Conviviendo con mi pesadilla

Dylan III: Accidente

Dylan

Estaba molesto e irritado, no entendía por qué Mia se juntaba con Ethan. Ella no se suele juntar con chicos y que ahora esté con su mejor amigo me molesta.

— Necesitamos un libro de historia —Dice Brinden mientras observa con repugnancia a los libros que lo rodean. 

Este lugar estaba repleto de libros, cada uno es llamativo y con mucha información,y si fuera mi Yo de antes, tendría la misma cara que Brinden.

— Yo revisare por allá —Señalo la sección 6 de la biblioteca— , y tú ve por donde te de la gana.

Él sonríe de su parte para luego, con demasiada alegría, sale casi corriendo por la entrada de la biblioteca. ¿Tanto odia los libros? Eso explica por que le va tan mal en la escuela.

Mientras tanto, yo camino hasta los estantes, reviso varios libros para ver si concuerda con la información que necesitamos. Tengo que admitirlo, si estos no fueran libros con información entonces lo leería, después de todo no soy un simple mundano. Tras un rato buscando por las portadas de los libros,  veo un libro tiene lo que exactamente necesitamos. Así que lo tomo y decido salir de allí con el fin de aventarlo a la cara de Brinden; no obstante, algo me dejo atónito. No podía procesar lo que veía, era irreal para mi. ¿Acaso ya la perdí?

Eres un idiota. La haces llorar, le quitas su novio y le robas un beso mientras estás ebrio.

Nada en el mundo me haría arrepentirme de ese beso, nada. 

Ella está abrazada a Ethan, ambos sonríen, están muy cercas pero eso no les importa.

¿Ya están saliendo? ¿No eran mejores amigos? Maldita mudanza, sino fuera por eso yo ya estaría confesándome. 

Presione la mandíbula con rabia, tenía ganas de ir y romperle la cara a Ethan, después de todo es un niño mimado.

No servirá de nada...Tú te vas a otro lado del mundo.

Cierto. No tengo otra que apartarme de ella y dejarla con su vida.

Observó un rato más la escena hasta no poder seguir viendo y salgo de allí. Le arrojó el libro a Brinden quién andaba coqueteando con una chica, otra vez. Quiero irme y salir de allí. Alejarme de toda esta mierda que me rodea.

¡Mierda, todo es una basura!

¿Quién diría que te ibas a enamorar?

Juré nunca enamorarme,eso es solo mierda que causa dolor. Nunca me enamoré,pero apareció Mia con su belleza y su honestidad, obligándome a romper mi juramento.

Es tu culpa. Ahora sufres por enamorarte.

¿Cómo dejas de sentirte así? ¡Es todo una porquería!

Camino y camino, me aleje de la biblioteca, de la escuela. Veo mi auto, un Renault de los últimos modelos, este brilla al reflejo del sol y, su color rojo intenso me sacan un sonrisa. Al fin mi padre decidió darme un auto pero a cambio tengo que dejar a Mia y esta ciudad, seria capaz de vender el auto con tal de quedarme. Entré al auto y me subí en él, luego encendí el motor y conduci a toda velocidad, quería sentir el viento en mi rostro y así sacar mis preocupaciones de la cabeza. Llegué al parque de la ciudad, era un lugar repleto de árboles alineados, veredas y caminos hechos de piedras delicadas, el césped se adueñaba del lugar y había algunos columpios en la parte central del parque. Este bello lugar tenia el tamaño de cuatro cuadras enteras, era todo un lugar turístico.