Falta de esperanza

31 1 1
                                    

(Esta historia es un one-shot que toca temas ciertamente delicados y... Espero que al final no la termine pifiando al tocar temas que no debería)

"Hermanita, no tengo mucho tiempo para hablar ahora. Solo quiero decirte que te quiero, te quiero mucho. Y a papá igual. Os quiero mucho a los dos, gracias por siempre haber estado ahí para mí. Hasta siempre..."

Y una vez el hombre terminó de escribir su mensaje, cerró la tapa del teléfono y se lo guardó en el bolsillo. El mensaje ya estaba enviado, era el momento de acabar con todo...

Lentamente, caminó hasta el borde del edificio, y dirigió una mirada desesperanzadora al enorme precipicio que se situaba en frente de él. Lágrimas brotaban de sus ojos, que fueron cerrados con fuerza debido al dolor e impotencia que sentía al saber que esa era la única solución viable que tenía a su problema...

En sus últimos momentos, se cuestionó si hacer eso valía la pena, si realmente iba a ganar algo lanzándose desde lo más alto de ese edificio. Y al final, tras no pensárselo mucho, determinó que sí, valía la pena terminar con su vida en ese momento... No sentía miedo, ni tampoco incertidumbre, estaba más que listo para hacerlo...

No obstante, cuando ya estaba por saltar, una inesperada voz externa hizo acto de presencia en el lugar...

"Oye, ¿Estás seguro de que vas a saltar? ¿No crees que está un poquito alto?"

Preguntó un hombre castaño, joven, de ojos azules e indumentaria morada. Qué se encontraba sentado al borde del edificio, observando con indiferencia lo que el depresivo sujeto estaba intentado hacer

"Tú... ¿Qué haces aquí? ¿Acaso has venido hasta aquí solo para evitar que me tire?"

Lejos de responder su pregunta, el sujeto le hizo otra pregunta al castaño. Pues era sumamente extraño ver a otra persona en una situación así. El ojiazul se tomó su tiempo antes de responder a la pregunta, agarró la lata de soda que tenía a su lado, y tomó un par de sorbos

"No... Yo ya estaba aquí desde antes de que tú vinieses. Este encuentro nuestro no ha sido más que una las tantas coincidencias curiosas que ocurren a diario en el mundo. Por cierto, ¿Cuál es tu nombre, amigo? El mío es Mike, encantado..."

Respondió él haciéndole saber que no estaba ahí para ayudarlo, simplemente fue un encuentro aleatorio entre dos personas desconocidas

"Me llamo... Me llamo Cesar... Y... ¿Qué haces aquí sentado? Yo vine aquí porque quiero terminar con todo, ¿Pero tú?"

A pesar de que Cesar solo buscaba terminar con su vida lo antes posible, sucumbió ante su curiosidad, y quiso saber más sobre la persona que tenía delante suyo

"Yo suelo venir a este sitio con frecuencia, me gusta ver las vistas del pueblo desde aquí... Son muy bonitas, ¿A que sí?"

Al escuchar tales palabras, el hombre alzó la mirada y contempló las maravillosas vistas del pueblo. Era realmente hermoso... La gente paseando, los coches circulando, familias conviviendo juntas y cuidándose entre sí, parejas mostrándose cariño y afecto mutuo...

"Yo... No veo nada especial en esto, sinceramente, todo se siente apagado, y... Depresivo"

Explicó el hombre manteniendo aún su actitud pesimista y depresiva. Y no era para menos, la vida no le estaba yendo bien últimamente...

"¿Y se puede saber por qué estás así? Dime, ¿Cuáles son tus razones para estar tan pesimista y depresivo?"

Preguntó Mike interesado por saber más sobre ese sujeto, que parecía estar pasando por un mal momento en su vida... Y vaya que si lo estaba pasando...

El multiverso de FNAF 2Where stories live. Discover now