𝑫𝒂𝒈𝒈𝒆𝒓

En tus sueños

El martes a la tarde el sheriff McAllister se presenta en mi casa para hacerme mas preguntas sobre Margot, preguntas que por supuesto respondo a medias.

.- Sheriff ya le he dicho que no sé nada de ella, hace como dos semanas que se fue y si me permite no debería preocuparse por ella, siempre hace esas cosas, un día desaparece y luego vuelve, es normal en ella.- digo dando pequeños golpecitos con mis dedos en la mesa de metal de la sala de comisaría en la que me han metido.

.- Hemos encontrado esto ¿Sabes que es?- hago media sonrisa.

.- No me diga que no sabe lo que es McAllister, no sea tan puritano delante de sus compañeros.-el hombre suspira cansado.

.- Dagger...- advierte.- Este fardo de maria tiene las huellas de Margot.- intento mantener la calma.- ¿Sabes algo al respecto?-

.- Como ya le he dicho mil veces, no, no sé nada de nada.-

.- Bien, acompáñeme.- salimos de la sala y entramos en otra pero esta vez al otro lado del cristal, en la sala hay un tipo sentado en la mesa, trago saliva disimuladamente.- ¿Sabe quien es?-

.- ¿Debería?- le digo.

.- ¿Sabes? Es un tipo de lo más hablador.-

.- Pues que bien para vosotros.- disimulo.

.- Y que lo digas. Delilah...- el agente me mira.- Quiero ayudarte pero no me lo pones fácil.-

.- Una táctica interesante pero sigo sin saber nada de Margot.- suelto y quedamos en silencio viendo por el cristal como un agente se sienta frente al hombre.

.- Muy bien Scooter ¿Reconoces a esta mujer?- le muestra una foto.

.- Uuu, Margot.- sonríe el muy idiota.

.- ¿La ha visto hace poco?-

.- Si.- sentencia.

.- ¿Iba sola?-

.- No.- el aire empieza a atorarse en mis pulmones.- Un coche la recogió y desaparecieron.-

.- ¿Reconoció al conductor?-

.- No.-

.- ¿Entonces tampoco reconoció el vehículo?-

.- No.- está muy tranquilo.- El coche salió disparado nada más entrar ella.- dice el soplón.- Pero sí que puedo decir que era un trasto de coche no creo que fueran muy lejos.- se burla.

.- ¿Conoces a esta chica?- le muestran una foto y Scooter mira disimuladamente a las espaldas del agente, sabe que estoy aquí. Estoy nerviosa pero no puedo mostrarlo pues sé perfectamente que el sheriff me está observando.

.- Me suena.- sujeta la foto en su mano y finge pensar.- Creo que la he visto alguna vez... ¡Si! La he visto, ya me acuerdo.- suelta la foto.- Le robó unos panes a mi prima en la panadería.- el aire vuelve a mi.

.- ¿Está seguro de no haberla visto antes? ¿En alguna otra... situación?-

.- Seguro. Es una simple ladronzuela.-

.- Bien, eso es todo.- todos salen de la sala y por fin me dejan irme.

.- Así que está metida en problemas de nuevo.- escucho la inconfundible voz masculina.

.- Así que ahora eres un soplón.- digo sin parar de caminar.

.- Que puedo decir, era eso o pudrirme en una maldita celda de por vida, uno tiene que sobrevivir como puede.- asiento.

.- Les has mentido.- susurro.

.- Pero ellos no lo saben y por el bien de todos mejor que siga así.-

.- ¿Por qué lo has hecho?- le miro fugazmente.