Capítulo 2: Llamada de tarde

338 38 0
                                    


Esa tarde Ana me llamó. Ana era una de mis "amigas" de clase ; era una pelota con los profesores, sobre todo con el de educación física y una de las personas más superficiales que conocía, no sabía por qué la aguantaba.

- ¡Tía! ¿has visto a la nueva?

- Sí, hoy he asistido a clase...- dije con tono sarcástico.

- Katia, ¡si pudiéramos vestirnos como quisiéramos vendría en pijama al colegio...! ¡ esa tía parecía una Puta de carretera con esas pintas...!

- Pues a mí me gusta su estilo... es muy personal.

Se hizo un silencio incómodo que agradecí; Esa era la única forma de deshacerse de Ana por teléfono, sino se podía tirar toda la maldita tarde criticando a la gente o hablando de sus estúpidos problemas de niña malcriada.

- ¡ Ay, Katia, contigo no se puede hablar!...¿ ya has tomado la infusión de media tarde? - preguntó. Ana quería ser psicóloga desde que tenía uso de rezón y se propuso ser mi psicóloga personal porque según ella "tengo un pequeño problema de agresividad tanto física como verbal". GILIPOLLECES.

- No me gustan las infusiones - contesté malhumorada. 

- Está bien Katia, lo pillo. ¿Pero te has fijado en esos tacones? ¡Ni mi madre los lleva tan altos! ¡por Dios bendito!, esa chica debe tener muchos problemas en casa...

- Lo siento Ana tengo que colgar - mentí- mi mamá me llama...te llamaré - volví a mentir. Y colgué.








MALA INFLUENCIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora