Mi Sexy Hermanastro © jυngĸooĸ втѕ

⭐Cap 25 : Vida Extrema

Capítulo 25 : Vida Extrema

❀ No podía definir la hora. Solo podía decir que el cielo estaba oscuro, que la luz del sol estaba escondida, pues no había rastro de ella.

Y el ambiente se sentía pesado. Varias gotas de lluvia caían sobre mi y sobre Chanyeol.

El mal tiempo continuaba al igual que mis malos presentimientos y preocupaciones.

Lleve mi mirada mas allá del rostro de mi acompañante. La oscuridad del cielo era abrumadora pude ver como un rayo se trazaba en el, tiñendo de blanco el entorno repentinamente.

¿Alguna vez has deseado escapar de algún lugar?

¿Has deseado volverte invisible, o que la tierra se abriera bajo tus pies y te tragara para escapar de alguna vergüenza o situación incomoda?

Este era uno de esos momentos.

Mi silueta se grababa en las pupilas de Chanyeol. Ese chico aun desconocido tan alto, tan galante, con una sonrisa triunfante sobre sus belfos me había tomado el pelo.

Eran pésimas sus maneras de ligar realmente. A través del chantaje pudo obtener mi numeró telefónico, aunque muy dentro de mi no entendía para que lo quería.

No me consideraba una chica tan guapa como para ganar su atención.

Más allá, lejos de mi, a las afueras de la vivienda unos ojos misteriosos rodeados de un aura infernal y colerica me examinaban.

Las manos del individuo sujetaron con fuerza el volante frente a si, ocasionando que los nudillos de sus manos se tornaran blancos. Su ceño fruncido se agravaba más a cada segundo. De un momento a otro dejo caer su pie sobre el acelerador ocasionado que la camioneta saliera disparada como un cohete por la calle.

El chillar de las llantas de un automóvil atrajeron mi mirada y atención.

Aquella camioneta negra con los cristales brindados parecía ser conducida por una persona ebria ya que su caminó no era recto, con torpeza el mismo se descarriló hacia el pavimento.

Ese mismo lugar donde los peatones pueden andar con tranquilidad.

Esa Tranquilidad y seguridad ahora desecha y corrompida por esa persona irresponsable.

Pensé que se trataba de un vecino bajo los efectos del alcohol ya que es muy bien sabido que los borrachos en corea del sur andan por donde sea.

Pero mi mandíbula cayó tan pronto como la puerta del vehículo se abrió, y él salió.

¿Ese era Jungkook?

Sí, efectivamente. Ese era él. Vestido completamente de negro camuflajeandosé un poco con su entorno. Con esa oscuridad que acechaba en las calles aunque fueran menos de las seis.

—Te has tardado... Demasiado.

Al ver su mirada, al escuchar su voz, sentí la necesidad de tragar saliva.

Una extraña corriente recorrió mi columna vertebral y en ese momento supe que tenia un poco de miedo y desconfianza.

Tras hablar con Zelo, y exponer mis dudas, nuestras sospechas, no podía negar que algo cambio en mi con respecto a Jungkook.

No temía por mi seguridad en si. Solo tenia miedo de descubrir que Jungkook era el villano de la historia.

Me sentía algo miserable, pues parecía que no conocía nada acerca de mi hermanastro.

Acerca del chico que amo.

—Andando, vamos a casa —volvió a decir Jungkook sin gritar, pero aun así fue intimidante.