Conexión

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Me siento tímida ante su penetrante mirada en toda la cena, yo no dejo de mirara hacia todos los lado ¿Por qué me pasa esto? ¿Por qué me pone tan nerviosa? Ni siquiera soy capaz de aguantarle la mirada. Odio que no me aparte la vista ni un segundo.

- ¡Quieres dejar de mi mirarme! - le espeto ya cansada -.

- No te estaba mirando a ti – responde levantando su ceja izquierda -.

- ¿Entonces me puedes explicar que estabas mirando tanto tiempo? - cruzo los brazos -.

- El sofá – lo señala - es muy rústico... - dice finalmente, lo miro incrédula ante su contestación -.

- ¿Rústico? - respiro profundamente – pues deja de mirar el sofa, lo vas a desgastar – le espeto y comienza a reírse -.

- ¿De verdad estas molesta por eso? - agarra su vientre mientras se ríe a carcajadas – eres... eres un caso aparte – dice finalmente -.

- Y tu un poco idiota – le espeto -.

- No de verdad lo estaba haciendo... - dice – mira – se levanta y viene hacia mi, siento como si mi respiración se entrecortara, anda decidido hacia mi lado, se agacha y ambos nos miramos fijamente – hay esta roto... es lo que no dejaba de mirar - señala y me muerdo el carrillo de mi labio, su rostro cada vez esta mas cerca del mío, siento como si el corazón se me fuera a salir del pecho, mis manos me tiemblan y su respiración es agitada, siento como el aliento sale por sus labios y choca con los míos, estamos tan cerca... -.

- Lo siento tienes que irte – le pido y giro la cabeza hacia mi lado izquierdo – se ha hecho tarde y estoy cansada – le digo finalmente -.

- Solo son las diez y media... - dice mirando el reloj de su móvil -.

- Tengo... tengo cosas que hacer – me mira extrañado - y estoy agotada – asiente, se levanta y tras un pausado silencio sale por la puerta observo por la mirilla como se marcha y entra en su apartamento -.

- ¡Joder! ¡Joder! - digo exasperada mientras me doy palmadas en la frente, no se que me está pasando -.

Miro al sofá y comienzo a reírme como una adolescente ¿Qué me esta pasando? Las imágenes de el vienen a mi cabeza, no me podía quitar el ojo de encima... y va y me dice que estaba mirando el sofá. Me dirijo hacia la cama, estoy agotada y necesito dormir...

" - Eres una niña mala – le digo llorando, me siento pequeña y frágil, ella se ríe de mi, todas las niñas lo hacen -.

- Me da igual yo por lo menos tengo pap'ss, no como tu que no te quiere nadie – me espeta Silvia, una niña de diez años -.

- Ya no eres mi amiga y vosotras tampoco– le digo señanlándolas y llorando – ¡Yo si tengo papás! - grito – vienen todos los días a por mi... - lloro desconsolada -.

- ¡Ese es tu abuelo tonta! Tu no tienes papa por que no te quiere – dice cruelmente, me pega una patada en el tobillo y me tiro al suelo, sentándome en el. Me tapo los ojos con las manos y lloro sin cesar, mientras todas las niñas siguen riéndose de mi y llamándome cosas muy feas..."

Me levanto sobresaltada sudando a mares, mi respiración es entrecortada... esos sueños vienen una y otra vez a mi, no entiendo por que lo hacen, se supone que lo supere... las lágrimas brotan por mis mejillas, respiro hondo intentando calmarme...

Me levanto de la cama y miro la hora solo son las cuatro de la mañana, me voy hacia el comedor y enchufo una lámpara de luz tenue, pongo la música en voz baja no son horas de despertar al vecindario y mucho menos a la vecina que tengo bajo mía.

Estiro mi cuerpo y comienzo a bailar, sentir como la música evade mis malos recuerdos... como si esos años de dolor pasan a lo lejos intentando marcharse, cierro los ojos y noto como cada palabra de la canción retumba en mi cabeza evadiéndome de todo.

" TU NO TIENES PAPAS" intento no pensar en ello pero esas crueles palabras vienen una y otra vez a mi cabeza, intento ignorarla pero no puedo, subo un poco mas el volumen de la música dejándola al ocho, las lágrimas vuelven a brotar por mis mejillas, no tengo fuerzas, dejo de bailar y me siento en el suelo. Apoyando mis piernas en mi pecho y abrazándome con mis brazos.

No se la hora que es, el sol entra por la ventana del comedor, estoy tumbada en el suelo, sudando por el calor del verano. Miro hacia la pared de la cocina donde cuelga un reloj y son las siete de la mañana. Recuerdo perfectamente por que estoy aquí, llore y llore hasta que deje de hacerlo, ya no tenia mas lagrimas que derrochar, ya había llorado lo suficiente como para no hacerlo en meses... hasta que tras unos largos minutos pude quedarme durmiendo en el frio suelo de la madrugada.

Voy hacia la cocina donde me preparo un café, necesito algo que me de energía, me lo tomo rápidamente y corro hacia el baño no hay nada mejor como el deporte para evadirme de todo. Enchufo el iPod arreglado y salgo lo mas rápido que puedo por la puerta de casa.

Corro hasta el gimnasio, entro sin decir nada, ni buenos días ni nada, pensaran que soy una maleducada pero no me importa. Me subo a la maquina de correr y lo pongo al nivel seis, voy demasiado rápido y disfruto de la energía que me esta dando mientras escucho la música a todo volumen.

Siento como si alguien me toca por detrás y me sobresalto, apago rápidamente la cinta de correr y me quito los cascos, como no...

- Parece que no soy el único al que le gusta estar a primeras horas por aquí - dice sonriendo Oliver -.

- Parece que te tengo que tener hasta en la sopa – le espeto y sonríe -.

- De verdad chica – se lleva las manos a la cabeza – no entiendo que te he hecho yo para que seas tan borde conmigo... - suspira, pasa la mano por su barba de dos días -.

- Básicamente incordiarme ¡Ah! Y vivir enfrente de mi – pongo cara de asco y comienza a reírse, yo sin darme cuenta hago lo mismo -.

- Al final te caeré bien y todo, parece que la chica borde también sonríe – borro la sonrisa por completo, no me había dado cuenta que lo estaba haciendo – tranquila te puedo guardar el secreto y hacer creer que eres una chica antipática – no le quito el ojo de encima -.

- Hola guapetón – pasa una mujer rubia tras de el, rozándole el hombre y guiñándole un ojo, no se por que pero siento como si me molestara ¿Me molesta de verdad? -.

- Bueno yo aquí ya he acabado... me marcho – bajo de la cinta y me dispongo a salir -.

Salgo lo mas rápido que puedo ¿Por qué estoy actuando así? No logro entender por que me molesta que las chicas se fijen en el... ¿Estaré celosa? Esa pregunta no dejo de hacérmela una y otra vez desde que lo he conocido.

- ¡Laura espera! - grita Oliver tras de mi, continuo andando -¡Espera! - me alcanza y siento como el tacto de sus dedos arden en mi piel, todo se remueve dentro de mi, ambos nos quedamos mirándonos, conectados por algo... una especie de corriente que nos desconcierta a ambos -. 


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PD: Bueno mis perlas, espero que os haya gustado y hacermelo saber ehh!! os espero en mi grupo cerrado dónde podeís comentar todo lo que queraís e interactuar ¿Amor o Amo? (PERLAS) y también en mi página de facebook ¿Amor o Amo? un besazo enorme mis perlas!! 

Locura Insaciable ©Where stories live. Discover now