capítulo 23 /parte 2/

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Realmente satisfecha, me levanté (a duras penas) de la silla del comedor. Kyungsoo cocinaba delicioso. Tampoco era algo que no esperara, su familia parecía del tipo especial con esa clase de cosas. 

Fui hasta la sala, donde Chanyeol ya se encontraba viendo algo en la televisión. En la esquina de la habitación, logré observar cómo Bonita no le apartaba la mirada a Chanyeol, ¿amor de infancia? La niña ladeó de todas formas su cabeza, y parecía que no terminaba de entender algo. 

─¡Bonita! ─Gritó la madre de Soo desde la cocina─ ¡A comer, cariño!

La niña agitó un poco su cabeza, y caminó dando saltitos hasta la cocina. Chanyeol se giró un poco en el sillón, hasta que quedamos de frente. 

─Hanuel, tengo algo qué decirte ─susurró. 

─No quiero oírlo ─dije en el mismo tono. 

Con rapidez, se levantó del sillón y se posó justo frente a mí. Me miró directo a los ojos, y no pude no sentirme intimidada por toda la intensidad con la que me miraba. 

─Es importante, créeme, es muy importante. 

Apretó mis manos. 

─Está bien, dime. 

─Aquí no. 

Me jaló de las manos hasta que llegamos a la puerta de entrada, me soltó y abrió la puerta. Me indicó que saliéramos, y eso hice. Afuera estaba algo frío. 

─¿Qué es tan importante?

La sensación de que algo malo saldría de los labios de él, me hizo sentir incómoda. Sus ojos no mostraban esa diversión tan característica de él, ni su sonrisa esa fina curva que indicaba que se burlaba mentalmente de ti; si no, su rostro se encontraba frío. Sus ojos no mostraban ningún sentimiento, y la fina curva de sus labios estaba completamente recta. 

Él suspiró y agachó la cabeza. 

─Chanyeol... 

Mi voz hizo eco entre la penumbra de la noche, todo estaba bastante callado. 

─Yo, tengo esto que... que quiero decirte ─tragó saliva. 

─Sólo dilo. 

Puse mis manos en mi espalda, tratando de que él no se percatara de que éstas estaban temblando. Sí, Chanyeol había dejado de importarme, o bueno eso creía, aún quedaba ese extraño sentimiento cuando lo veía. Ese al fondo del pecho que te impide pensar con claridad, y hasta a veces no te deja respirar. 

─La razón por la que me aleje, por la que jamás pudimos estar juntos, por la que te dejé ir alguna vez... 

Tomó mis manos, y levantó la mirada. Llevó mis manos hasta su pecho, donde su corazón latía con fuerza, como si quisiera salirse e irse a correr un maratón y no volver hasta año nuevo. 

─Está latiendo, ¿lo sientes? Muy rápido, esto me asusta ─frunció el ceño. 

De un tirón, aparté mis manos de las suyas y las volví a esconder. 

─Déjate de rodeos y dime qué es lo que sucede. Ya, no me pongas nerviosa, sólo dilo. 

─Tú eres un ángel, ¿no? 

Mi mirada cayó al suelo, junto con mi corazón. Ya lo había olvidado completamente, era algo tan insignificante, que lo había olvidado. 

De pronto, mi memoria se llenó de vagos recuerdos viejos. Entre ellos se encontraban Park, Young Mi, Chanyeol, Lay, Yon, Kyungsoo... Todas las personas que pudieron haber escuchado mi gran secreto. Un secreto que odiaba, mi vida no era normal, no importaba cuánto intentara que lo fuera. 

moonlight. →park chanyeol [EN EDICIÓN]Where stories live. Discover now