Capítulo 11: Pequeño desliz

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Me detuve delante de la puerta del cuarto de mi hermana. Sabía lo que quería decirle pero no sabía cómo. Llamé con los nudillos antes de entrar.

- Hola...

No estaba muy convencida de esto pero ahora ya no tenía vuelta atrás.

- Hola. ¿Qué quieres?

- Emmm... sí.

-¿sí qué? Katia... desembucha -dijo Celia con una mirada incriminatoria.

- Necesito tu ayuda.- No tenía ni idea de cómo explicarle nada.

- ¿en qué?

- Emmm... pues...este Sábado hay una fiesta y no sé cómo hacer para...

- Espera. ¿tu? ¿en una fiesta? ¿con quién te estas juntando katia?

- Déjame terminar, por favor. Bueno, el caso es que mamá no me dejará ir a esa fiesta porque el otro día ya la lie y no me va a dejar salir más en un tiempo y Emma, Ana y las demás se han enfadado conmigo. Es muy necesario que vaya a esa fiesta Celia. Por favor, necesito tu ayuda.

- Vale, espera. ¿Cómo que la liaste? y ¿por qué tus amigas están enfadadas contigo? y ¿por qué es tan necesario que vayas a esa fiesta? - dijo dejando el ordenador a un lado y mirándome como intentando descifrar algún código.

- Joder Celia...¿vas a ayudarme o no?- me estaba enfadando, no le podía decir que el otro día mentí a mi familia y a mis amigas para irme con unos casi desconocidos a un lugar que en teoría era un secreto. Y tampoco le podía decir que quería ir a esa fiesta porque estaba un poquito obsesionada con mi nueva amiga. porque sí, me estaba obsesionando con Taylor.


- ¡Joder katia! es que si no me cuentas nada ¿Cómo quieres que te ayude? - Ahora era ella la que  alzaba la voz y gesticulaba ferozmente.


- Está bien. ¿Sabes de Taylor no? ¿la nueva de mi clase?


- Claro- puso los ojos en blanco.- Todo el colegio la conoce.. ¿por qué?


- Bueno, pues ella y yo hemos estado hablando y nos hemos hecho amigas...


- Katia, cuidado con esa tía. no me gusta - su mirada pasó de la de incomprensión a la de preocupación en un momento. Odiaba que mi hermana pareciera mayor que yo, se suponía que yo era la hermana responsable.


- Tranquila, sé cuidar de mí misma. La cosa es que me ha invitado a esa fiesta y...


- Vale, lo entiendo pero...¿Qué quieres exactamente que haga yo?


- ¡No lo sé! ayúdame a que me dejen ir a esa fiesta.- Lo sabía, sabía que era una mala idea hablar con Celia.


- No sé Katia... podría hablar con mamá pero...


- No. Eso no funcionaría.- Dije ya llegando a la desesperación. Ya me veía el Sábado por la noche encerrada en mi habitación escuchando música y dándome lástima.

- Tengo una idea.

Celia me miraba fijamente desde su cama con los ojos muy abiertos , me asusté por un segundo pero me asusté más aún cuando mi hermana llamó a mis padres a gritos. ¿Qué diablos iba a hacer? ¿por qué no me lo había contado antes? A veces no entendía lo que pasaba por la mente de esa criatura que tenía por hermana.

- Papá, Mamá- dijo seriamente cuando nuestros padres se presentaron delante de nosotras.- Tengo que pediros un favor muy muy grande- dijo poniendo una voz dulce. Odiaba que hiciera eso, sobre todo cuando manipulaba a mamá para que hiciera algo, pero esta vez era diferente, Celia me estaba ayudando.

- ¿Qué quieres hija?- mi padre tenía una voz grave pero suave y eso me tranquilizaba.

- Este Sábado dan una película que Katia y yo queremos ver desde que dijeron que la iban a hacer...Hemos pensado en ir a ver esa película con unas amigas mías y quedarnos a dormir en su casa para que vosotros no tengáis que preocuparos en venir a buscarnos.

- ¿Pero esas amigas tuyas también son de Katia?- ¿Por qué mi madre era tan horrenda?  siempre conseguía que me sintiera mal por cualquier cosa.

- Tranquila mamá, yo ya he hablado con ella. Ni a sus padres ni a ella les importa.

- De acuerdo. ¿Dónde viven? ¿A qué hora os paso a recoger por la mañana?

 Joder.

- No te preocupes mamá, no vive muy lejos de aquí, además el domingo vamos a estar todo el día en su casa y por la tarde vendremos andando. Así vosotros podéis estar tranquilos y tener la casa para vosotros solos.- Mis padres se miraron mutuamente y no pudieron reprimir una sonrisa picarona.

No sé cómo se lo montaba Celia que siempre daba en el clavo y decía las palabras exactas en cada momento para manipular esas cabezotas. Me gustaría poder hacerlo yo también.

- De acuerdo chicas, podéis ir. Pero tened los teléfonos encendidos por si os llamamos.

-¡Gracias mamá!- dijimos a la vez Celia y yo y le dimos sendos abrazos a nuestros padres.

Papá y mamá salieron de la habitación y nos quedamos las dos unos segundos en silencio pensando y asimilando lo que acababa de ocurrir hasta que al final le pregunté.

- ¿Y tu que vas a hacer?

- ¿Yo? Voy a ir al cine con unas amigas y me voy a quedar a dormir en casa de Valentina y el Domingo voy a quedar con Oliver para pasar todo el día juntos.

- ¿Oliver? ¿Es ese de los tatuajes que tiene un grupo de metal-core? ¿No tiene la misma edad que yo?-Con cada pregunta que formulaba estaba más convencida de que, efectivamente, era ese Oliver y no otro.

- Sí, nos estamos conociendo. ¿A qué es mono?- su tono de voz cambió radicalmente y eso me llegó a pensar en si yo hablaba alguna vez de esa manera. No, porque yo no me estaba enamorando ni estaba enamorada. Pero al pensar en Oliver descubrí un sentimiento extraño: no era repugnancia, era indiferencia.  Era extraño porque amaba demasiado el metal-core y siempre había pensado que me atraían todos los cantantes de mis grupos favoritos de este, pero al pensar en Oliver descubrí que solo me atraía la música, no el cantante.

- Sí, ahora que lo pienso puede que haga más para mí que para tí- Mentí.

Celia me tiró su cojín a la cara y se abalanzó encima de mí para atacarme con cosquillas e insultos cariñosos. Cuando conseguí zafarme de sus garras de rubia adolescente le lancé un beso al aire y salí de su habitación con una sonrisa en la cara. Al llegar a mi cuarto me dirigí directamente a la cama, enchufé el móvil a su cargador y le envié un mensaje a Taylor.

*¿Me extrañabas?*

Me sentía lo suficientemente segura para dejar fluir mi vena seductora.

*Claro <3. ¿Qué te cuentas?*

* Nada interesante.Tengo un huequito libre este fin de semana, concretamente el Sábado por la noche pero no sé qué hacer. Nadie me invita a ninguna fiesta y me siento sola...*

*No jodas tía ¿ cómo lo has conseguido?* 

* Una tiene sus truquillos <3*

*¡Genial!*

* Pero vas a tener que dejar que me quede en tu casa el domingo porque mi madre piensa que voy a estar ocupada...si puedes, claro o_o*

* Pues piensa bien... vente el Sábado por la tarde a mi casa y nos preparamos para la fiesta y el Domingo nos vamos de compras por el centro <3*

* No tengo pasta:( *

* ¿Quén ha dicho que tengas que pagar tu?*

* Eh... no te voy a dejar hacer eso y lo sabes :( *

* Tía. A mí me da igual y lo sabes <3 *

* Loca <3*

* Te amo*

...

...

...

...

*lo sé*

MALA INFLUENCIAWhere stories live. Discover now