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Sus piernas se comenzaban a deformar era tan maravilloso lo fácil que era destruir algo con tus manos, la satisfacción de decidir si vive o no...

El tren se comenzó a parar, tenía que actuar rápido o me descubrirían, metí a Emily en la maleta pero si no antes golpearla en la cabeza, esta vez fue mucho mas fácil, baje y comencé a correr con todas las cosas, llegue a un pequeño y vi un gran edificio de donde entraban y salían, entre por la puerta principal y el lugar parecía como una casa antigua de esas de las películas, fui a donde estaban unas personas con uniforme y pregunte.

- Puedo quedarme?
- Claro señor, mucho gusto mi nombre es Coral, con quien tengo el gusto?
- Hola, soy John y no soy seno tengo 17.

La chica me sonrió mucho mas amplio cuando le dije mi edad, me pareció raro que me mirara así, era totalmente diferente a Emily, tenía ojos verdes, cabello rojo, piel con pecas y el cabello chino, parecía una muñeca de porcelana de las que daban miedo y tenia unos fierros en sus dientes.

- Por cuantos días vienes, John?
- No lo se...
- Indefinido. Cuanto pensabas pagar por una habitación?
- Em... Cuanto me alcanza con esto?

Saque una pequeña bolsa que tenia Emily y saque mucho papel verde de esta y se lo entregue a Coral.

- Mira, tengo la Suit Presidencial, con esto te alcanza para un mes, dejame te digo todos sus benéficios...

Comenzó a decirme muchas palabras raras, pero lo que yo sabia era que algo de así de grande seria muy incómodo, a pesar de estar encerrado mucho tiempo no me siento bien en espacios muy amplios.

- Tienes un cuarto más pequeño?
- Claro tenemos el 15-D en el séptimo piso, con esto te alcanza para 3 meses de renta.
- Si quiero ese.
- Bueno ahora me podría dar sus datos?
- John McSee
- Vivirá solo o con compañía?
- Solo.
- Perfecto aquí esta su llave que disfrute su estadía.

Le sonreí por ultima vez y comencé a esperar a que el elevador diera al séptimo piso...
***
Estábamos en la habitación a oscuras, aun era de noche y ella no despertaba.
La mataste...
No ella tenía que seguir viva, la amarre de los extremos de la cama y coloque sus piernas derechas, ella comenzó a toser sangre así que me acerque.

- Estas bien?
- Me siento muy mal, no puedo mover mis piernas...
- Mira.

Le quite el pantalón que traía y vi sus piernas deformadas y moradas, se estaban pudriendo ya.

- Porque?

Comenzó a llorar un poco y luego se limpio las lágrimas.

- Tranquila yo te cuidare.

Dije con una sonrisa en mi rostro, ahora nadie te hará sufrir ni te tocara.
Se veía fea, tenía sangre en su boca, sus ojos rojos y el cabello hecho bola, ya no me parecía linda.
Tocaron la puerta y le dije a Emily que no hiciera ruido, bese sus labios, así probando su sangre de ellos, cerré el cuarto y fui hasta la puerta.

- Hola John

Me dijo la chica del cabello rojo y yo solo le sonrei.

- Hola Coral, que pasa?
- Veraz, es mi salida y tal vez, podríamos salir...

Dijo lo ultimo mordiéndose el labio, de lo que no se dio cuenta era de que sangró un poco, me incline hasta ella y pase mi lengua por la sangre.

- Lo siento, no puedo.
- Esta bien...

Me miro con tristeza y se marcho de mi vista, cerré la puerta con seguro y fui con Emily, mi muñeca de porcelana rota...

- Ahora no podre caminar...
- Nunca te iras de mi lado.
- Tengo hambre.
- Yo no se cocinar.

Me voltee para ir al baño y cuando estaba ahí comencé a escuchar la maldita voz chillóna, saque mi navaja de mi entrepierna y abrí un poco la puerta.

- Ven John, solo somos tu y yo Jajajajaja.
- Sal de Emily.
- Ya no lo puedo hacer, ella ya esta muerta.

Se paro de la cama y me miro, sus ojos eran completamente negros, su piel padeció demasiado y sus piernas estaban como nuevas, se acerco a mi y me mordió el labio fuertemente hasta que sangre salio de el, la aparte de mí y en miro con diversión.

- Las cosas cambiaran querido niño.

Soy Solo Un Niño.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora