-¡Andrew! -Dijo Amy, la mamá de Andy. -¡Qué bueno que llegaste!
-Es bueno volver... -Abrazó a su madre.
-Ella debe ser tu novia, ¿cierto? -Preguntó.
-Hola, mucho gusto, soy ______. -Dije dándole la mano.
-El gusto es mío. Dime Amy. -Me sonrió. -Pasen, pasen.
Nos adentramos a la casa. Amy nos llevó a la sala, donde se encontraba el padre y la hermanita de Andy. Me presentó con su padre y me trató muy bien, al igual que su hermana.
Estuvimos un rato conviviendo y yo respondía algunas preguntas que ellos querían saber de mí.
-¡Miren la hora, debo hacer la cena! -Dijo Amy exaltada.
-S... Si quiere le puedo ayudar... -Dije.
-No, por supuesto que no. Aquí tú eres la invitada. -Negó.
-Por favor, no me cuesta nada. -Sonreí.
-Está bien... -Suspiró. -Vamos.
Seguí a Amy a la cocina.
-¿Qué podemos hacer? Algo rápido. -Dijo.
-Ah... Pasta, con salsa de tomate. -Opiné.
-Hmm, buena idea.
Tomamos una cacerola y comenzamos a cocinar.
Mientras yo seguía cocinando, sentí alguien tomándome por la cintura y besándome el cuello.
-Andy... E... Espera. -Dije.
-No... -Seguía besándome el cuello.
-Andy... Deja a ______ y ve a poner la mesa, por favor. -Dijo Amy entrando a la cocina.
Andy rió a lo bajo y salió ha hacer lo que su madre le pidió.
-_______, eso te está quedando delicioso.
-Gracias, Amy. -Sonreí.
Terminamos de hacer la cena y nos sentamos a cenar en el comedor.
-Esto está delicioso. -Dijo Chris.
-Sí... Cocinas muy bien, _______. Andy, ella sería una buena esposa. -Dijo Amy.
-¡Mamá! -Dijo Andy.
Mis mejillas ardían, me había sonrojado bastante.
-Y, Andy... ¿Cuánto tiempo se quedan? -Preguntó Amy.
-Una semana, nos vamos un día antes de mi cumpleaños. -Contestó.
-¿El 25?
-Sí... Haré una pequeña fiesta con los chicos en L.A.
Seguimos platicando hasta que todos terminamos de cenar.
-Bueno, es mejor que vallan a descansar, mañana será pesado. -Dijo Amy.
-¿Por? -Preguntó Andy.
-¡Vamos a escalar!
-¿Enserio? -Gruñó
-¿En dónde? -Pregunté confusa.
-Aquí cerca hay unas montañas inmensas que nos gusta ir a escalar bastante. Así que vallan a descansar. -Dijo tomando los platos sucios.
-Le ayudó a lavarlos... -Le dije.
-No, no te preocupes, Chris y yo los lavamos, ustedes suban. -Sonrió.
Andy me tomó de la mano y subimos las escaleras. Entramos a la habitación, estaba grande y muy bonita. Andy entró detrás de mí y escuché como cerraba la puerta con seguro.
Sentí de nuevo sus brazos en mi cintura, queriéndose meter por debajo de mi blusa. Mientras me besaba el cuello.
-A... Andy... Aquí no...
-¿Por qué? -Dijo.
-Tus padres...
-Están allá abajo, no se escuchará.
-No... Andy.
Me cayó con un beso en mi boca, mientras se deshacía de mi blusa. Fue bajando sus manos lentamente hasta llegar a mi pelvis, donde desabrochó mis jeans y los bajó, dejándome así en ropa interior.
Me recostó delicadamente en la cama. Se sacó su playera y sus pantalones. Se posicionó encima de mí y mientras me besaba, deslizaba mis bragas por mis piernas. Cuando se deshizo de ellas, me dio la vuelta en la cama, quedando yo encima de él. Pasó sus manos por mi espalda, desabrochando mi sostén.
Bajé mis manos lentamente hasta llegar a su entrepierna. Gemí al sentir su miembro, el cual ya estaba duro.
Deslicé sus bóxers y me acomodé encima de él, haciendo que su miembro entrara perfectamente en mí. Andy llevó su cabeza hacia atrás y cerró los ojos, ahogando miles de gemidos, para no ocasionar ruido.
Besaba su cuello y succionaba su piel, dejándole marcas. Mis movimientos se hicieron cada vez más rápidos, soltaba gemidos leves y Andy para tratar de ahogarlos, me besaba con una pasión inexplicable.
Salió de mí y me tomó de la cintura para darme la vuelta.
Pasaba sus tibias manos por mis muslos, separó un poco más mis piernas, tomó su miembro con su mano y lo llevó a mi entrada, dándome una fuerte envestida que me hizo dar un pequeño grito y encajar mis uñas en su espalda.
Mientras él daba pequeños mordiscos en mis pechos, yo trataba de no gemir fuerte, pero me era imposible, éste chico me volvía loca.
Grité al sentir el orgasmo llegar, pero de inmediato llevé mi mano a mi boca, tratando de ahogarlo. Sentí aquél líquido caliente dentro de mí, Andy se había corrido.
-Te amo... -Dijo jadeante, mientras me daba un beso en la frente.
Se recostó a mi lado y me abrazó por la cintura, haciendo la típica "cucharita".
-Te amo, Biersack. -Lo tomé de la mano entrelazándola con mía.
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Oye sí 7u7
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Lofiu <3
