Capítulo Doce.

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Pasé la noche entera abrazada a Matt mientras estaba acostada sobre su regazo escuchando los latidos de su corazón tan de cerca, golpeando contra mi oído, mientras el mío se estaba derritiendo por dentro, nunca había tenido la oportunidad de admirar ese sonido tan bello e irremplazable tan de cerca. Aunque estaba nerviosa porque no sabía si Matt en algún momento como cualquier chico intentaría sobrepasarse conmigo, o insinuar que tuvieramos intimidad, pero en ningún momento le noté intención de hacerlo, aunque era de esperarse él era un caballero en todo su explendor. Agradecí que no tocara el tema en ningún momento de la noche, ya que aún no había tenido mi primera vez, y en mi corta edad nunca se me cruzó la idea de pensar en el día en que se presentara la oportunidad de tener a un chico tan de cerca y menos durmiendo en mi casa mientras mis padres no estaban. Él sólo dedicó la noche entera a acurrucarme sobre su pecho y acariciarme el cabello hasta que pude conciliar el sueño.

Después de despertar, lo primero que hice fue tomar una ducha rápida y colocarme algo básico de ropa para asistir a clases, optando así por unos pantalones vaqueros con una playerita holgada color blanco y mis converse de la suerte, mientras Matt me preparaba el desayuno.

Mientras cepillaba mi cabello, Matt entro a la recamara cargado de una charola con lo que podría ser el desayuno, lo miré y sonreí.

— ¿Cómo amaneciste, belleza? —preguntó mientras colocaba la charola repleta de aperitivos sobre la cama tendida.

— Bastante bien, y estaba comenzando a extrañarte pero ahora que te veo la felicidad volvió a mí —dije, y terminé de cepillarme.

Caminé hasta llegar a la orilla de la cama y sentarme frente a él.

— Sólo fueron unos minutos —fanfarroneó. Tomo un trozo de omelette con el tenedor y lo llevo a la altura de mi boca— anda, prueba estas delicias que te prepare con tanto amor.

Abrí la boca y probé el primer bocado, la verdad que estaba delicioso. Aún me sorprendía el hecho de que Matt no solo cocinara sino que lo hacía bastante bien y todo le quedaba exquisito.

Una vez que me pasé el bocado, lo miré y curvé mis labios en una sonrisa.

— Esto es lo más delicioso que he probado —dije extasiada.

— Ghm —se aclaró la garganta indignado, insinuando que me faltaba algo por recalcar.

— Después de tus labios, claro está —terminé la frase, y él sonrío satisfecho con lo dicho.

Matt me ayudó a terminar de desayunar, para que pudiera llegar a tiempo a mis clases. Él se ofreció a lavar los trastes y ordenar un poco la casa, agradecí por eso, al fin me sentía atendida por alguien y podía decir que era la primer persona en tanto tiempo que me demostró que dejar que los demás hagan las cosas por ti no estaba mal de vez en cuando.

Me despedí de Matt con un dulce beso en los labios, caminando apurada hasta llegar al auto de Louis que ya estaba aparcado a mitad de la calle. Saludé a Denise con un beso en la mejilla y a Louis con un choque de puños mientras me montaba al auto.

Llegamos al instituto, y caminamos hasta llegar a nuestro respectivo salón de clases. La primera materia que nos tocaba era Historia, justo la clase que menos me agradaba, y sobretodo, por haberme forzado a empatizar con la odiosa de Taylor, con la cual desde el día de ayer he tenido que guardarme un poco mis opiniones con respecto a ella para no dejar tan expuesta la idea de que no la soportaba ni tantito.

El profesor cruzó el umbral y se sentó en su escritorio. Sacó de su maletín su carpeta de apuntes de la clase, y nos miró a todos por encima de los lentes que cubrían la fría mirada que destilaban sus grandes ojos negros.

POR SIEMPRE TÚ♡| Saga: FAMOUS #1| #PremiosHood2020Where stories live. Discover now