The Deadline (traducción en proceso)

Capitulo 23. Romper

Hermione estaba sentada en su oficina, mirando el reloj mientras la manecilla grande se encontraba a solo unos clics de las doce y la manecilla pequeña se arrastraba muy lentamente hacia las siete. Necesitaba salir a tiempo esa noche, a pesar de todo el trabajo que aún tenía por hacer. Y por "a tiempo" se refería a una hora más tarde de lo que se suponía que debía salir, por supuesto.

–Sra. Weasley, alguien está aquí para verla,– escuchó decir la voz de Teddy.

Hermione presionó el botón de su intercomunicador. –Teddy, ¿qué sigues haciendo aquí?–Trabajando,– respondió simplemente. –Dice que su nombre es Kendall Sheehy y que lo estás esperando.

Hermione parpadeó. Presionó el botón nuevamente. –Envíalo. Luego vete a casa y quédate con tu esposa. Vas a ser padre en cualquier momento.

Podía escuchar a Kendall felicitando a Teddy a través de la pared antes de que se abriera la puerta. Kendall intervino, todo sonrisas.

–No sabía que te estaba esperando–, dijo, mirando el reloj. Sólo tuvo un par de minutos.

–Te dije que iba a estar en el Ministerio para una reunión en un par de semanas, y dijiste que podía verte. Simplemente tomé el riesgo de que estuvieras aquí tan tarde. Qué suerte tengo"

–Típico de mí,– dijo Hermione con una sonrisa. –Pero en realidad estaba a punto de salir

–¿Conmigo? Sí, esperaba que dijeras eso.

–Lo siento, pero no puedo–, dijo, con las mejillas sonrojadas.

–¿Por tu novio?– preguntó.

–No, no tengo novio–. Tan pronto como Hermione dijo eso, se dio cuenta de que probablemente debería haberse guardado esa información para sí misma. Ella ya había decidido no tener más citas hasta que finalizara su divorcio.

–¡Genial! Entonces déjame llevarte a cenar.

Pero Kendall era el mago de sus sueños. Había fantaseado con él durante años. Era inteligente, sofisticado, guapo... Todo lo que ella siempre había pensado que quería en un hombre cuando la peculiar personalidad de Ron demostró no ser suficiente para ella. Pero Draco...

–Lo siento pero no.

Sintiendo que ya eran casi las siete y que obviamente no iba a poder trabajar más, Hermione comenzó a guardar sus cosas.

–Sabes, cuanto más difícil haces esto, más determinado me vuelvo.

Hermione sonrió. –Puede que sea así, pero parte de la razón por la que mi relación terminó es porque no estoy lista. Ni siquiera estoy divorciada, estoy separada–. Una vez que todo estuvo organizado, abrió su cajón y tomó su bolso.

–Entonces déjame invitarte a salir solo como un amigo.

Hermione suspiró y sacudió la cabeza. –Lo siento, Sr. Sheehy –

–Kendall-

– Kendall. Pero realmente temo que si salgo contigo podrías gustarme. De hecho, estoy segura de que me gustarías–. Ella se levantó. –Necesito irme. Tengo que estar en algún lugar.