Luz (Faberry)

Capítulo 11: Un mundo mejor

Capítulo 11: Un mundo mejor

Tras quince días de no ver a Quinn estaba en mi oficina organizando una montaña de papeles ¿Quién dijo que no dolía alejarme de ella? Bueno dolía y mucho.

Jason me había comentado que todo iba bien, toda la familia asistía a terapia cada semana y aunque Quinn aún era muy tímida con las personas que visitaban su casa ya fueran familiares o amigos de a poco iba mostrándose más abierta.

Damon y yo continuábamos con nuestro trabajo en el caso y más de una vez pensé que nuestra relación interferiría pero al contrario ambos nos sentíamos más libres, más capaces de enfrentar lo que se nos venía encima, eramos amigos, éramos profesionales y debíamos sacar adelante la investigación.

-Hombre tranquilo, callado no tenía muchos amigos conoció al padre de Quinn varios años atrás. Las personas más cercas a él son Doug un jardinero retirado que apenas saber leer y escribir, Marta quien era mesera en un bar que solía frecuentar y no encontré a nadie más que me da buenas referencias - me decía Damon, nos encontrábamos en la oficina conversando sobre los últimos detalles con los que contábamos.

-¿Y qué dicen estas personas?

-Hombre callado, pero no que parecía peligroso

-Punto a nuestro favor

-Exacto, tiene antecedentes de violencia pero nada grave nunca llamaron a la policía y todo quedo en un mal entendido al calor de los tragos

-¿Alcohólico?

-No, solía ir una vez al mes nada más

-¿Novias?

-Ninguna la única fue su esposa o al menos eso es lo que me dijo Doug

-Un solitario

-Así es, mañana podremos ir con él y entrevistarnos

-Iré - dije muy confiada, claro que quería tenerlo frente a frente.

-Claro que no Rachel

-Damon, es mi jodido caso no dejare que me lo quites - estaba alterada, no iba a permitir que me alejaran de mi caso.

-No te lo estoy quitando pero nunca me escuchas nunca dejaría que estuvieras a solas con ese pervertido, no lo permitiré, hable con David y me dijo que es mejor que vaya yo.

-Dios esto es tan injusto.

-Es lo mejor, sabes que lo haré hablar, puedes confiar en mí

-Mierda es un maldito, cuando lo tenga frente a mí en el estrado lo hundiré Damon.

-Ya Rach en unos días esto se terminara.

Me enojaba que no podría hablar con él, pero llegaría el juicio y me finalmente nos enfrentaríamos, cuando cumplí 18 años comprendí que el final que tuvo mi secuestrador había sido demasiado bueno, el maldito tan solo se suicidó cuando se vio acorralado, tomó un arma y se voló los sesos, esa era la realidad y me enojaba, si yo hubiera tenido el poder de ponerle su sentencia hubiera hecho que pasar lo que le quedaba de vida en el mismo sótano en el que me tenía.

Cuando estaba a punto de salir de mi oficina completamente furiosa mi peor pesadilla estaba frente a mí

-Oh - sonrió y me dieron ganas de vomitar - la gran Rachel Berry justo con quien quería hablar.

-Rach hablemos de esto - decía Damon, pero al verlo se detuvo en frente de el - ¿Qué mierda haces aquí?

-Damon esa no es la forma de tratar a un invitado - dijo el cínico con una sonrisa en su rostro.