003 | ¿Un nuevo grupo?

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Cuatro años después

Ya han pasado cuatro años desde que el mundo se fue al infierno, desde el incidente con Gareth no he confiado en nadie ni en nada y he estado sola desde entonces, solo me he encontrado con unos cuantos grupos, todos han muerto ya que no son lo suficientemente fuertes para sobrevivir.

Desde ese entonces he sido fría y cortante con cualquier persona con la que me encuentre. En estos momentos me encuentro buscando un refugio, para poder asegurarme de la noche ya que aunque tenga catorce y por cumplir los quince años aún le tengo miedo a la oscuridad. Más a lo lejos pude divisar una urbanización en medio del bosque, fui hasta allá, entre y revise que fuera seguro. Al terminar busque una casa para hospedarme, deje mis armas y provisiones sobre la mesa y me recoste sobre el sillón y rápidamente me quede dormida, estaba demasiado cansada.

[...]

Me desperté incómoda, algo malo pasaba, luego de un momento sentí que alguien me apuntaba con algún tipo de arma.

—Mierda, no cerré la puerta. —Dije en un surruro, el cual pudieron escuchar.

—Exacto, deberías tener más cuidado. —Dijo la persona que me apuntaba. —Ahora ponte de pie. —Bufé, mientras me ponía de pie, fui rápida y tome mi cuchillo y se la puse en el cuello con un poco de presión.

—No creo que te convenga hacer eso. —Dijo un chico apuntándome detrás de mi, al darme media vuelta pude ver su cabello castaño oscuro, una piel pálida, y unos hermosos ojos azules, un poco mas alto que yo, parece de mi edad, la verdad era lindo, no podía enamorarme de el,  fuera pensamientos estupidos.

—Si lo mato no te atreverás a matarme.- Dije fría.
-Que tal si lo intentas... Y veremos. —Dijo con un tono frío y seco... el mismo tono que yo ocupo.

—Como usted ordene. —Dije burlona, me di vuelta el hombre delante mio era de piel oscura, en sus ojos se podía ver el miedo.

—Chrystal. —Dije mi nombre, mientras que levantaba mi mano en forma de saludo.

—Tyresse... Matame por favor, no puedo con esto. Y si lo haces hazme  el favor de entregarle esto a Sasha mi hermana.

—De acuerdo. —Dije seca, todo lo que hablamos fue en un susurro. Luego de eso le corte la garganta y le enterré el cuchillo en la cabeza para que no se convirtiera. El chico se sentó, en su cara se podía notar el asombro, tome mi mochila y me guarde las provisiones que tenia Tyresse, iba a irme pero el chico habló.

—¿A donde vas? Tu iras conmigo.

—Eso no te incumbe, y no, ni loca iría contigo. —Dije ya frustrada

—Iras conmigo quieras o no.

—Pues no quiero y no me obligaras. —Iba a irme pero escuche un disparo que le llegó a mi pierna.

—¡HIJO DE TU MADRE! —Grite. —¡Que te pasa! —Dije mientras gemía por el dolor, y el estupido solo reía.

—Te lo dije, iras conmigo quieras o no. Hay orificio de salida, eso es bueno. Carol te curara. Por cierto soy Carl. —Dijo con una sonrisa picara, yo le respondí escupiéndole en la cara. Enojado me tomó del brazo y me llevo a rastras a la entrada de la urbanización, ahí se encontraban varias personas mas, y algunos autos, cuando estábamos lo suficientemente cerca pude escuchar algunas conversación, pero todas cesaron cuando llegamos ahí.

—¿Y Tyresse?- Preguntó una chica de piel negra.

—Sasha, ella. —Dijo Carl apuntándole a mi. —Lo mató.

—El me pidió que lo matara. —Dije sincera y fría a la vez.

—¡MENTIRA! ¡EL NUNCA TE HUBIERA PEDIDO ESO! ¡MENTIROSA!- Me grito la chica.

—Lo siento, siento mucho que el no fuera lo suficientemente valiente para poder vivir. Bueno, si no me van a curar la pierna, yo me voy. —Dije mientras daba media vuelta, estaba por irme pero alguien me tomo el hombro con fuerza y me devolvió a mi lugar.

—¿Y por que tendríamos que curarte? —Pregunto un hombre, alto, rubio y ojos celestes, con barba.

—No es que yo quiera que hagan eso, puedo hacerlo yo misma, solo dejenme ir y no nos veremos nunca más.  —Dije tratando de irme, pero otra vez Carl me agarró y con mas fuerza que la vez anterior.

—¿A si que quieres irte?

—Claro que si, prefiero estar sola que con un grupo. —Dije molesta.

—Entonces, te quedaras con nosotros, Carol desinfecta su herida, por favor... Y por ultimo, Carl cuidala que no se escape. —Dijo nuevamente el rubio qué parecía ser él lider.

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