-¿Y...hace cuanto tiempo que salen?-les pregunté cuando el semáforo estaba en rojo.
-Dos, tres...-dijo Alice e hizo una pausa.
-¿Dias?
-Dos, tres...-dijo Derek nervioso.
-¿Semanas?-pregunté y aceleré al ver que el semáforo cambiaba a verde.
-Dos, tres...-Alice ya temblaba.
-¡¿MESES?!-grité y comenzaron a reir disimuladamente.
-No, años-dijo Derek y giré rápidamente el volante para estacionar. Giré mi cabeza como la de la película "El exorcista" y miré impactada a Derek, que iba sentado en el asiento de atrás.
-¡¿QUÉ MIERDA?!-miré a Alice y luego a Derek y así repetidas veces pero ellos solo reían.
-Mentira, solo dos o tres meses-Alice estaba roja como un tomate de tanto reírse de mi reacción.
-¡¿Solo dos o tres meses?! ¡Es mucho tiempo, podían haberme contado!-los miré enojada.
-Es que no sabíamos como ibas a reaccionar, pero ahora ya sabemos...-dijo Derek divertido.
-Si me decían antes no estaría enojada-encendí el auto y aceleré.
-Queríamos que sea sorpresa, perdónanos-Alice hizo puchero pero no son mi debilidad.
-Perdónanos, mi niña prodiga-Derek imitó la acción de Alice. Está bien un puchero no es mi debilidad, pero dos...
-Está bien-dije y festejaron-pero no me oculten nada mas, ¿me lo prometen?
-Prometido-dijeron al unísono mientras sonreían ampliamente.
[...]
Estacioné enfrente de la casa de Fred. Ibamos a ir al centro comercial y mi madre también quería ir así que la pasé a buscar a la casa de mi hermano.
Ví que la puerta se abrió dejando ver a mi madre y a Amanda. La menor me saludó y le correspondí el saludo. Mi madre subió al auto.
-Hola, ma-dije con una sonrisa.
-Hola, mi amor. Hola, chicos-sonrió mientras se acomodaba en el asiento de atrás. El auto ya estaba encendido así que aceleré para dirigirme al centro comercial.
-Hola, Anne- lo chicos sonrieron.
[...]
-Quiero hacer pis-dijo Derek-¿en dónde están los baños?
-Te dije que no comieras tantos limones-reí-Están por aquel pasillo a la derecha.
-No comí en todo el viaje, necesitaba hacerlo. Gracias-sonrió y se dirigió hacia los baños.
-Yo también debo ir-dijo Alice-no salgan de la tienda, el centro comercial es muy grande, no quiero perderme.
-Tranquila, cariño. Nos quedaremos aquí-mi madre sonrió y Alice corrió hacia los baños.
Mi madre me miró sonriente, me abrazó y le correspondí el abrazo.
-Te he extrañado tanto, pequeña.
-Yo también...mucho-nos separamos y la miré asustada-No me digas que comenzarás a llorar como papá...
Mi madre rió y negó con la cabeza.
-No soy TAN sensible-las dos reímos.
Mi madre me miró a los ojos y una lágrima se deslizó por su mejilla.
-Lo sabía...
-Lo siento, lo siento-dijo secándose con su dedo pulgar varias lágrimas.
Reímos y seguimos observando lo que había en la tienda.
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La Música puede unir Corazones
Teen FictionBella es una chica amante de la música que puede tocar con facilidad muchos instrumentos y que posee una hermosa voz. Vive en España con su madre pero decide viajar a Hollywood, donde vive su padre. Allí irá a un instituto de música en donde conocer...