¿Estás seguro...? - Apolo ribera-

-💗Leire💗-

No sé en qué momento yo ya estaba encima de Apolo besándole apasionadamente.

Tampoco me di cuenta en que momento yo le quité la camiseta y él a mi la mía; sentí que íbamos a dar ese paso que yo nunca me había atrevido a cruzar.

-Ehh... no, no puedo, necesito tiempo. No es que no me halla gustado el beso sino que no estoy preparada; para hacer... eso... ya sabes...-

-¿Follar?-

Mi cara cambió, no esperaba que fuera tan directo con el asunto; pero lo fue, cada día me sorprendía más.

Nos despedimos y también me sorprendió que me besara de nuevo, esta vez con suavidad y calidez y sobre todo; con dulzura, mucha dulzura.

No era de ese tipo de persona que le gustaban las cosas cursis y empalagosas pero por él, ¿por él? Yo daba la vuelta al mundo en bicicleta.

Salió con Truk y ahí fue cuando vi a mi hermano bajando con una maleta y yendo hacia la puerta de salida.

-¿Qué haces?-

-Apolo, en unas palabras muy dulces; para que no sonara mal, me ha echado 2-3 días más o menos...-

Le dije que vale, que me llamara cuando llegase y que no saliera, aunque no tenía pinta de que le apeteciera mucho...

Mi hermano se fue y a los 15 minutos entró Apolo con el perro, era mono el perro y el dueño ya mejor no hablamos.

-¿Qué tal?-

-Aburrida-

-¿Está Llanos?-

-No, se ha ido hace 10 minutos-

-Oh...-

-No te preocupes, te entiendo yo habría hecho lo mismo-

Dije, mientras le acariciaba el brazo y le miraba; tenía unas pequeñas pecas en la zona de la nariz, ¿cómo no había dado cuenta antes? Era la personas más observadora del mundo, nada se me escapaba.

-¿Qué me miras?-

-Las pequeñas pecas que tienes por esta parte-

Las señalé con el dedo, lo pasé por la zona de sus pecas.

-¿Te has fijado?-

-Si, me parecen muy monas-

-Nadie me dice nunca nada, la verdad, creo que ni siquiera se han fijado...-

-¿No?-

-No, eres la primera; te has llevado el premio-

Eso me hizo reír y otra vez nos quedamos mirando otro rato más; esta vez menos tiempo ya que ambos sabíamos que nos íbamos a acabar liando tarde o temprano.

Yo ya estaba encima de él; yo le agarraba del pelo de la nuca y a la vez lo acariciaba mientras que él se dedicaba a acariciar cada parte de mi anatomía que tenía a mano.

-¿Tienes condón?-

-¿Eh?-

-Que si tienes, o no-

-¿Ya estás preparada?-

-Sí...-

Me debí de poner rojísima porque se rió de mí; este se levantó y yo estaba agarrada a él rodeando su cintura con mis piernas mientras nos besábamos.

Me dejó encima de la cómoda de la entrada, seguíamos besándonos y sentía que mis mejillas ardían.

-¿Segura que...?

-Por supuesto-

Esbozó una sonrisa y me volvió a agarrar para irnos a la habitación; mientras yo le besaba desde su mandíbula hasta su clavícula.

Llegamos a su habitación y le dije que pusiera el cerrojo para que, si venía mi hermano no nos pillara.

Me empujó a la cama y se puso encima mío; le quité la camiseta y él a mi, me besaba desde el vientre hasta mi cuello y de vez en cuando subía a mi boca.

Ya me quitó los pantalones y ahora quedaba completamente desnuda ante él; me besaba todas las pecas que tenía entre los pechos, clavícula y abdomen...

-¿Tantas pecas tenías? Y yo sin enterarme...-

Me salió una pequeña risa pero él ya iba serio, se quitó los pantalones y bóxers de un tirón; se puso el condón y ya...

Solté un pequeño grito ahogado entre el dolor y placer que estaba sintiendo; estaba siendo muy dulce conmigo, iba con cuidado y suavidad. De vez en cuando hundía su cara entre mi cuello y hombro.

Llegamos a la vez y se tumbó a mi lado; me acurruqué en su pecho y notaba su respiración agitada, yo estaba igual la verdad. Me había gustado y mucho...

-¿Cuánto?-

-¿Cómo?-

-¿Cuánta nota me das?-

-¿Enserio me estás pidiendo una puntuación?-

No hizo falta que respondiera, él solamente asintió...

-A lo mejor... Un 5,5-

Apolo abrió los ojos como platos y se llevó una mano al pecho y no pude evitar reírme.

-¿Por qué me preguntas por la nota?-

-Me interesa saber cómo ha sido tu primera vez...-

-¿Tanto se ha notado?-

-Un poco...-

Me puse algo triste, no quería que eso se me notara; sentía que me dejaba en ridículo.

-No te preocupes, mi primera vez también fue a los 17 y tengo 20 así que... Ya sabes-

-¿Mucha práctica?-

Nos empezamos a reír y él me acariciaba el pelo y yo su pecho; nos mirábamos y me transmitía mucha paz estar con él.

-¿Qué miras, cotilla?-

-Lo guapo que eres...-

Se ve que le pilló por sorpresa; ¿no estaba acostumbrado a recibir piropos? Si era famoso, bueno no tanto pero 1,1 millones es suficiente. No paraba de mirarme.

-¿Qué?-

-Nada,nada...-

Me puse su camiseta y mis bragas para poder levantarme e ir a mirarlo con incredulidad, algo escondía, se le daba muy mal mentir.

-Apolo...-

-Que no es nada...-

-Solo con eso te estás justificando-

-Para de ser tan lista ya-

-Cuéntamelo...-

-Solo es que, me lo suelen decir mucho en los vídeos de tik tok, pero solo es por ser guapo; nunca me lo habían dicho si no hubiera otra cosa que lo justificara...-

-¿Y tú madre?-

-Eso no vale, es tu madre nunca te va a decir que eres más feo que un pie-

-Vale, entiendo que tu madre no sirva. Y te entiendo, es por eso por lo que no digo que Llanos es mi hermano; se me acercan para poder conocerle. Por eso le pedí que viniera a esa hora, porque no hay nadie... No quiero que me conozcan por "la hermana de Llanos" sino por "Leire" que es lo que soy.-

-Pero a ti son las tías...-

-Y los tíos, aquí se te acercan por cualquier motivo-

-Joder, pues sí que vamos bien...-

-Quiero que sepas, que tú me gustas por cómo eres pero, tampoco soy ciega-

Nos sonreímos y no dimos varios besos, eran reconfortantes y cálidos.

-Y tú a mí también...-

Seguimos así un rato y ya después bajamos para cenar sushi y ya nos fuimos a dormir; al día siguiente volvía mi hermano, o eso creo...