Capítulo 9

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Nos queda muy poco para volver a casa pero todavía me queda unos días mas al lado de mi enamorado, dentro de una semana Justin vuelve a Los Ángeles y yo me quedo sola en Stanford, volver a clase y volver a ver Adam que desde que esa noche en la playa me quiso besar no logro quitarme de la cabeza que le rechacé y tendré que explicar que estoy ya si que si con Justin, no se como se lo tomará espero que bien.
Esa mañana seguía dormida en los brazos de mi primo, sentía como respiraba y como se oía los latidos de su corazón, hoy un pequeño gemido y me desperté, era él que se había despertado.
-Buenos días primita, como has dormido bien yo tengo una resaca de anoche, ¿Quieres que te preparé un desayuno bueno?.
-Si pero antes quiero hacer una cosa. Cojo y me pongo encima de él, comencé a besarlo, acariciar su cuerpo, le hice el amor esa mañana así tal cual recién levantado y sudado me encantaba oler su cuerpo asi y besar su pecho tatuado y musculoso. Me apartó y se puso encima de mi, me deslizó el pijama de arriba y el de abajo besando mi cuerpo y mi cintura, yo acariciaba su pelo entre mis dedos me miraba seductor, penetrando su mirada de color café y esa mirada tan seductora que tiene él, bajó mi pijama y mis braguitas se colocó un preservativo y me guiño un ojo rápido me penetró muy suave y que por momentos aceleraba su ritmo sintiendole muy pegado a mi abdomen no paraba de gemir agarrándose al cabecero de la cama y yo agarraba las sábanas de los mas fuerte que casi las rompo, llegué al orgasmo antes que él, él seguía moviéndose dentro de mi que un segundo noté que ya había llegado tambien al climax.
-Te gusto bella durmiente.
-Si me encanta, hacemos algo guay esta tarde, como cine, chino y disco.
-Ok estupendo vamos que hay que desayunar, arreglar la casa, preparar la comida, que te voy a hacer unos macarrones con queso que quitan el hipo veras, me guiña el ojo.
Se levanta y se va a hacer el desayuno, yo me levanto detrás de él, quite las sabanas y saque unas nuevas del armario deje las sábanas en el sillón de la habitación y abrí para que se ventile la habitación.
Baje y le ví preparando el desayuno, tostadas, tazón de leche con colacao y zumo de naranja, me senté enfrente de él.
-Jus se que ésto tarde o temprano se acaba tú te iras a LA y yo a clase todo volverá a ser igual que antes sin ti.
Justin me miró y sonrió.
-No tiene porque, si accedes a venirte conmigo a vivir allí, yo también echaré de menos ésto, verte todos los días a mi lado, charlando... Etc.
-Primero tengo que terminar los estudios allí, luego si eso me iría a LA contigo, me esperas verdad. Cojo su mano y la acaricio.
-Si claro que sí, ven conmigo anda sientate a mi lado, encima de mis rodillas. Arrastre la silla y caminé hacia él me senté en su rodillas, acaricié su cara y lo abrace.
-Eres lo mejor que me ha pasado en la vida te quiero, comencé a llorar él me aparta y me mira con la mirada centelleante.
-No llores yo te esperó allí, en mi casa de Los Ángeles no te haré daño. Lo juro.
-Lo sé, empezó a trotar sus piernas y a moverme.
-Jajaja, que no soy un bebé.
-Eres mi bebé mi niña favorita. Acarició mi cara y me beso, sentí sus besos entre mis labios sabe besar y sabe erizar mis sentidos.
Me levanté y puse una lavadora de ropa blanca luego pondré otra de ropa de color, Justin se quedó en el salón viendo las noticias de deporte.
Yo subí arriba hacer las tareas de la casa, el baño, la habitación, el salón.
En la hora de comer mi primo preparó los macarrones con queso que estaban de vicio una vez ya comido él fregó los cacharros y se fue a dormir siesta en el sofá yo me quedé viendo una película en la TV.




Permitame Amarte. (Acabada)Where stories live. Discover now