Primera vez

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Atención: hay sexo 💪👍👍

Splendid sonrió al escuchar la voz de Flippy, cerró el libro que se encontraba leyendo y se levantó del sofá para ir a la mesa. En medio de ésta se encontraba el pastel que el peli verde le había hecho, sonrío al ver el postre que a simple vista lucía como un delicioso manjar. Quitó su mirada del pastel, para observar al ex militar, el cual estaba sonrojado mientras veía a su pareja detenidamente.

-Gracias, Flippy.- Agradeció Splendid yendo a abrazarlo, apegándosele en cuanto puso sus brazos alrededor del contrario. -Se ve delicioso- Le besó la mejilla con sumo cariño.

-Splendid.- Tartamudeó su nombre, el aludido no comprendió el porqué de ello, ¿había pasado algo que tuviera que decirle y por ello el tartamudeo y nerviosismo?

Flippy miró al contrario a los ojos, con un sonrojo sumamente notable. Splendid no podía negar que ama ese lado súper tierno que suele tener su pareja hacia los besos que Splendid le brinda, o al menos él pensaba que los simples roces de sus labios eran los causantes de dicho tono sobre las mejillas ajenas. El militar tenía una personalidad que lo cautivaba, amigable e inocente, pero que bien sabe que no siempre era así, puesto que cuando quería podía ser serio y enojarse cuando le le era necesario. Además, según lo que le habían contado a Splendid, Flippy es muy hábil en muchos aspectos militares tales como Fliqpy, demasiados, si tomaras a Fliqpy como el verdadero, Flippy solo sería su versión suave, pero nada de algún enclenque a menos que se encuentre bajo presión.

-Siéntate.- Pidió Flippy después de corresponderle el beso de mejilla al héroe. -Yo te serviré.- Sonrió calmado y dejando los nervios a un lado.

Splendid asintió e hizo caso, se quedó mirando como Flippy tomaba un cuchillo para partir el pastel, éste último se alteró cuando tomó el cuchillo, pero logró encontrar tranquilidad al ver a Splendid, respiró un poco y logró que su doble no pudiera salir.

Empezó a cortar un par de rebanadas de pastel, bien sabía que, ambos eran algo golosos cuando de cosas dulces se trataban. Usó varios platos para colocar los trozos, le entregó uno a Splendid, movió el pastel a un lado y finalmente se sentó frente al héroe, el  cuál no tardó en darle una probada a su rebanada.

-¡Oh!- Dijo casi a nada de metérselo a la boca, luego cuando acabó de masticar siguió hablando. -¡Sabe muy bien, Flippy!- No le había dado ese cumplido porque fueran novios, lo decía porque era la simple verdad. -¡Me encanta!-

Sus cumplidos terminaron convirtiendo a Flippy en un tomatito, sus mejillas estaban completamente enrojecidas, él estaba con el tenedor a media boca por un bocado que a penas iba a ser mordido.

-Me alegra que... te guste.- respondió Flippy con una sonrisa, viendo como Splendid devoraba el pobre trozo de pastel de tal forma que parecía que no hubiera comido en años.

¿En verdad estaba tan rico?

Flippy no pudo evitar sonreír más ante tal pensamiento, estaba feliz.

-¿Puedo comer otra rebanada?- Miró a Flippy con los típicos ojos de cachorro, insistiendo, parecía completamente un niño pequeño, los cabellos desordenados, la miradita de insistencia, un poco de pastel manchando sus mejillas y labios...

-Claro..- Contestó el peli verde poniendo mucha atención a los labios llenos de pastel de Splendid mientras se acababa su pedazo.

-"Pervertido." - Llegó Fliqpy a hablarle, a lo que Flippy quedó callado, ignorándolo y viendo como Splendid dejaba su plato en el lavavajillas y tomaba otro -"Apuesto a que ahora no te arrepientes de haber comprado un par de cosas."- El sonrojo que a penas había abandonado las mejillas de Flippy había vuelto al instante ante tal comentario por parte de su contraparte.

Héroe Y MilitarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora