Capitulo 4

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Pov Anastasia

Estamos a punto de comenzar la reunion cuando mi padre se da cuenta que faltan unos documentos importantes, salgo de la oficina para pedirselos a Andrea, pero Olivia me dice que esta en el comedor voy hasta allá y cuando estoy a punto de entrar escucho una carcajada que me resulta hermosa, abro la puerta para ver a quien pertenece y para mi sorpresa es de Crisrian quien esta muy entretenido hablando con Andrea, siento como mi cuerpo se llena de enojo, estos dos se conocieron hoy y ya son inseparables pero en esta empresa no se permiten las relaciones entre empleados y se los voy a dejar claro a los dos.

- Andrea te esperan en la sala de juntas,- digo con voz dura, veo como le sonríe y se encoge de hombros, luego sale del comedor, me dirijo hacia Cristian y el se pone de pie, me paro delante de de el, no me resisito y lo miro a los ojos esos que me atraen como el metal al iman- Cristian las relaciones sentimentales en la oficina no están permitidas,- digo enojada, veo en su cara sorpresa, como que no entiende lo que le estoy diciendo,- Entendido?- las reglas son para todos.

- Si Srita Steele,- podría jurar que su mirada esta llena de diversión, me doy la vuelta para irme pero me agarra por el antebrazo y todo mi cuerpo se pone alerta ante la descarga de sensaciones que recibo por parte de el, me acerca mas a su cuerpo e inhala el aroma de mi pelo, siento que me derrito,- Lo tendré en cuenta,- susurra en mi oído, siento que me falta el aire respiro y cuando suelta mi brazo, salgo rápidamente del comedor sin mirar atrás.

"Por Dios" cierro la puerta del baño y me lavo la cara para sofocar el calor que me hizo sentir ese hombre, como puede con solo tocarme descontrolarme de esa forma, ni José que es mi novio me ha hecho sentir de esa forma, que me pasa? Seco mi cara y vuelvo a la sala de juntas.

La junta transcurre normal, yo no he escuchado nada ya que mis pensamientos están centrados en cabello cobrizo rebelde, ojos grises, labios carnosos,manos fuertes...

- Annie, estas de acuerdo?- dice mi padre y me saca de mis pensamientos.

- Si papa,- digo para que no se den cuenta que estaba distraida.

- Entonces comienzas a trabajar mañana mismo, tu oficina va estar al lado de la mía.- dice mi padre yo solo asiento.

La hora siguiente si le puse atención a lo que dicen no valla ser que manden a China y diga que si por estar pensando en el guardaespalda.

Al terminar la junta le digo a Jose para que vamos ao cine y luego a cenar pero me dice que no puede porque tiene que adelantar un trabajo.

- Kate vamos a mi casa y nos tomamos un cocktail?- le digo mientras entro a su oficina.

- Creía que ibas a estar con Jose,- dice sorprendida.

- Tiene pendientes,- me encojo de hombros, Kate termina de recoger sus pertenencias y salimos, ella va en su auto y yo en el mio con Cristian, pero hago todo lo posible para que nuestras miradas no se crucen, al llegar a la casa me bajo antes de que me abra la puerta del auto y camino hacia la casa, pero por ir pendiente a no mirararlo me tropiezo pero unas fuertes manos me sostienen y me ponen de pie.

- Gracias por ayudarme,- le digo.

- Yo siempre voy a estar cuando lo necesite,- lo miro a los ojos,- nunca lo dude.- me dice y no se porque creo cada una de sus palabras.

- Para eso te pagan,- digo con ironia, no puedo dejarme envolver por sus palabras, no y no.

- Y muy bien,- responde serio.

- Hoy no voy a volver a salir, si necesitas hacer algo o salir con alguien lo puedes hacer.

- Gracias Srita,- en ese momento llega Kate y hasta que no estamos dentro de la casa Cristian no se va, pasamos a la terraza y le pido a Gail unos martini y una bandeja de jamon y queso.

El GuardaespaldaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora