Y Llegaste Tú| Terminada| Corrigiendo

Capitulo 51

-Ojalá - ruego -.No tengo ganas de asistir. Quiero quedarme toooodo el día en la camita viendo series k-dramas o

-Luca.

-¿Cómo supiste?- me hago la sorprendida y se ríe ronco - Amo esa película. Tengo un gusto no sano por ella.

-Me pasa con spiderman - admite-.Nunca me canso verlo.

-¡Lo sabía!- festejo -.Esos calzones de spiderman no eran para nada casualidad - suelto una risita campante.

-Ven aquí infiltrada insufrible-me arrastra hacia sus calurosos brazos y me hace refugiar en ellos. Le doy la espalda para mejor comodidad. Lance acuna su cabeza en la curva de mi cuello y monta una pierna sobre mi.

Aclaro la garganta al sentir a su amigo chocar con mi culito plano.

-¿Crees que mi madre me ocultaba algo?-acomodo mi cabello detrás de mi oreja y tomo un suspiro para responder.

-Siento que si-contesto segura -.Porque si era un familia casi perfecta ¿por qué de repente se fue?

-Lo que no logro entender es - hace una pausa -.¿Por qué no me llevó con ella?

Ladeo la cabeza buscando algún motivo pero la verdad es que no consigo una que explique por que lo dejó.

-¿Por qué?-musito.

-Es la pregunta que me he hecho toda la vida - dice en voz baja. Suspira y me sonrío en medio de su brazos cuando me apapacha-.Si el día escampa no vayamos a clases hoy.

-¿Qué vamos hacer todo el día? -besa mi cuello y se estira todo hasta volver a encogerse y fundirme entre sus brazos.

-Quedarnos así -dice haciendo un puchero. Junto sus dedos con los suyos-.¿O hay limitaciones?

Estas loca si piensas decirle que si.

No me negaré a esto.

Mas te vale.

-No cabezón-beso el dorso de su mano y la llevo a mi pecho-.Quedémonos así-asiste en mi cuello y su mano traviesa me rodea un seno.

-Mmmmm.

-¿Estas bien?

-Bastante-contesta el muy descarado-.Son las mejores tetas que he tocado en mi vida.

-¡Lance!-le meto un codazo por el estomago y se ríe malicioso mientras aprieta a su antojo por encima de mi blusa-.¡Basta!

Carcajea y me da un sonoro beso en la mejilla.

-Te quiero infiltrada - susurra en mi oído y me giro lentamente hasta quedar frente a frente con él. Su lindo rostro me regala una sonrisa tierna.

-También yo cabezón-me acerco, él hace lo mismo sin borrar su sonrisa perfecta y sin despegar sus ojos de los míos.

-Hay que comprar sabanas al colchón, no sé como puedes dormir así.

Hago una negación.

-Ni te imaginas cuantas veces me he dicho lo mismo y jamás lo hago.

-Se te olvida.

Vuelco los ojos.

-No tengo remedio - digo triste -.No sé como he sobrevivido todos estos años.

-En serio ¿Cómo le haces?- pregunta curioso.

-Ni la mas remota idea.

-¿Recuerdas cuando te equivocaste de baño?-me cubro la cara de la vergüenza -.¿Y luego dejaste tus llaves de tu coche en una mesa?