Capítulo 8: conociendo a la castaña enojona

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2010 noviembre 2 martes

Pov's Quinn.

Era otro día más de clases. Pero estaba feliz ya que hoy nos diría la entrenadora cuando sería la primera práctica. Ya quería que nos dijera. Porque siempre me ha gustado el soccer, desde pequeña cuando vi un partido. Y le pregunte a mi papá que era. Él me dijo que se llamaba futbol pero en este país le dicen soccer. Y que no se juega mucho. Pero yo investigue, y descubro que era bastante jugado por las mujeres en Estados Unidos. Encontré las reglas, como se jugaba, las medidas de las canchas, los torneos que hay. Y que se juegan en selecciones y clubs en las ligas de los países. Vi videos y me impresionar mucho los jugadores sudamericanos. Para mí el mejor delantero es Ronaldo, jugador brasileño que con un buen juego de goleo. Y ahora juega en su país, pero llego a jugar para equipos como el Barcelona y el Real Madrid.

Pero desde pequeña mi sueño fue jugar para la selección de futbol. Y poder ganar el mundial. Y cada vez que jugaba solo, me imaginaba ganando el mundial. Eso fue cuando tenía ocho años. A los 10 conocía a Brittany, yo le conté todo sobre el futbol. Pero a ella no le gustaba mucho jugar. Era raro que jugáramos. Pero mi papa me metió en el equipo de mi colonia. Y fue hay que descubrir que era una jugadora armadora. Hay conocí a Santana, al verla dominar la pelota supe que era buena. No paso muchos días para que nos hiciéramos amigas. Al siguiente año se transfirió a mi escuela. Yo tenía 10 años.

Cuando Brittany se unió al equipo. Creo que se sentía celosa que pasara mucho tiempo con Santana. Brittany no era buena jugando con los pies. Pero si con las manos, entonces la pusieron de portera.

En la portería Brittany se transformaba. Era difícil meterle goles, y en su primera temporada solo le metieron 3 goles. Para mí era como un gato, que salta bien rápido y extiende sus patas. Solo puedo decir que sus reflejos son buenos.

El tiempo pasó y seguíamos en ese mismo equipo. Al entrar a la secundaria vimos que éramos populares. Nos unimos a las porristas ya que como éramos grandes no podíamos seguir en ese equipo. Porque era para que cuando eres pequeño aprendas a jugar un deporte. Y aun como porristas, siempre jugábamos las 3. Cuando estuvimos en último de secundaria. Quisimos entrar a un equipo reserva. Pero no nos aceptaron, y también que teníamos que conducir mucho. Y nuestros padres no podían llevarnos todos los días.

Por eso hoy es especial.

Las clases empezaron bien, como todos los días participaba. En el receso me puse a hablar con Santana. Ella quería que me saliera del club de música.

Sn- no puedes estar en los 3. Y lo sabes.

Q- claro que lo sé. Pero para tu información en el club de música solo tengo enseñarle a Rachel.

Sn- claro a la chica nueva.

Q- sí.

Sn- y puedes dejar que el profesor le enseñe.

Q- pues no quiero que pase eso.

Sn- te gusta.

Q- si y ayer hable con Kurt y me dijo que ella es lesbiana.

Sn- hablando con el chico raro.

Q- sabes que no le hablo porque me agrade. Solo lo hago porque me dice cuando insultan a alguien por su orientación sexual.

Sn- si los, yo te ayudo.

Q- y sabes para que dices algo que no es cierto. Pero lo que importa es que quiero conocer a Rachel.

Sn- que vaya bien. Q- pues creo que así será. Ya que la siguiente hora la tengo con ella.

Santana solo me apoyo. Ya que en toda mi vida solo había tenido una novia. Y no fue una buena relación. Cuando llegue, la miro sentada sola. Yo ya sabía que seriamos pareja de laboratorio. Hoy tocaba división celular. Yo no soy buena en química. Y hoy mirábamos cómo los elementos dan o reciben electrones en su última orbita. Era un tema que lo vimos la semana pasada, pero casi nadie lo entendía. La profesora reparto las hojas, y al verlo supe que eran difíciles. Me costaba resolverlos, y pensé ver cómo le iba a Rachel. Y cuando la vi estaba escuchando música. Por lo visto manejaba bien el tema. En cambio yo no. Le iba pedir ayuda. Pero era no escuchaba nada más que su música. Se supone que somos compañeras y tendríamos que ayudarnos. Pero las cosas eran diferente. Yo no pido ayuda todos los días. Siempre me va bien. Saco buenas notas, estoy entre las mejores.

The six Faberry (Faberry G!P)Where stories live. Discover now