Eres mio, imbecil.

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Narrador omnisciente

Todo fue tan rápido que ninguno de los dos midió sus acciones. Todo fue hermoso y perfecto, pero al separarse Ashton no se sintió como antes, no se sintió cómodo consigo mismo ni con la situación. Miro a Bárbara y dudo si esto era lo que quería.

Retrocedió dos pasos y fruncio su ceño, esto no es lo que el quiere.

Bárbara lo miro sin comprender, Ashton al dar pasos hacía atrás se separó del agarre de Bárbara. Y se dio cuenta de que se estaba marchando.

Un nudo en el pecho de ambos se hizo presente. Esto si es lo que ella quiere, pero el ya no.

-Lo siento y-yo...- Ashton hablo primero.

Pegó media vuelta y comenzó a irse bajo la lluvia abandonando a una confundida y triste Bárbara. Las gotas caían sobre su rostro, arrastrando las lágrimas que salían de sus ojos.

Así que tomó una decisión tonta e inútil.

Corrió tras el.

-¿Te vas?- dijo mirándolo a los ojos, su rostro estaba mojado igual que el de ella, el no estaba llorando pero por dentro era pura oscuridad. Bárbara ya no era la luz que iluminaba su mundo.

-No se porque hice eso, lo siento de verdad- la miro a los ojos y vio que estaban tristes. Tuvo la necesidad de abrazarla, de pasar la yema de su dedo por si mejilla mojada y retirar la pestaña que tenía demás.

-Ashton, ¿Que dices?.

Ella necesitaba obtener respuestas, ¿Que es lo que esta pasando?. ¿ Porque la beso y luego huyó?.

-Tan sólo déjame sólo ¿Si?- cerró los ojos y trato de medir sus palabras- tu no quieres esto, no nos engañemos más Bárbara, ambos sabemos que si yo no daba ese pasó no lo harías nunca.

-¡Pero lo diste!. Eso es lo importante.

-No, no lo entiendes. Yo no quiero esto- dijo por fín, y no se sintió bien. Al contrario, decir esas palabras fue cómo una patada en las bolas.

Bárbara cerró sus ojos tras oír eso, no entendía nada de lo que estaba pasando. No entendía a Ashton en estos momentos, capaz se confundió, capaz no es la persona que conocía. Tratando de encontrar una solución, sumida en sus pensamientos, no se dio cuenta que Ashton se estaba marchando. Dejándola sola y para siempre.

El, camino sin rumbo alguno, pensó que se iba a sentir mal, pero no. No se siente mal por lo sucedido anteriormente, al contrario.

Tomó la perilla para entrar a su casa pero la realidad lo golpeó. Thomas. Su mejor amigo lo necesitaba... Y fue ahí cuando la realidad de verdad lo golpeo. Pero lo golpeó fuerte y duro.

A Bárbara también se le habían muerto los padres, cerró los ojos tratando de calmarse.

-No la acabó de dejar, no la acabó de dejar así. Por favor que todo sea un sueño.

Abrió los ojos y se dio cuenta que, a pesar que lo desee con tanto entusiasmo, ya era tarde.

Lo que Ashton no sabía es que de esa tan dichosa muerte, Bárbara no se había enterado.

* * *

Anochecio, y la lluvia había parado, tocó tres veces la puerta de la casa esperando respuesta alguna. Después de unos largos segundos Thomas abrió la puerta.

Estaba desarreglado, se le asomaba una barba de tres días y se lo veía nervioso. Sus ojos iban de un lado para el otro.

-¿Ashton?- dijo con dolor en sus palabras. Entonces, decayó.

Ashton lo abrazo, lo extrañaba tanto que la mayoría de las veces se cuestionaba si hizo bien en mudarse sólo. Abandonando a las personas que amaba.

Cabe la posibilidad de que si el, no se hubiera mudado, esto no hubiera sucedido. Es más, capaz sus padres no se iban de viaje... Son ideas tontas que pasan por la mente de Ashton. Atormentandolo.

-Todo esto es mi culpa hermano- lo abrazo más fuerte.

-No lo es y lo sabes- Thomas se separó del abrazo y entró a la casa junto a Ashton.

Miro el lugar con determinación, estaba sucio, varias botellas de cerveza estaban esparcidas por el suelo. La cocina rebalsaba de platos sucios.

Le pareció raro, ya que Bárbara no permitiría todo esto.

-¿Estas viviendo solo?- pregunto, la intriga de saber donde estaba Bárbara lo ponía ansioso.

-Si, mis padre se han ido ¿sabes? Y Bárbara también, es decir ella esta viva pero sé fue unos días a otra casa.

-¿Que casa?.

-No lo se- rio.

-¿Thomas? ¿Éstas borracho?- camino entre la basura y sé acercó a su amigo, no se dio cuenta hasta ahora que emanaba olor a alcohol y cigarrillos. Había vuelto a fumar.

Ambos se dieron vuelta cuando la puerta principal fue abierta y ahí estaba ella, llena de miedo y remordimiento. Tratando de seguir adelante día tras día.

Thomas, en el Estado que estaba no sé esperaba semejante visita.

-¿¡Que haces acá!?- le gritó violentamente.

-E-es mi casa- levantó la vista y lo vio. Vio al chico que le acaba de romper el corazón, parado, en su casa. Su propia casa.

Las llaves se le resvalaron de la mano, estaba nerviosa.

-¡Ni unas llaves podes agarrar!- grito Thomas- ¡Haces todo mal, por tu culpa mama y Papa se fueron al cielo!- mientras hablaba, escupia toda la sala. Al estar borracho no podía retener la saliva.

-¿Que?- pregunto Bárbara sin voz.

-Hermano es tiempo de que pares.

-¡Que se murieron imbécil!, por tu culpa- se acercó rápidamente a ella y la tomó del brazo- te voy a matar, a veces me pregunto ¿para que naciste?.

Bárbara soltó un sollozo involuntario. La situación la superó. No lo resistió más y lloro. Lloro como deseo hacerlo antes.

-¡Thomas- grito Ashton.

-¿Que te pasa?- ella trató de liberarse pero Thomas apretó más, eso va a dejar marca.

-¡Es tu culpa!.

Ashton se acercó a Thomas y lo empujó para atrás. Bárbara aprovechó el arrebató y salió por la puerta principal. Ya no aguanta más.

-¡hey!- salió de la casa Ashton a buscar la.

-¡Sólo déjame!, ya entendí que no me necesitan, ni tu ni el- se dio vuelta para encararlo- ya entendí que nadie me necesita. Que estoy demás. Entendí que mientras más amo más pierdo, acabó de perder a mis padre. O no, tan sólo acabó de entarme recién por mi hermano ¡Que estaba borracho y me lo grito y echó en cara diciéndome que era mi culpa!. ¿Que más quieres?- sollozo.

-Sólo quería ver si estabas bien.

-Oh pudrete. Si no te importa como me encuentro.

-¿Que no me importa?, Bárbara eras lo que más amaba en este planeta. Eras lo único que tenía, cuando estabas mal, yo estaba mal. No podía verte llorar, tampoco podía seguir como si nada cuando sabía que no me amabas. Verte era recordarme mi fracaso. Porque nunca sentiste lo que sentí por vos, nunca lo vas a sentir. No me vengas con que no me importa cómo estés porque te ame. Te ame con todo lo que una persona puede amar.

-Yo no te ame Ashton.

-Ya lo se.

-Yo no te ame porque te sigo Amando. Y decir ame es pasado y créeme que siempre te seguiré Amando.