Scooter's daughter

67. Say something.

Ryan me ayudó a limpiarme, mi blusa se había ensuciado un poco así que él me prestó una de él; me quedaba gigante pero era cómoda.

-¿quieres que te vaya a dejar a casa? -Ryan preguntó amablemente.

-¿puedo quedarme aquí hoy? No quiero preguntas de papá -hice un puchero.

-claro -sonrío- ¿veamos una película?

-sí -sonreí- pero yo la escojo -pestañee reiteradas veces sonriendo.

-de acuerdo, traeré unas mantas -dijo y se levantó del sofá.

Predícala televisión y busqué en netflix una película.
No, no sería de amor.
Elegí «The kings of summer»

Ryan llegó, nos acomodamos y la película comenzó.
Fue bastante divertido, hasta que me dormí.

••

Cuando desperté no reconocí el lugar, luego recordé que me había quedado en casa de Ryan, él se encontraba durmiendo a mi lado.

Me dirigí al baño he hice mis necesidades, lavé mi rostro e intenté lavar mis dientes con mi dedo.

Luego me dirigí a la cocina, tosté dos panes, preparé café y exprimí unas naranjas, también corté unas frutas, luego todo lo llevé a la mesa acompañado de distintas cosas para untarle al pan.

-RYAN! -grité caminando hasta la sala de estar. -DESPIERTA - le grité.

-cinco minutos más por favor -dijo entre dormido.

-vamos, arriba -dije en su oreja.

Poco a poco abrió los ojos y se sorprendió al verme.

-dormí aquí -reí

-oh, lo había olvidado -fregó sus ojos. -¿quieres que te lleve a casa? -preguntó.

-no, quiero que me acompañes a desayunar -sonreí -está todo en la mesa.

-de acuerdo -se levantó y se dirigió al baño, luego de estar menos de un minuto ahí salió por la puerta, estaba más despierto.

Nos sentamos a desayunar, todo estuvo bien.

-¿cómo estás? -preguntó algo preocupado.
-de hecho bien -sonreí

-genial, debe haber sido que ayer estabas muy alterada.

-sí, eso creo -suspiré
-¿hablarás con él? -preguntó

-supongo que es lo que debo hacer, pero en verdad no tengo ganas de escucharlo, sea como sea me dijo que no fuera a cenar con él para estar con esa rubia.

-tranquila, tal vez todo ha sido un mal entendido -pausó- ¿haz intentado llamarlo?

-no -suspiré.

Estuve bastante tiempo hablando con Ryan, él es genial aconsejando, me dijo que debía intentar llamarlo e intentar arreglar las cosas aunque eso signifique el fin de nuestra relación.

Eran las 11 de la mañana y decidí irme a casa, no le había avisado a papá que dormiría afuera y no quería siquiera ver el teléfono.

••
Llegué a casa y lo primero que hice fue ducharme, me puse ropa cómoda y luego busqué mi teléfono.
Estaba a punto de desbloquearlo cuando papá entró por la puerta.

-¿estuviste con Justin anoche? -preguntó.

-sí -mentí

-¿Segura? -preguntó

-sí -respondí nuevamente.

-genial, saldré con Yael, nos vemos -me lanzó un beso.

-adiós

Desbloqueé mi teléfono, revicé y tenía muchas llamadas de papá sin atender, pero nada de Justin, solo un mensaje:

"De nuevo me disculpo por no poder asistir a nuestra cena, pasaré por ti en la tarde, a eso de las cuatro para llevarte a la playa, te quiero"

••

Las horas pasaron, faltaban casi diez minutos para las cuatro y decidí cambiarme, una maxi falda y un crop acompañado de unas sandalias y unos lentes de sol y unos rojos labios.

Tomé un bolso negro con mis llaves, mi teléfono y la billetera.

Eran las cuatro veintitrés y Mariam, la nueva empleada se encontraba golpeando la puerta de mi habitación diciendo que me esperaban abajo.

Intenté calmarme y bajé.
Justin me esperaba en la sala de estar, se veía bastante guapo con unos jeans oscuros y una blanca polera, junto a zapatillas del mismo color.

-hola princesa, ¿cómo estás? -intentó besarme pero corrí mi cara.

-¿vámonos? -pregunté

-sí, claro -me miró extrañado.

El camino en su auto fue largo y silencioso, también incomodo, hasta que llegamos a la playa y él se estacionó.

-¿Por qué no me besas? ¿Por qué no me hablas? -pausó- ¿qué hice?

Lo miré a los ojos pero rápidamente desvié mirada.

-papá dijo que ayer terminaron temprano -susurré.

Justin no dijo nada.