|26|

2.7K 282 144
                                    

|Rubén|

"Sólo me voy a duchar y cambiar. No tardare mucho tiempo. "Miguel habló antes de besar la parte
superior de mi cabeza.

Me había quedado a verlo entrenar hasta que la sesión terminó. La sala estaba casi vacía mientras el equipamiento estaba siendo guardado.

Miguel, obviamente, disfrutaba de su trabajo. Pero tenía la sensación de que deseaba estar en el ring, en lugar de solo ver desde afuera. Pero no me sorprende que no le permitieran pelear. Sólo la idea de cómo su oponente se vería al final del combate me puso la piel de gallina.

Miré como se alejaba por un segundo. Pero me sorprendió que rápidamente se girara de nuevo.

El cuerpo de Miguel me puso contra la pared. Sus grandes ojos negros brillaban mientras sus grandes manos me sujetaban la cintura. Aliento caliente soplando sobre mí, sus cabellos oscuros cosquilleando mi mejilla mientras sus labios se movían a mi oído.

"Eso, si no quieres venir a ayudarme." Susurró seductoramente.

Su voz ronca envió escalofríos por todo mi cuerpo. Luché para calmarme. Miguel siempre me ponía un poco nervioso. Me reí cuando su nariz rozó mi cuello, mis manos empujándolo.

"Está bien, está bien. Espérame, amor. "Miguel se rió.

|Miguel|

Arrastré mi bolso sobre mi hombro, comprobando que tenía todo antes de salir de los vestuarios. Rubén estaba justo donde lo dejé, pero ahora Tom estaba sentado a su lado. No se dieron cuenta que yo estaba apoyado en el marco de la puerta oscura. Estaban hablando, Tom bebiendo agua de su botella. Vi como Rubén se llevó la mano a la boca, tratando de reprimir una risita por algo que Tom había dicho. Mi mandíbula se tensó ante su interacción.

No me gustó. Rubén era mío.

El le sonrió tímidamente a Tom, sus mejillas sonrojándose ligeramente. Mi bolsa cayó haciendo ruido en el suelo, ambos bruscamente girando la cabeza hacia mí. Pero me di cuenta de que ninguno de ellos hizo un esfuerzo para alejarse uno del otro. Me acerqué a donde estaban sentados. Rubén me sonrió. Pero mi atención se dirigió a Tom.

"Estás bien, amigo?"

Le asentí firmemente.

"Rubén, vamos." Le dije.

El no discutió, levantando la correa de su mochila sobre su hombro. Tom rápidamente se puso de pie al lado mío. Cuando su mano se acercó para ayudarlo a levantarse no podía dejar de apretar los puños. Desesperadamente trate de mantener la calma por el bien de Rubén.

"Lo tengo." Hablé con severidad.

Tom frunció el ceño en confusión, pero retiró la mano de todos modos.

"Miguel?", Cuestionó Rubén.

Agarré su mano en la mía, jalándolo hacia mi lado. El apenas tuvo tiempo suficiente para despedirse de Tom antes de que yo lo guiara hasta la puerta, rápidamente recogiendo mi maleta y marchándonos. Caminamos a paso rápido por la pista a mi coche. La noche se acercaba rápidamente, las luces de la calle empezando a parpadear.

"Miguel ¿qué pasa?"

Sentí a Rubén tironear mi mano, tratando de conseguir que me detuviera. Mi pesada bolsa de lona se deslizó desde mi hombro hasta el suelo. El dejó escapar un suspiro de sorpresa cuando agarré su Cintura, levantándolo sobre el capó de mi coche.

Las piernas de Rubén colgaban del borde, mi cuerpo se movía entre sus muslos. Le saqué su mochila, colocándola encima de donde yacía el mío. Le agarré la muñeca, llevándola a mi boca. Mis labios apretando besos húmedos en la parte inferior suave. Su respiración se volvió un poco más nítida con mi toque. Mi mirada endureciéndose en el.

dark ↮rubelangel™Where stories live. Discover now