Presión

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4 meses después

Flippy

Me encuentro en casa, son las siete de la noche y Splendid no se había presentado en todo el día. Tal vez estoy exagerando, me estoy preocupando demasiado, pero... No lo sé, en verdad, no puedo evitarlo.

-Lo extraño tanto, casi no está conmigo, ¿por qué rayos mi lindura debe de trabajar?- Fue Fliqpy el que repitió mis lamentos.

-Que gracioso..- Respondí a su comentario, sin ganas. No quería discutir con él, no tenía ánimos para ello.

-Siempre llega tarde, podrías hornear unas galletas o algo "Señor extraño a mi novio". O, simplemente dejarme salir y..-

-No.- Lo interrumpí, sabía qué quería. -Pero, las galletas me parecen bien. - Finalicé e ignoré todo lo que me siguió diciendo mientras cocinaba, no llegue a notar cuando llegó a dormirse, no lo hice hasta que las voces cesaron, aunque ahora todo estaba tan...

Solitario.

Odiaba admitirlo, creo que le puse un peso muy grande encima a Splendid, ya pasaron cuatro meses desde que anuncié que éramos pareja, pero eso interesó pueblos cercanos y algunos lejanos, a demasiados no les parecía correcto que "La imagen de la justicia" fuera homosexual.

Hace su mejor esfuerzo, dijo que no era problema, pero si no estaba en su trabajo como persona normal, estaba salvando o intentando evadir a la prensa. Le es misión imposible llegar a mi casa con tanta gente siguiéndolo y criticando nuestra relación, pero... todo es mi culpa. Si tan solo...ese día que lo vi triste no le hubiera hablado y hubiera seguido de largo, no seríamos nada más que simples conocidos, probablemente alguien más hubiera lidiado con su depresión.... Y no tendría el problema que tiene ahora por mi culpa. Si nunca..nos hubiéramos hecho amigos .. no le habría puesto ese peso encima..

8:00 pm

Sonó el timbre, me encontraba en la mesa hundiendo mis penas en galletas. Me levanté sin ganas de la silla, fui a abrir recibiendo un abrazo por parte del que se encontraba afuera.

-¡Flippy!- Era Splendid.

-Splen..-

-Te extrañe tanto- se puso meloso besándome la mejilla, respondí con un inaudible "yo también", aunque seguro el sí lo lograba escuchar. -¿hiciste galletas?- Se adentró en la casa yendo a la mesa, -¿puedo comer alguna?- asentí mirándolo y él empezó a llevarse varias galletas a la boca.

-¿Cómo te fue hoy?- Sabía ya la respuesta, pero quería comenzar una conversación.

-Lo normal,- Dijo una vez acabó de masticar lo que parecía ser su última galleta. -ya sabes: oficina aburrida, intento salvar a la gente y luego los chismosos,- Hizo una pausa. -perdón por llegar tan tarde, en serio..-

-Está bien.-

-Flippy, hablo en serio, lamento haber llegado tarde, me siento horrible, dejarte todo el día solo y..-

-Dije que está bien- Reiteré alzando un poco la voz.

-Bien... lamento ser insistente en mis disculpas, solo..siento horrible tener que hacerte esperar y cuando vengo quedarme tan poco..-

-No importa..- ¿En serio no importaba? -Splendid,- Lo mire algo serio. -Si cortamos...¿te quitarías ese peso de encima?- Lo amaba pero no podía esperarlo todo el día, no podía ver cómo todos lo volvían el centro de atención, no podía lidiar con esto...

-¿Po..Por qué preguntas..eso?- Preguntó con una voz algo quebrada, titubeando, en realidad.. me lo esperaba. -Si..si es porque vengo tarde..¡puedo dejar el trabajo en la oficina y venir en las mañanas! El dinero lo puedo conseguir luego y..y..- No tenía sentido.. Suspiré, mirándolo a los ojos, sus ojos azules como el mar, cristalinos, envueltos en lágrimas.

Héroe Y MilitarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora