que interesante...- Kyra se rió a mi lado, alcé mi mano hasta su culo y la dejé ahí.

-¿Sabes que me dijo el doctor, Emi?- preguntó entusiasmada Kyra.

-¿El qué?- Emily dejo las cartas sobre la cama.

-Que podemos ir a casa este fin de semana.- Emily comenzó a reír y saltan sobre la cama.

-¿PODEMOS IR A LA PLAYA, MAMI? ¿PODEMOS?- gritó entusiasmada, mi mente se congelo ante la palabra playa.

-Claro, cielo.- dijo riendo Kyra, me miró esperanzada- ¿Quieres venir?- preguntó, miré a Emily que sonreía, tragué saliva y me levante del sillón.

-No puedo...- dije entrecortado, a Emily se le borro la sonrisa que tenía y Kyra me miraba extrañada- Lo siento, pero no puedo ir a ese sitio.- mis manos comenzaron a temblar, necesitaba salir rápido de esta habitación antes de perder mi jodida mente- Me tengo que ir...Lo siento- murmuré saliendo por la puerta.

** *

Anduve por las calles en mi coche sin saber que hacer, al escuchar aquella palabra mi mente retrocedió hacer cuatro años, tragué saliva al recordar de nuevo.

Eran las tantas de la madrugada, así que fui a casa, cuando entre me sorprendió ver a mi padre sentado en las escaleras con un vaso de whisky en la mano.

-¿Qué haces despierto?- susurré para no despertar a nadie.

Mi padre se levanto y fue a la cocina,fui detrás de él.

-Siéntate.- ordenó mi padre apuntando con el vaso a una silla, cuando estuve sentado mi padre me sirvió un trago.

-¿Ocurre algo? ¿Están todos bien?- pregunte nervioso.

-Están todos bien menos tú, Drake.- dijo mi padre sentándose a mi lado.

-No se de que me hablas, Pa.- dije tragando de un sorbo el alcohol.

-Kyra ha llamado varias veces a casa preguntando por ti...- desvié mi mirada hacia el vaso vacío- Esta preocupada, dijo que te fuiste sin ningún motivo.

-No es nada.- miré a mi padre que me miraba serio.

-¿Qué ha pasado?- preguntó cogiendo la botella de whisky y echando otro vaso.

-Emily...A Emily le van a dar unos pocos días para que salga del hospital...- sonreí un poco por eso- Le vendrá bien,¿sabes? Necesita salir de ese sitio cuanto antes.- mi padre me miraba asintiendo con el rostro un poco más suavizado- Entonces...entonces dijo que quería ir a la playa...

-¿Y?- preguntó mi padre sin entender nada.

-No puedo ir allí, Pa, son demasiados recuerdos.- dije cerrando mis ojos.

-¿No vas a ir?- dijo molesto, negué con la cabeza.

-Ojala pudiera.- susurré para mi mismo.

-¿Entonces vas a dejar a tus chicas solas, desprotegidas? ¿Sabiendo que Zafir esta por Dios sabe donde?- me enfurecí al escuchar el nombre de ese desgraciado.

-No estarán solas, sabes muy bien que las estamos vigilando.- dije frustrado, pasando mis manos por mi cabello.

-¿Y si necesitan ayuda para poder dormir mejor?- preguntó mi padre en voz baja- ¿Vas a enviar a uno de nuestros hombres para arropar a Emily?- apreté mi mandíbula solo de imaginarme esa situación.

-No, claro que no.- dije furioso.

-Kyra es una mujer fuerte, luchadora...Criar a un niño no es fácil, mucho menos solo, pero Kyra lo hizo.- dijo mi padre mirando la botella- Puede que los hombres que se han acercado hasta ahora se hayan ido, pero una mujer así no estará sola por mucho más tiempo.- mi padre desvió la mirada hasta mi- ¿Vas a ver como otro la conquista? ¿Así de sencillo?- dijo pasando una mano por su rostro.

No supe que contestar, solo podía imaginar a Kyra y Emily con un hombre que cuidara de ellas, dejándome a mi al margen.

-Junta de una vez tu mierda, Drake, y ve hasta esa maldita playa y conquista de una vez a Kyra...- se levantó y fue a por otra botella.

-Odio cuando llevas tanta razón.- murmuré pensativo.

-Siempre la llevo.- dijo guiñándome un ojo, sonreí y rasqué mi nuca- Te ha cambiado y ni siquiera te has dado cuenta.- murmuro mi padre mirando mi sonrisa.

Me encogí de hombros.

-Consigue que quiera ser diferente...Mejor.- susurré de vuelta- Me gusta el hombre que soy cuando estoy a su alrededor... Me hace sentir limpio,¿sabes?- mi padre asintió pensativo.

-Te hace sentir que eres valioso.- dijo mi padre en voz baja.

-Si, exacto.- dije levantándome- ¿Cómo lo sabes?- vi como se iba por la puerta de la cocina.

-Porque tu madre me hace sentir lo mismo.- susurró desapareciendo en la oscuridad de la casa.

Se que es corto pero pronto actualizare, así que tener un poco de paciencia. Si os gustó ya sabéis que hacer, mi gente.

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