Capítulo 9

65 11 10
                                    

Al terminar mi turno, me fui a los vestuarios a prepararme para la fiesta; Luke estaba allí, desabotonando su bata, dejando al descubierto una camiseta gris que se adhería a su cuerpo enloquecedoramente. Me quedé embobado viendo como se acomodaba el cabello y terminaba de guardar las cosas antes de estirar su cuello en un movimiento circular que me dio una excelente vista de su nuez de Adán. Tragué duro y respiré profundo antes de encaminarme a mi taquilla, intentando no llamar su atención...

-Oh, Mike - si, cómo no - ¿ya acabaste tu turno? - asentí, tenía la boca seca - Pues entonces te espero y vamos juntos - agregó sentándose en uno de los bancos que había junto a una fila de taquillas...la de mí taquilla.

Agarré mi ropa regular e, intentando ocultarme con la puertecilla, me quité la parte superior, enfundándome rápidamente mi camiseta. Lo siguiente era más complicado; eché un vistazo por los orificios de la puerta en dirección a Luke, y lo vi mirando intensamente hacia mi, mientras jugueteaba con la esquina izquierda de su labio inferior, imagino que acostumbrado a la presencia de su sensual aro. No tenía idea de como evitar su mirada mientras cambiaba mis pantalones, pero al cerrar él sus ojos y enterrar la cabeza en los brazos cruzados sobre sus rodillas, noté que ya no debía preocuparme.

Intercambié las prendas tan rápido como puede, y luego de abotonar mis jeans me senté a su lado a colocarme los zapatos.

Él levantó la cabeza de su escondite y me sonrió de medio lado al ver que lo observaba, yo, por mi parte, acabé de acordonar mis zapatillas, me levanté y cerré la taquilla.

-¿Nos vamos? - pregunté parándome justo frente a él, tanto que al levantarse nuestros rostros quedaron perturbadoramente cerca. Di un ligero paso atrás, solo lo justo para no tentarme a besarlo, pero aun así podía sentir su respiración.

-Sí, vámonos - respondió y juntos salimos en dirección a la sala que habíamos separado (gracias a Luke) para la fiesta.

Al llegar las gemelas saltaron sobre Luke, y comenzaron su habitual sesión de coqueteos. Yo me acerqué a Cath que estaba hablando con una de las enfermeras, la que suele cuidarla los días que yo descanso por las guardias.

-Hola - las saludé a ambas. La mayor me dedico una sonrisa a modo de respuesta.

-Hola Mike, ¿a que quedó mono? - pregunto refiriéndose a la decoración que consistía en un par de globos y unas cadenetas de papel. Pero al fijarme hacia donde estaba mirando la niña me di cuenta de a qué objeto decorativo con brillantes ojos azules se refería en particular.

-No tienes remedio enana.

-No, lo que tengo es gusto, no lo puedes negar, después de todo, voy a casarme contigo.

-Obviamente, ¿dónde está tu hermano?

-Debe de estar por llegar, fue a ducharse, así que en unos 10 minutos debería estar aquí.

-¿Quién lo traerá cuando llegue?

-Pues tú, claramente - contestó como si fuese lo más obvio del mundo, aun cuando no me había comentado nada.

-Ok, entonces me voy - le dije antes de voltearme para salir, tropezándome con Luke - Lo siento.

-No te preocupes - me dijo sin quitar sus ojos de los míos. Me moví para que pasara y terminamos simplemente intercambiando posiciones.

-Yo, tengo que irme - "¿Y a él qué le importa? Solo cállate y vete"

-¿Te vas? ¿Por qué? - preguntó en un todo que incluso llego a parecer de decepción.

-Solo voy a buscar a Calum, regreso enseguida - expliqué. Su expresión se relajó.

-Oh, vale, te veo luego, supongo - dijo con una sonrisa que no tardó en transportarse a mis labios.

Cuddles PrescriptionWo Geschichten leben. Entdecke jetzt