STAY BY ME [Jikook]

Capítulo 8.

Jimin.

El calor de su cuerpo me envuelve y soy feliz con solo pensar que puede ser una sola persona.

Abro mis ojos encontrándome con aquel rostro relajado, respirando pausado envolviéndonos con nuestros brazos.

Anoche no fuimos al galpón y olvidé completamente hablar a Taehyung, quizás sea un episodio o simplemente Jungkook provoca tal efecto hipnótico en mí, que llego a olvidar cualquier otra cosa que no sea él. Es más en aquel momento lo único que recordaba era a mi mejor amigo.

Flasback.

Me dolía la cabeza de manera punzante. Nunca he sentido tal dolor en mi vida. No podía abrir los ojos y, apenas intentaba, el dolor se tornaba cada vez más fuerte.

Comencé a llorar y lloraba desesperado.

Que alguien me ayude. Duele. Por favor.

Sentía como unas manos me sujetaban, intentando que no mueva mi cuerpo pero era inútil.

-Jimin...- Esa voz.- Jimin quieto, te haces daño.

De inmediato detengo mi forcejeo y despacio intento abrir mis ojos.

Deduzco que estoy en un hospital por la cantidad de personas vestidas de blanco. Son muchas personas pero al único que logro reconocer es a Jungkook.

Su rostro arañado y lleno de parches me indican lo lastimado que estaba.

Estiro mi mano hacia él por alguna razón pero alguien me abraza antes de que pueda reaccionar. Es una mujer que llora desconsolada en mi hombro, llamando mi nombre, más no la recuerdo. No recuerdo a nadie excepto a aquel niño que un día me dibujó en la escuela.

Fin del flashback.

Tocan la puerta de mi cuarto y Jungkook se remueve sin intenciones de levantarse. ¿Quién es a estas horas de la mañana?

Me levanto despacio para no mover demasiado la cama. Camino a la puerta y abro la misma notando que mi hermano espera detrás de la misma.

-¿Qué?- Le pregunto de forma grosera.

-¿No piensas ir a la universidad?

-No, creo que hoy me quedo en casa.- Haejin intenta entrar pero trapo su paso con mi cuerpo.- Estas con él. Oh... dime que no hacen asquerosidades.

Lo miro furioso y él solo ríe malicioso.

-Vete.- Lo empujo para que salga pero aún es más fuerte que yo.

-¿Recuerdas aquella vez que caíste del precipicio?- No contesto.- ¿Valió la pena salvarte o realmente querías morir?

No debí habérselo contado. En aquel momento me sentía deprimido porque Jungkook no correspondía a mis sentimientos.

-¿Vale la pena rogar por migajas? ¿Vale la pena arrastrarte?- Cada pregunta taladra mi pecho con mil agujas.- No eres idiota, Jimin. Lo sabes.

-¿Por qué? ¿Por qué aquella vez solo lo reconocí a él?

-Porque tu angustia era tan grande que solo recordabas el dolor.

-No. Lo recordaba porque lo quería.

-¿Y a mi no?

-¡Claro que si! Supongo que si...

-¿Entonces por que no me recordaste a mi también?- Me dice y me quedo pensando.- Aquel chico que está sobre tu cama.- Miro en su dirección.- Jamás te quiso como tú quieres. Resígnate. Vuelve a salir con mujeres, úsalas, déjalas, pero haz algo por ti mismo. No permitas que te pisoteen. Ni el, ni yo, ni nadie.