Cap 26 Mucho que procesar

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Para Erizo era un espectáculo un poco surrealista y tal vez algo bizarro, mientras ella estaba sentada sobre una almohada su amigo Oscar se columpiaba sujeto del chico Max quien literal flotaba o volaba en la habitación no podía explicarlo.

Erizo entendía esa parte donde este campamento estaba lleno de seres mágicos pero ellos solo eran chicos normales, chicos de la cuidad, chicos que venían de la escuela y estaban disfrutando de unos días de vacaciones.

— Enserio puedes aguantar tanto cargándome — Comentó Oscar sujeto de las manos de Max.

— Eres realmente ligero — Max comentó mientras levantaba a Oscar quien casi toca el techo de la cabaña siendo atrapado entre las manos de Max.

Max depositó suavemente a su amigo Oscar y se sentó en el suelo para acompañarlo ocultando sus alas de un instante.

— ¿A donde se fueron? — Oscar preguntó sorprendido.

— Ahí siguen solo se mimetizan — Max señalo mientras alejaba con una mano al curioso de Oscar, miró casualmente a la chica Erizo — Así que, ¿podrías aceptar la tregua? ya me disculpe con cada una de las chicas con las que llegue a salir en el pasado —

Erizo tenía una cara de nerviosismo, unas cuantas gotas de sudor frío aún se reúnen en su frente tratando de unir cada pieza, sus palabras o sus mentiras.

— Co-como se que dices la verdad y no eres una de esas brujas burlándose de nosotros — Erizo acusó de inmediato.

Max se acercó y tomó la mano de Erizo para tratar de besarla, antes de hacer algo esta simplemente la retiró asustada.

— Alejate bicho raro — Erizo se retiró repentinamente, comentó entre nerviosa y asustada.

— Haaa, lo que falta — Max se quejo dejándose caer al piso — La erizo que conosco me habría fulminado con un rayo, sueles ser muy violenta cuando se trata de romance — Este solo se cruzo de brazos para pensar.

— Erizo puedes lanzar rayos y no me lo habías dicho — Oscar comento mas emocionado mientras imaginaba la escena — Como un Lord sith? —

Max solo se rió — deberías de verla con esa cara malhumorada y ojeras lanzando rayos —

— Ustedes dos basta — Erizo aplaco a este par ya molesta — Como se supone haga eso —

— Eres una bruja — Max señaló a Oscar — este mi amigo un gusano resplandor —

—¿Un que? — Oscar pregunto curioso.

— tienes el poder de hacer feliz a la gente — Max le sonrío — has salvado a muchos pequeño héroe —

Oscar se veía emocionado.

— Eso es tonto, no voy estar usando uno de esos trajes negros — Erizo se molesto — Digo si seria genial lanzar rayos y eso —

— Si de todas tienes un gusto por la moda diferente — Max señaló — Bueno mucha charla busquemos al responsable —

— ¿De qué hablas? — Erizo señaló

— de todo esto, este mundo de fantasía — Max señalo mientras salía de la cabaña — no hace falta que me acompañes yo resuelvo esto —

Erizo pensó un momento y terminó saliendo tras el chico murcielago — Oye espera —

Poco faltó para que Oscar se les uniera por curiosidad, Max le contó que en realidad todos los que ve en este campamento incluyendo los son mayores y ya tienen una vida.

— Espera un momento como que Oscar sea el que tiene una casa en la playa, con tres hijos y una esposa superpoderosa — Erizo estaba muy inconforme — y yo sea la loca de los gatos y adicta al cafe —

— Wow enserio y como son — Oscar estaba emocionado.

— Son unos amores — Max señaló mientras seguía caminando.

— No me convences, miralo apenas y puede respirar y no caerse — Erizo estaba claramente molesta por su supuesto futuro — y al cabo tú a qué te dedicas —

— Bueno, soy ammm guardia de amm medio turno — Max se rasco la nuca — no se oye tan bien cuando lo cuentas.

A los pocos minutos estaban en una de las cabañas, Max tocó la puerta y lo primero que miro fue a un pequeño panda algo nervioso por tal visita.

— Hey viejo amigo podemos pasar — Max señaló.

— Estoy un poco ocupado — Pepper comentó nervioso a sabiendas de su situación, trato de cerrar la puerta pero Max lo detuvo y simplemente entró al lugar.

— No está mal lo que estás haciendo — Oscar miró a su amiga.

— es mejor vigilarlo, no creo nada de lo que dice — Erizo le susurro a Oscar.

Pepper estaba nervioso por la intromisión, podrían ser bullying, lo pudieron ver en el bosque sin ropa y venían a burlarse.

— ¿Qué quieren? — Pepper señaló.

— Que nos saques de este sueño, no se cuanto te pago Erizo pero ya me canse de este juego — Max menciono — esto es algo que debemos resolver solo nosotros dos —

— No se de que hablas — Pepper comento más asustado.

— vamos amigo ya sácanos de este sueño, fue suficiente — Max se escuchó más exasperado.

— Pero no se de que me hablas, quieres mi dinero dejame buscarlo — Pepper comentó temeroso ante sus agresores.

— Deja de hacerte el tonto! — Max levantó un poco la voz, pero antes de continuar Erizo y Oscar se interpusieron.

— Hey basta, solo lo asustas — Erizo señalo — ya basta con este tonto juego tuyo —

— es un sueño, como se salía de el — Max pensó un poco cuando una sonrisa se formó en su cara.

Max miró a su alrededor estaba a contraluz asi que sabia que seria mas impresionante, levantó y las agito un poco las alas, desplegó sus colmillos en una fracción de segundo con un silbido se mostró amenazante como para espantar a cualquiera.

Y había funcionado Oscar, Erizo y Pepper estaban abrazados gritando de miedo, al notarlo escondió esas fracciones — Ok ok, tranquilos me pase un poco solo quería asustarlos para salir del sueño — Max trataba de calmarlos lo cual fue un poco difícil.

— Esta fue mala idea — Max mencionó mientras se sentaba — Hey calmados no pasa nada, todo esta bien.

Después de calmarse un poco Max noto algo, a pesar de su resistencia la risa le ganó —no puede ser—

Oscar se dio cuenta — Pepper, ¿por qué estás desnudo? —

Erizo se apartó tapándose la cara — Ponte algo —

Pepper estaba avergonzado — No, no, no, — El pobre chico tomaba su ropa del suelo a toda prisa ante la mirada sorprendida de Oscar, la pena de Erizo y las risas de Max.

— jajaja, ok ok te pasas, maldición — Max no dejaba de reírse.

Pepper estaba tan avergonzado, ya le había pasado pero nunca con gente cerca, había tomado la sabana de su cama para ocultarse mientras trataba desesperadamente volver a ponerse la ropa.

— Ya se puso la ropa — Erizo comento demasiado exagerada señalando al chico vampiro — Maldicion Max que hiciste—

— No, yo nada es cosa del chico nube — El chico vampiro se arrimo al panda y se recargo en su hombro — con eso estamos a mano, recrear esas cachetadas, na te lo mereces —

Pepper estaba rojo de vergüenza más por las insistentes burlas de Max y no fue hasta que Oscar se dio cuenta.

— Amm Pepper, volvió a pasar — Oscar señaló.

— No de nuevo — Erizo se tapó los ojos y decidió salir de la cabaña.

Max no se aguantaba la risa y Oscar solo buscaba algo para pasarle al pobre panda que estaba tan rojo como un tomate.

Juntando las PistasWhere stories live. Discover now