18: «La belleza retratada»

179 33 5
                                    


CAPÍTULO DIECIOCHO
( La belleza retratada )


El silencio era una de las más grandes torturas, pero era un precio al que Will estaba dispuesto a pagar.

Habían pasado al rededor de dos semanas desde que Carson regresó a California y el peso de su ausencia era demasiado notorio. Estaba claro que el anillo hacía su ausencia más amena, pero Will se dió cuenta de que necesitaba a Carson, al Carson físico que le aseguraba que todo saldría bien y que sostendría su mano durante el día para hacerlo sentir acompañado.

A pesar de que no tener a Carson era la peor pesadilla hecha realidad, el no tener a nadie con quién contarlo era la verdadera tortura. Quería gritar a todo el mundo lo bien que se sentía el tener de novio a Carson Hartman, cuánto lo quería y expresar el romance puro al aire libre.

Pero Will sabía que eso solo se quedaría en sueños, estaba consciente que en su mundo no había espacio suficiente para ese tipo de muestras de amor, y si tan siquiera tuviera un poco del valor que jamás ha tenido en su vida, y se arriesgara a contar algo así, no sería más que un par de huesos en un ataúd.

Por lo tanto había recurrido a sus dibujos, cada vez que se encontraba extrañando a Carson un poco más de lo usual (todo el tiempo) lo dibujaría. Hasta ese entonces ya contaba con un total de ocho dibujos; cada uno con una pose, expresión y paisaje diferente, pero cada uno era del mismo protagonista: Carson. Y cada vez que se encontraba dibujandolo, no sabía si era por el cariño que le tenía o aquel efecto que poseía sobre él, pero ciertamente Carson Hartman era una obra de arte. Tenía unas de las mejores facciones que Will jamás había visto y parecía que había nacido para ser retratado. A veces sentía que su manera de dibujar no le hacía justicia a su belleza, y cuando lo comentó con Carson recibió un sermón que pudo escuchar desde las letras en el papel.

« ... Will, no quiero que jamás vuelvas a comentar algo de ese tipo, ¿me entiendes? Tu arte es mejor de lo que imaginas, y cualquier cosa que creas es merecedora de ser retratada por ti será bellísima. Mi rostro no es la única belleza del mundo, tu también existes... »

¿Será que el universo por fin estaba siendo amable con Will? Después de tanto tiempo, la vida le estaba dando algo a lo que valía la pena sostenerse. El tener a alguien en quien poder pensar para salir adelante, más allá de su familia, sabía que si ese era su último día en la tierra sabía que sería extrañado por la manera en la que amó, en la que sintió y por como fue amado por él.

Por momentos sentía que se trataba de demasiado afecto para él, que era un sueño. Tenía miedo de volver a despertar en El otro lado y enterarse de que todo lo que había vivido con Carson era producto de su imaginación. No estaba seguro de poder soportar el peso de esa clase de pesadillas, se estaba tomando su propio tiempo para volver a recordar su vida antes de caer en el otro lado y el simplemente pensar en ya no tener a quien se había vuelto su salvación durante ese corto periodo de tiempo sonaba como el fin de sus días.

—Vamos, Will. Ya casi llega Dustin —la voz de Max le hizo salir de su fantasía.

Claro, ese día regresaba Dustin del campamento de verano y estaban en su casa preparando la sorpresa de bienvenida. Si era sincero, Will tenía pocas ganas de estar ahí, preferiría estar en su habitación haciendo más retratos de Carson, pero gracias al regreso de Dustin al menos ya no se sentiría tan apartado al estar con Once, Mike, Lucas y Max. Dustin entendía un poco más aquel sentimiento de soledad que sus otros amigos, definitivamente con Dustin se podía entender mucho mejor.

LOVERBOY  ━━ will byersWhere stories live. Discover now