Capitulo 22

56K 4.1K 277
                                    

                  


Renny:

Rees apenas si hablo durante todo el día, incluso cambio el boleto para que saliéramos en la mañana y no en la tarde como lo previsto. Había mencionado ir a cenar ayer en la noche pero en lugar de eso se encerró en la habitación, incluso lo tuve que persuadir para que comiera algo.

Sé que no le había caído bien la noticia de su padre estando en elecciones y mucho menos que Daniells no se lo comentara, no dijo nada acerca de mí, por lo que consideraba que quizá William mantuvo su promesa.

Era impresionante como los medios mantuvieron en silencio mi verdadera procedencia, solo esa perra del canal de entretenimiento. Una de las razones por las que Daniells anulo esa entrevista, si hubiera ido de seguro ahora estaría odiándome hasta la muerte.

Me abroche el cinturón de seguridad antes que el avión despegara, este miedo a que el avión se cayera era estúpido y a la vez muy válido. Pensar en cómo mis padres... bueno mis padres...

No podía ni pensarlo, no ahora que estábamos a segundos de despegar en medio de una tormenta. ¡Maldita tormenta! Estaba lloviendo demasiado y según el piloto anuncio unos segundos antes el vuelo estaría movido.

Cuando el avión empezó a correr en la pista, mi cuerpo estaba tenso, demasiado tenso. Quería hacerme un rollito en los brazos de Rees como lo había hecho todos estos vuelos. Sentir su calor, como me cantaba al oído y como nuestros cuerpos encajaba a la perfección. Lamentablemente esta vez iba sola en el asiento, Rees estaba al lado hablando con Daniells. Apreté las manos en el sillón conteniendo la respiración al tiempo que el avión empezaba a elevarse.

Tal y como el piloto anuncio, el avión comenzó a irse de lado a lado, bajones y una turbulencia maldita, no tan segura si el avión se estaba cayendo o era solo mi imaginación. Los ojos se me llenaron de lágrimas, si fuera creyente como solía serlo, estaría rezando a todos los santos a que esta cosa llegara a salvo a Londres. Al menos era un viaje corto.

Mi cuerpo estaba temblando, los ojos cerrados como si eso fuera a ayudar y la música a todo volumen. Estaba dejando de sentir todo, asustada hasta más no poder. Me prometí nunca subirme en un maldito avión y aquí estaba a punto de abandonar mi cuerpo por un paro cardiaco.

Recuerdo que con mis padres solíamos viajar bastante, eran dos personas grandiosas. Papá siempre me hacía reír, jugando conmigo sin importar el lugar, mamá por su parte era dulce y consentidora. Nada en nuestra familia era malo, éramos muy unidos y felices.

Las imágenes de como quedo el avión en medio del agua, completamente destruido, ningún sobreviviente, vinieron a mi mente. Nunca me dejaron ver los cuerpos de mis padres, al parecer estaban destruidos y creían que sería mejor que no los viera. Abbi me tuvo en sus brazos ese día, cuando estaban reconociendo los cadáveres, William fue el que entro ya que en ese entonces eran los asesores del gabinete de William.

Algo se abrió en mi pecho y sentía como mi garganta se apretaba, las ganas de llorar estaban definitivamente en su mayor esplendor. Lo que sea que me estaba pasando dolía como el día que los perdí. Las cosas no iban a parar bien, no había modo que fuera de ese modo.

- ¿Renny? -escuche mi nombre a lo lejos en una voz ronca y sexy. Rees.

Sabía que era él, sabía que solo él podía hablarme de ese modo pero yo estaba lejos, no había modo de poder regresar de la oscuridad. Me veía de pequeña, corriendo por todos lados, enseñándole a mi padre mi nuevo vestido de princesa.

-Linda, hermosa... -decía mi padre al mismo tiempo que me daba vueltas.

Mamá estaba a lo lejos, preparando algo de comer. Con esa sonrisa amplia que siempre nos daba cuando papá y yo jugábamos. Ella con su cabello rojo y ojos cafés, papá con el suyo rubio y ojos verdes. Siempre dije que saque lo mejor de dos mundos porque tenía el hermoso cabello de mi madre y estos ojos verdes que me recordaban a mi padre.

SOLO TÚ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora