"Encontré mi pasión por la fotografía de nuevo, la cual pensé había perdido."
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Estar en un bar pasado de tragos y sin ninguna compañía al mismo tiempo no era nada bueno, la peor combinación que un ser humano se puede buscar, no sabrás lo que puede pasar en estas situaciones pero lo necesitaba, así es como me liberaba de todos los sufrimientos que mi corazón conllevaba cada día para poder seguir, usualmente bebía adecuado pero hoy me había pasado de tragos por qué el dolor era muy fuerte que no lo soportaba, quería olvidarme de todo hasta quedar en blanco.
Pasaba por la multitud pero de un momento a otro escucho mi nombre y lo primero que vi fue el reflejo de Taehyung de la esquina del bar llamándome para luego desaparecer y desesperarme. Me acerco a la barra a recostar mi cabeza en ella, y poder descansar ahí para poder ver a la nada.
— Señorita, ¿Se encuentra bien? — Un empleado del bar se encontraba del otro lado de la barra sirviendo las bebidas, se acercó a mí con preocupación tras ver cómo me encontraba en este lugar.
— Déjame romperte el corazón y vamos a ver si vas a estar bien. — Le sonreí de mala gana, el chico solo me miró sin entender. — Quisiera volver al pasado y retroceder el tiempo para nunca volver. — Solté de repente, el chico que aún no sabía su nombre me sonrió e inmediatamente salió de la barra desesperado para estar a mi lado, pero yo me aleje de él por su repentina actitud y decidí salir de esa zona antes que sucediera algo.
Las escaleras de la azotea era la primera ruta que decidí ir, quería respirar aire puro, las luces de la ciudad de Seúl estaban iluminadas parecía de película por lo brillante que se ve todo, era hermoso la vista y hoy sería mi último día de verlas. Las lágrimas no paraban de salir no podía evitarlo, Me acercaba más al final del camino, nadie me entendía solo insinúan en que esto se me pasaría en meses pero ellos no están en mis pies para poder asimilarlo.
Que hermosa despedida, ¿no es así? Dejar atrás el momento más brillante, que aún está por venir, ese momento todavía no te ha encontrado.
— No. — Murmuré, termina con todo pensé.
Lo iba hacer, pero una mano en mi cintura me detuvo, alguien se encontraba detrás de mí sosteniendo mi caída, pataleo con todo mi ser para que me soltara pero lo único que obtengo es volver al lugar más seguro de la azotea.
— ¿Acaso lo extrañas tanto? — Dice ajetreado por aquel suceso, asentí.— Te llevaré de vuelta a cuando conociste a la persona que más extrañas.
— ¿Por qué estamos aquí? — Pregunté, los tragos que me había dado ya no hacían efectos, me encontraba nueva pero con dolor.
— Quieres volver al pasado y eso harás. — El chico se acercó a la puerta en donde yo misma vine para este lugar y comenzó a darle a botones que aparecen.
— Estás loco. — Le hice saber por ver lo que estaba pasando ahora mismo y de las barbaridades que estaba diciendo.
— ¿En serio? — Él sonrió para darle al último botón y la puerta se abrió, oh dios que era lo que mis ojos ven. Esta situación parece tan irreal que si se lo pudiera contar a alguien me lo negarían, el chico entró y supuse que tenía que entrar por igual.
Se cerraron las puertas cuando entramos los dos, él sacó un celular electrónico. —¿Qué quieres cambiar del pasado? — Comenzó a escribir sin mirarme.
— Quiero que mi novio siga vivo. — Murmuré, Él me miró y se mordió el labio para después suspirar. — Él murió por mi culpa.
— Para que él vuelva, tendrás que hacer que te olvide. — Lo mire desconcentrada — Murió por tu culpa, así que tendrás que deshacer todos los recuerdos que tuvieron juntos.
— Está bien, si esta es la única manera de verlo de vuelta, lo haré no puedo perder esta oportunidad. — Él asintió para después pasarme el celular que antes estaba utilizando, en ese momento que me lo pasa se reproduce un video y lo miro desconcertada. No entendía de que era hasta que lo vi a él, fue el día de nuestro primer encuentro.
— Te llevaré hacia ese lugar, tendrás que hacer que el tú del pasado no se encuentre con Taehyung. — Asentí, es fácil de hacer pensé. — Además no te podrás quedar el tiempo que quieras, habrá un límite, si lo sobrepasas puedes morir y lo último que debes saber es que sonará una alarma cuando el tú del pasado se esté acercando al chico.
— Bien. — Murmuré, ya quería volver a verlo.
— Eso es todo. — Dijo, la cabina en donde nos encontrábamos se comenzó a mover y me preocupé, ¿Qué estaba pasando? Un reflejo blanco pasó por mis ojos para dejarme ciega por unos segundos.
— Ve. — Escuché la voz del chico, abrí mis ojos y estaba en una Galería de Artes, lo recuerdo todo. Estoy en el lugar de nuestro primer encuentro, ese día mi facultad daba un paseo para conocer el arte moderno. De pronto recordé lo que tenía que hacer, me duele hacerlo pero es por nuestro bien.
Comencé a caminar hacia el balcón en donde me dejaba mirar toda la aérea y miré hacia el primer piso para encontrar la Lee Seul Bi del pasado, hasta que me vi con mis compañeros del colegio. Vi hacia el lado derecho del primer piso, ahí lo pude observar, quería comenzar a llorar y salir corriendo a abrazarlo y gritarle que me perdonará, muchas emociones se mezclaron pero no podía. Una alarma comenzó a sonar en mi pantalón, supuse que sería la alarma del acercamiento entre mi pasado y Taehyung, no lo podía permitir.
Sólo quédate conmigo más tiempo, hasta el final de los tiempos.
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