Una vida diferente.Justin Bieber♥

Esto no me puede estar pasando.

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Llegó nuestro turno y lo pedimos todo, al poco tiempo nos lo entregaron y lo llevamos a la mesa.  Brisa estaba sentada al lado de Fredo y mi madre a una punta de mesa. Yo me senté enfrente de Fredo y Alba a mi lado.

-¿Que tal por Canadá?.-Preguntó Alba a Brisa para empezar una conversación.

-Aburrida sin ti.-Alba rió.-Las clases se me hacen eternas sin tus: "Deja de hablar ya de Justin, Brisa. A no ser que quieras que rompa todos los posters de tu ídolo".

-Brisa, ¡calla!.-Alba se puso un poco roja. Y mi madre, Alfredo y yo nos reimos.

-Quien iba a decir que un año después estarías saliendo con mi ídolo, con lo mal que te caia.-Todos volvimos a reir, menos Alba, aunque tenia ganar de reir, bromeaba poniendose seria.

-¿Tan mal te caia?.-Pregunté riendo.-Es decir, ya sabia que te caia mal, porque cuando nos conocimos, hiciste de todo menos tratarme bien...¿Pero tanto?.-Reí. Quería seguir con el tema, me gustaba ver como se ponia roja. Se veia tan indefensa.

-Sí,  me caias fatal. ¿Para que voy a mentir?

-¿Pero ya no, no?.-Le miré de reojo mientras bebia mi bebida.

-A veces.-Ahora rieron todos menos yo, aunque también lo hacía bromeando.

-De esto hablaremos luego en casa, pequeña.

-Oh no, no lo haremos.-Mi madre rió.

-Hijo, Alba te tiene controlado.-Habló mi madre.-Más vale que le hagas caso. Llevé una mirada de odio a los ojos de Alba, bromeando, claro.

-En verdad tienes razón.-Quité mi cara de odio y me puse a comer una hamburguesa divertidamente. Todos rieron.

Empezamos hablando todos y luego se fueron dividiendo las conversaciones. Fredo hablaba con Brisa y mi madre con Alba y conmigo.

-Creo que deberíamos irnos, tienes que prepararte para el concierto de esta noche.-dijo Alba acariciando mi espalda.

-Sí,  oh dios que emoción. Voy a ir a un concierto de mi ídolo.-Gritó Brisa. Medio bromeando, medio enserio. Alba negó riendo.

-Tú eres la mejor amiga de la chica más perfecta del mundo, así que eres vip. Cuando quieras un concierto,  solo tienes que pedirmelo.-Alba rió.

-Vamonos anda.-Nos levantamos y salimos. Nos sentamos en el coche de la misma manera que antes.

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NARRA ALBA.

Brisa y Fredo estaban sentados en el sofá del camerino viendo una peli mientras que yo ayudaba a Justin a ponerse bien el micrófono.

-Ay! Me has pellizcado.-Gritó como una niña.

-Eres un quejica.-Reí. Como estabamos enfrente el uno del otro, puso su mano en mi trasero y me pellizcó.-Ay!-Di un salto.-Eso no vale, yo te lo he hecho sin querer.

-Ahh, eres una quejica.-Se rió de mi con las mismas palabras que yo habia usado para reirme de él. Solté el micrófono haciendo que quedara colgando de su oreja.

-Ale, por reirte de mi te vas a poner tu solo el micrófono.-Me crucé de brazos. Justin puso morritos y yo intenté aguantarme la risa.

-No, vaaa.-Dijo insistiendo como un niño pequeño mientras me cogia de la cintura para acercarme a él.-Perdoname.-Seguia poniendo morritos.

-Me lo pensaré,  te lo digo después del concierto.-Me divertía haciendome la dura.

-No, sabes que no puedo cantar cómodo cuando estas enfadada conmigo.-Tenia cogida con sus dos brazos mi cintura.