Capítulo 22

9 2 0
                                    

—esa no sería una buena idea. —ella no le respondió en cambio deshizo los lazos de su vestido, el camisón que había llevado no se lo había vuelto a poner así que cuando el vestido cayó al suelo quedo totalmente expuesta ante él.

Adam avanzo hasta quedar frente a ella, su respiración era agitada. La sangre rugía en sus oídos y el corazón le iba a mil.

—eres hermosa, —enmarco el rostro de ella en su manos y la beso tiernamente —puedo soltar tu cabello. —ella trago y se dio la vuelta —tan hermosa —gimió él y cuando termino de soltarle el cabello... —eres tan hermosa, mi pequeña flor.

Jazmín volvió a girar, esta vez en sus brazos y se fundieron en un apasionado beso.

—sabes que seré feliz si solo nos besamos esta noche ¿verdad?

—¿solo quieres besarme? —pregunto ella confundida —¿Por qué ríes?

Si ella supiera lo que pasaba por su cabeza en estos momentos.

—no mi hermosa flor, no me bastaría solo con besarte —Adam se esforzó mucho en mantener la compostura, pero tenerla entre sus brazos era demasiado —será mejor que salga.

—no lo hagas —ella tiro de su ropa tratando, torpemente, de sacársela —no me dejes, te amo.

Cuando las palabras abandonaron sus labios, Jazmín quiso volverlas a guardar en su mente y sobre todo en su corazón.

—¿Qué dijiste?

—yo... lo siento... no sé...

—no lo sientas, solo quiero oírlo otra vez —le pidió.

—te amo, —lo complació —te amo tanto Adam, ¿tú me amas?

—sé que no te lo he dicho, pero lo hago.

—dímelo, quiero oírlo.

—te amo, te amo, te amo.

Se aparto lo suficiente para quitarse la camisa y deshacerse de las botas.

—¿estás segura de esto?

—completamente.

Y no hubo marcha atrás.

Pide un deseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora