Mi mayor tesoro 🔮

CAPITULO 27 💎

HORAS DESPUES

Ya volví -se deja caer en el sofá-

Hola bebé, ¿cómo te fue? -consulta Shinne as u hijo-

Bien, pero me siento muy cansado -suelta un suspiro-

Ay mi niño, ve a tu cuarto a descansar anda -le ordena-

Esta bien -se levanta y va a su habitación-

CON BILLS

Oye... enano... shin. Te estoy hablando -le grita-

Ay señor bills, no tiene por que gritar estoy sentado a su lado -se queja-

¡Si, pero no me haces caso! -contesta-

Ahora sabe que es ser ignorado -dice whis con gracia en su voz-

Como sea, te decía que iré con freezer, a estado devastando planetas en busca de Yuudai, le diré que lo deje de buscar -cuenta-

Está bien -contesta-

Otra cosa, por nada del mundo se te ocurra enfrentarte a su ejército -ordena-

No señor -nervioso-

Bueno, whis vámonos -ordena al ángel-

Con permiso supremo Kaiosama -le hace reverencia y se va-

Shin va a su habitación y se quita su túnica observando la marca que tenia por ver salvado a dos planetas, no se arrepentía, pero sabía que lo seguía haciendo mas temprano que tarde perecería y con él se iría bills. El universo 7 se quedaría sin deidades. Suelta un suspiro. Va a la habitación del pequeño que vagaba por sus grandes pasillos del antiquísimo templo. Al entrar lo encontró durmiendo tranquilamente, sin preocupaciones, sin problemas por su enfermedad. Solo parecía disfrutarlo. El supremo Kaiosama sonríe e implanta un beso en su frente, para después solo observarlo.

Un cosquilleo se hizo presente en su ser, señar de que algo ocurría en su universo, sabia que bills y whis estarían ocupados por lo que dirigió al sitio.

PLANETA CERIAL

Shin quedo horrorizado al ver el planeta. Muchos cadáveres en el suelo de adultos, ancianos, de todas las edades. Siente como su corazón se acelera, ace un año aproximadamente los había salvado del ejército de freezer, pero en esta ocasión no sabia quienes eran los culpables.

El shinjin rápidamente busco el ki de monite y lo encontró en un estado muy débil.

Monite -lo llama- hola?

Eh... supremo Kaiosama -dice una infantil-

Granola, estas bien -se acerca para revisarlo-

Nos atacaron -responde-

¿Quienes? ¿Los mismos de la vez pasada? -cuestiona conservando la calma-

No, eran varios, todos vestían ropas extrañas, además parecían terrícolas, como Yuudai, pero sin la cola. Además de que eran muy fuertes -suelta una lagrima- mi... papá murió con una mira de desaprobación hacia mí, porque no puede proteger a mi mamá ni a mi hermanita -llora-

Shin observa como se estaba conteniendo por lo que lo apega a su pecho, diciéndole que todo estaba bien que podría llorar y sacar sus penas en llanto. Granola se aferro a la deidad, dejando escapar llantos de mera agonía y desesperación.

Tranquilo, aun eres un niño, no tienes por que sentirte fatal. Te prometo que los volverás a ver y sabes, no creo que esa mirada haya así de desaprobación, yo siento que fue una mirada de tristeza -explica mientras le acariciaba el cabello- tu padre te ama, y esta orgulloso de ti, puedo verlo. tu papá, Tu mamá y tu hermana están justo ahora detrás de ti, deseándote lo mejor y no que no dejes que esto te detenga y que sigas luchando por tus sueños

Granola se separa y mira a su dios con ojos lagrimosos. Shin le regala una mini sonrisa la cual logro tranquilizar al niño y se volvieron a abrazar, poco a poco el niño pelimenta se iba calmando.

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me gustaria estar en los zapatos de granola, para ser consolada por shin. mientras escribia este capitulo no pude evitar sentirme mal por mi vida, siento que soy la desonra de mis padres, pero todo lo reprimo, la ira, las ganas de llorar. no me permito expresarme y no se por que, supongo que por temor a que esta relacion quiebre. 

Es muy duro llevar una vida, si tu mente no esta al 100% bien y por mas que intentes entenderla, posiblemente nunca lo lograras. Lamento que el capitulo haya sido tan corto, queria sacar lo que siento justo ahora. Los quiero, cuidense mucho ❤