Coronada [CDM]

Altos y bajos

A ver, no comí picante, ni legumbres. Lo único que pedí esta mañana fueron las galletas de chispas de chocolate de siempre y mi bebida de cada día, mi latte deslactosado.
Un momento... quizá ese era el problema. Quizá mi latte no estaba deslactosado.

-Ugh, tendré que hablar con el barista de la cafetería, debió confundir mi bebida con la de alguien más.

Me senté en el WC con un alivio enorme. ¡No entraré en detalles!
Si Armin había estado jugando en su PSP toda la clase, ¿Cómo puede escribir al mismo tiempo en su ordenador? He de decir que la habilidad de ser multitask es algo que a mi no me va nada. Soy demasiado torpe.

-Eso es lo que había estado escondiendo en su mano izquierda por debajo de la mesa... -me dije a mi misma aún en el cubículo del baño-

Me quedé pensando por un momento. Mi curiosidad por el había estado incrementando toda la mañana, pareciera que cada cosa que hacía evocaba en mi una llamita de interés mayor. Por un momento, el resto del año escolar me pareció especialmente emocionante por el simple hecho de tener a los gemelos en este. ¿Qué más les gusta hacer? ¿De dónde vienen? ¿Dónde más han estado?

Al imaginarlo, siento que podemos ser buenos amigos. Se siente como cuando algo en tu estómago se mueve y deja tu corazón palpitando más fuerte, dejándote un poco corto de aire. Como si fuera inevitable sonreír ante el pensamiento.

¡Click!

La puerta del baño se ha abierto, dando paso al sonido de zapatillas golpeando contra la losa del suelo.

-¡Agh! Siempre tiene que pasar algo así.

La voz de Melody resonó con frustración en cada rincón del baño. El grifo se abrió y el sonido de agua corriendo le acompañó.

-Hoy era junta de delegados por inicio de ciclo y era mi oportunidad perfecta, el momento perfecto. ¡Arrgh!

Cada vez la escucho más molesta, ¿Tiene una idea de que estoy aquí? ¿De qué está hablando?

Intenté moverme dentro del cubículo sin hacer ruido para acercarme más y escuchar con más atención. Ya lo sé, cotillear está mal, bla, bla. ¡Nada malo tiene que pasar si nadie sabe que estoy aquí!

-Pero no, toca esperar porque una estúpida tormenta está en camin-

¡Plas!

¡Mierda! Se me ha caído mi caja de mentas en el suelo.

Olvidé que la tenía en el bolsillo de mi pantalón... Melody guardó absoluto silencio, al igual que yo. Escuché cómo tomó papel del dispensador para secarse sus manos y rápidamente salió del baño.

No salí del cubículo hasta haberse cerrado la puerta y haber esperado unos segundos para asegurarme de que no regresara a curiosear.

-¿Tormenta? ¿Se refiere a algo malo?-Me dije mientras lavaba mis manos con ímpetu-

El año escolar de pronto pintó muchísimo más interesante. ¡Primera historia del ciclo! Seguro quiere tener más tiempo con Nath, es bien sabido que ella tiene un interés no correspondido por el. Y como ambos son delegados de clase, sería la oportunidad para ella hacer... lo que sea que quería hacer.
Agh, esa parte habría sido buena saberla.

Me dirigí contenta de regreso al aula de ciencias, con una pequeña sonrisa que no podía contener.

Mi curiosidad un día de estos me va a terminar matando, como a un gato. Ya lo sé.
Pero también me causa interés lo de la tormenta. ¿Fue a una metáfora a algo fatídico? ¿Qué podría ser tan malo como para impedir sus planes?