POLOS OPUESTOS-Jesús Oviedo {ACABADA} EN EDICIÓN

CAPÍTULO 18

JESÚS

Dos semanas, dos semanas que han sido sin duda las mejores de mi vida.

Como pude no darme cuenta tan rápido que estar enamorado es lo mejor que le puede pasar a alguien?

Se que tengo un pasado oscuro. Miles de recuerdos que me persiguen y crean pesadillas en mis noches más oscuras.

Pero cuando estoy con mi muñeca todo pasa a segundo plano, nada se compara con estar con ella.

Es como si por un instante mi pasado no estuviera. Y solo existiéramos ella y yo.

Pero tengo miedo, miedo de perderla. Por que seamos realistas, mi vida es una mierda, estoy rodeado de mierdas y en cuestión de días tendré una pelea ilegal y ella aún no lo sabe.

No se como decírselo. Tengo tanto miedo.

Nunca me había importado lo que los demás pensasen sobre mi. Pero ahora todo es diferente.

Y si ella prefiere alejarse de mi? Y si se da cuenta de que yo simplemente le doy problemas?

Se que cualquiera de esas preguntas puede suceder. Solo espero que no pase. De verdad lo espero.

Giro mi rostro hacia la derecha encontrándome con la cara más bonita que nunca antes he visto.

Mi muñeca está sobre mi cama con su delicado cuerpo cubierto por unos shorts y una camiseta de tirantes que dejan poco a la imaginación.

Y puedo estar muy enamorado pero sigo siendo hombre. Y un hombre cuya vida sexual es muy animada.

No me juzguéis. Me gusta el sexo. Me gusta la sensación.

Además ella es mi chica y puedo mirar lo que quiera pero pobre de algún gilipollas que se atreva a mirarla por que le pienso sacar los ojos.

Es mía. Mía y solo mía. No bromeo cuando digo que le arrancaré los ojos al que mire lo que no debe mirar.

Vuelvo a centrar mi atención en ella. Su pelo esta desparramado por mi almohada, mientras que su rostro está relajado dejando su boca semi abierta provocando que sus labios a un se vean mucho más apetecibles.

Y mira que para mi ella ya es una tentación. Pero en este mismo momento es irresistible.

Paso mis manos por su cabello lentamente , rozando su frente con mis dedos.

Deslizo mi dedo índice por el puente de su nariz hasta llegar a sus labios que delineo con suavidad.

Se remueve bajo mi tacto hasta que poco a poco va abriendo los ojos dejándome ver esa hermosa mirada que me tiene bajo control.

Y: buenos días muñeca

Me acerco a besar sus labios pero antes de que pueda hacerlo su mano se interpone entre nuestros cuerpos.

No puedo evitar fruncir el entrecejo. Solo quiero darle un beso de buenos días en esa bonita y sexy boca. Nada más.

Es que he echo algo mal? Que ha pasado?

Y: pasa algo muñeca?

Me mira como si lo que estuviera preguntando fuese un pecado y aún entiendo menos la situación.

M: pasa que mi aliento mañanero es horrible y no quiero que me dejes por ello

La sonrisa de tonto que sale en mi rostro podría partir mi cara en dos.

Aparto su mano de mi cara y me acerco hasta estar a penas unos milímetros de ella.

Y: no seas tonta nena, me pones y me gustas de cualquier forma

Dejo mis labios caer sobre los suyos y a decir verdad su aliento es perfecto, si se que suena asqueroso pero es que ella me gusta de todas las formas posibles.

Y no, su aliento no sabe a flores pero sabe a ella. Y para mi es más que suficiente.

Y: te quiero

Su mirada se endulza en cuanto digo esas palabras.

Siempre pasa eso, un te quiero, para ella es una razón para sonreír y si ella sonríe , automáticamente yo lo hago también.

M: yo te quiero más

Vuelvo a sonreír pero enseguida mi sonrisa se va al recordar la pelea. Necesito decírselo, necesito que lo sepa, necesito que vaya a verme. Ella me da la fuerza que necesito.

Y: nena tengo que decirte algo

Me levanto de la cama y camino de un lado al otro nervioso, inquieto. No se como decírselo. Estoy sin palabras.

M: me estás asustando Jesús

Su semblante me deja ver que lo que dice es real.

Pero espera, no estará pensando que voy a dejarla verdad?

Sus ojos se llenan de lágrimas y en ese momento siento mi corazón morir.

No, no, no. No muñeca no pienses eso.

Me acerco a grande zancadas a ella y la estrecho contra mi pecho, rodeándola con mis fuertes brazos.

Y: no muñeca ,no es nada de lo que esa cabeza tuya esta pensando. Ni creas que te librarás tan fácilmente de mi.

Una risita llega a mis oídos y me hace saber que la tensión ha disminuido.

Es mi momento de decírselo. Tengo que hacerlo. No puedo aguantar más.

Y: yo...yo... Se que esto no te gusta pero...Este sábado tengo una pelea... Una ilegal...

Ella enseguida se aleja de mis brazos y siento un vacío en ellos.

Como siempre que ella se aleja de mi cuerpo, siento que algo me falta. Que me falta su calor.

M: es una broma no?

Bajo mi cabeza hacia el suelo. Me siento tímido y eso nunca me pasa.

Por dios soy conocido como La Furia. A mí nadie me intimidaba. Pero como he dicho intimidaba, en pasado. Ahora hay alguien que si me intimida. Mi muñeca.

Y: lo siento...yo...yo necesito pelear... Lo necesito... Dejo toda mi rabia en el ring y de verdad que lo necesito.

Ella me mira a los ojos. Se que está pensando en decirme algo.

M: te quiero, y si eso es lo que quieres te apoyaré, pero por favor ten cuidado si? Si te pasa algo me muero

Mi corazón a vuelto a latir. Mi corazón vuelve a ir al ritmo que debe.

Por fin puedo respirar tranquilo. De verdad que había estado asustado.

Se puede tener una novia mejor? Se puede ser más bonita? Más dulce? Más buena? Más perfecta?

No, ya os digo yo que no.

Enseguida me tiro sobre ella haciendo que vuelva a estar tumbada en la cama y yo sobre su cuerpo.

Y: te quiero, te quiero, te quiero

Entre palabras dejo un beso en sus labios haciendo que no pueda parar de reír. Y ese momento me da vida.

Y creerme es el mejor sonido que he oído nunca. Su risa.

Y aunque me cuesta admitirlo siempre será mi debilidad.

Mi pequeño punto débil. Espero que nadie nunca lo sepa.

Que coño? Me importa una verdadera mierda. Quiero que todos sepan que ella es mía y que si la tocan por qué es mi jodido punto débil, voy a estampar mi puño en su cara.

Si. Así que si. Espero que todos lo sepan.